M¨®viles y tabletas sin fronteras

Entre las muchas razones que desmienten a diario la ausencia de fronteras en la UE, una de las m¨¢s f¨¢ciles de percibir por los ciudadanos es el coste que les supone utilizar m¨®viles y tabletas cuando se desplazan entre pa¨ªses de la Uni¨®n. La Comisi¨®n Europea, que mantiene desde hace a?os una batalla para abaratar los precios, acaba de confirmar su prop¨®sito de acabar con las tarifas de itinerancia (roaming para los que se enteran mejor en ingl¨¦s), en un plazo a¨²n no determinado entre 2014 y 2016.

Neelie Kroes, encargada de la Agenda Digital Europea y vicepresidenta de la Comisi¨®n, defiende no solo la retirada de sobrecostes por moverse en Europa, sino que las llamadas entre tel¨¦fonos fijos cuesten lo mismo de Madrid a Mil¨¢n o Estocolmo que entre ciudades de un mismo Estado. Eso forma parte de los esfuerzos para construir el mercado ¨²nico europeo de telecomunicaciones, hasta ahora cuestionado por las legislaciones, los est¨¢ndares o las normas de protecci¨®n de los consumidores en cada pa¨ªs.

Cabe esperar que las compa?¨ªas de telecomunicaciones no aprecien mucho unos cambios que afectan a su negocio de consumo telef¨®nico y de Internet en el extranjero. Sin embargo, ya han rebajado un poco los precios este verano; y con vistas al pr¨®ximo tendr¨¢n que optar entre aceptar nuevos pasos ¡ªcomo el de aplicar a los usuarios sus tarifas nacionales cuando viajan a otro pa¨ªs de la UE¡ª o lanzarse a un pulso m¨¢s duro con las autoridades europeas, que se dicen dispuestas a liberar a los clientes de la obligaci¨®n de seguir a sus operadores cuando viajan. El Parlamento europeo ha de intervenir tambi¨¦n en el proceso de regulaci¨®n comunitaria, y es probable que los eurodiputados est¨¦n m¨¢s cerca de los electores que de los operadores.

Bienvenido sea lo que contribuya a reducir los precios, una medida que en realidad debe redundar en m¨¢s tr¨¢fico y mayor desarrollo del sector. Apagar el m¨®vil o desconectar la itinerancia de datos en cuanto cruzas una frontera nacional deber¨ªan dejar de ser la preocupaci¨®n a?adida de todo viaje al extranjero... al menos en el interior de la Uni¨®n Europea.