La sociedad civil abandona las negociaciones del clima
PorAlejandro Gonz¨¢lez, de Coalici¨®n Clima, desde la Conferencia del Clima de Varsovia. Puedes consultar las anterioresaqu¨ª.
A un d¨ªa para el final de las negociaciones, todos los plenarios y reuniones, ya encabezadas por los ministros, han empezado a alargarse a altas horas de la madrugada. Y todo sigue en blanco: la financiaci¨®n de los diferentes fondos de lucha contra el cambio clim¨¢tico siguen vac¨ªos. La Uni¨®n Europa da cifras confusas, algunos pa¨ªses dan t¨ªmidas aportaciones individuales y la adaptaci¨®n de los pa¨ªses m¨¢s pobres sigue absolutamente raqu¨ªtica. Los compromisos de reducci¨®n de emisiones siguen siendo una inc¨®gnita. Como ya hemos dicho anteriormente, las negociaciones retroceden por culpa de Jap¨®n, Australia, Estados Unidos, Canad¨¢¡
19 COPs, casi 20 a?os de negociaciones clim¨¢ticas, frustraciones, y fracasos, y las ONG han dicho un gran ¡°basta ya¡±. Las organizaciones han aguantado fracasos, represi¨®n policial, cierres de negociaciones, noches interminables, reuniones in¨²tiles, viajes por todo el mundo y miles de propuestas hasta este momento.
Con camisetas blancas y sin logotipos de las ONG, cientos de observadores de la sociedad civil, que inclu¨ªan a algunas de las organizaciones integradas en Coalici¨®n Clima, han desfilado en fila india bajo los objetivos de la prensa de todo el mundo hasta la salida en donde han tirado a la basura las acreditaciones oficiales. Dentro quedan las personas que siguen las negociaciones junto a prensa, negociadores y ministros, pero buena parte de la raz¨®n de ser de esta cumbre, la sociedad civil, est¨¢ ahora en el centro de Varsovia reunida para los pr¨®ximos pasos Esta tarde m¨¢s que nunca la raz¨®n de ser de una cumbre alternativa como Construyendo Puentes. Ir¨®nicamente esta ma?ana un negociador comentaba que lo que hab¨ªa que hacer de una vez por todas era levantarse e irse de aqu¨ª a hablar de cambio clim¨¢tico con quien mereciera la pena hablar, pero en otra parte.
Nada puede seguir como hasta ahora, cuando, de forma pac¨ªfica pero muy visible las personas que han salido han desfilado delante de las salas de reuniones y plenarios con su mensaje. Ya ha habido otros abandonos, pero este ha tenido un componente m¨¢s masivo y de enfado que simb¨®lico y ruidoso. Se ha abandonado igual que muchos pa¨ªses empobrecidos llevan a?os abandonando las salas de negociaci¨®n cuando no pueden m¨¢s, por eso muchas delegaciones han apoyado y se han sumado al gesto. La sociedad civil cree en el proceso, lo fortalece y lo nutre de alternativas e ideas. Por eso, de la camiseta blanca los activistas de las ONG y movimientos llevaban encima un peque?o gui?o a la COP20 de Per¨² del a?o que viene: un cartel en ingl¨¦s y en castellano que dec¨ªa ¡°#Volveremos¡±.
Las organizaciones volver¨¢n a Per¨², a la cumbre de Par¨ªs y a las cumbres futuras a protestar, a abandonarlas y a volver al a?o que viene para seguir siendo escuchadas y evitar la cat¨¢strofe clim¨¢tica.
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