Siete pel¨ªculas porno mejores que la ¨²ltima de Lars von Trier
Sus actores avisan: el sexo expl¨ªcito de 'Nynphomaniac' no excita al respetable Rescatamos siete joyas de cine er¨®tico que s¨ª lo hacen
"Hubo dos cosas que me negu¨¦ a hacer en Nymphomaniac: masturbar a un actor porno y aparecer en el mismo plano con ¨¦l mientras se masturbaba". Son palabras de Charlotte Gainsbourg, protagonista de la ¨²ltima criatura de Lars Von Trier. El realizador de la provocaci¨®n estrena el 25 de diciembre ¨Coportun¨ªsima fecha¨C su filme sobre la vida de una ninf¨®mana, donde el personaje encarnado por la hija de Jane Birkin narra qu¨¦ significa eso de vivir con una adicci¨®n al sexo en el historial de trastornos personales.
La pel¨ªcula contiene escenas expl¨ªcitas, de sexo anal y oral a tres bandas, un montaje de penes y cuestiones masoquistas. La debutante Stacy Martin cont¨® con una doble para las escenas m¨¢s embarazosas. "Se llamaba Cindy. Creo que es una estrella del porno en Alemania", dice. As¨ª, cuando todo estaba adquiriendo tintes verdaderamente ¨ªgneos, es el coprotagonista de la historia, Stellan Skarsgard, quien lanza el jarro de agua fr¨ªa: "La pornograf¨ªa solo tiene un prop¨®sito, que es excitarte para que te masturbes. Pero si ves Nymphomaniac, es una peli porno mala. Despu¨¦s de verla un rato, apenas reaccionas a las escenas de sexo expl¨ªcito. Se vuelven tan naturales como un bol de cereales". Acab¨¢ramos.
Cabe imaginar que lo de excitar no sea la intenci¨®n de Lars von Trier, que lo que este se?or intenta es hacer otra cosa m¨¢s profunda. O puede que s¨ª, y que todo sea un fiasco ("imbecilidad con ¨ªnfulas de transgresi¨®n", escribi¨® Carlos Boyero, sobre Anticristo, una de las ¨²ltimas afiliaciones Gainsbourg-Von Trier). Pero por si acaso, proponemos recordar siete joyas alternativa del erotismo. Porque existe la pornograf¨ªa de arte y ensayo. Y no es lo que hace Lars Von Trier, sino que tambi¨¦n excita. Desempolvemos, pues, la videoteca.
1. El diablo y la se?orita Jones (Gerard Damiano, 1973).
Si Miguel Mihura se hubiera dedicado al porno, probablemente habr¨ªa firmado esta fascinante pieza. La se?orita Jones, virgen a los 40, decide suicidarse por lo aburrido de su existencia. Una vez en el cielo, y a pesar de su conducta mojigata en la Tierra, es expulsada al infierno por haberse quitado la vida.
Se trata de la gran obra maestra de Gerard Damiano, m¨¢s conocido por Garganta profunda, que obtuvo elogios m¨²ltiples de la intelectualidad neoyorquina. Que la masa no nos ciegue: El diablo y la se?orita Jones mola bastante m¨¢s.
2. Cafe Flesh (Rinse Dream, 1982)
Se han inventado muchos cuentos posapocal¨ªpticos, pero ninguno imagin¨® que un ataque nuclear dividir¨ªa a la poblaci¨®n entre al¨¦rgicos al sexo y provocadores profesionales del onanismo. Lo hace Cafe Flesh, un h¨ªbrido entre pornograf¨ªa y ciencia ficci¨®n, que tiene segunda y tercera parte.
"Es uno de los t¨ªtulos m¨¢s interesantes de los 80, una d¨¦cada que, sin embargo, no fue muy buena para el g¨¦nero, porque la explosi¨®n de la industria XXX y la llegada del v¨ªdeo provocaron una disminuci¨®n de las producciones m¨¢s art¨ªsticas en pro de las comerciales", cuenta el periodista y experto Luis Landeira.
3. La orina y el rel¨¢mpago (hermanos Lapiedra, 2004).
"La pel¨ªcula porno ha muerto en Espa?a", sentencia Paco Gisbert, periodista especialista en el g¨¦nero. Pero en la primera d¨¦cada del a?o 2000 daba sus ¨²ltimos coletazos, como muestra esta delicia del surrealismo encumbrada por Agust¨ª Villaronga, que lleg¨® a compararla con la filmograf¨ªa de Stanley Kubrick.
El argumento es as¨ª de crudo: dos prostitutas bul¨ªmicas, lesbianas y adictas a la coca¨ªna, inician un truculento viaje hacia la destrucci¨®n propia
4. Hot Rats (Narc¨ªs Bosch, 2003).
El porno espa?ol no se entiende sin la perversa mente de Narc¨ªs Bosch, que rod¨® esta pel¨ªcula en solo una semana en un hospital de Terrassa, con el c¨¦lebre Nacho Vidal en el reparto. A juicio de Paco Gisbert, Hot Rats contiene una de las mejores escenas de sexo jam¨¢s rodada en la pornograf¨ªa nacional: Bibian Norai y Malena Conde se enfrentan en un ring de boxeo. No es dif¨ªcil imaginar el modo en que se desarrolla el enfrentamiento...
Fue la pel¨ªcula extranjera vencedora en los AVN (Oscars del porno) de 2005.
5. Night trips (Andrew Blake, 1989)
Night trips es una de las perlas del movimiento porno-chic, nacido a finales de los 80, con una marcada preocupaci¨®n est¨¦tica. "Es una obra estilizada y bonita, Con modelos, escenarios de lujo, m¨²sica sugerente y sexo casi coregrafiado", asegura Paco Gisbert.
Belleza y pornograf¨ªa se abrazan en un mismo concepto. Lo explica Gisbert: "El cine porno puede tener los mismos referentes y criterios de calidad que el cine convencional. La pena es que sea poco conocido".
6. Tras la puerta verde (Artie Mitchell, 1972)
Tras la puerta verde es al cine porno lo que El Padrino al cine convencional: magna e indiscutible obra maestra. Con elementos de thriller (los malos secuestran a una jovencita a la que luego sodomizan), la pel¨ªcula est¨¢ encuadrada en la llamada Edad de Oro del Porno (la producci¨®n del g¨¦nero en Norteam¨¦rica en la d¨¦cada de los 70). Otras pel¨ªculas de la misma corriente son Barbara broadcast, Debbie does Dallas o The opening of Misty Beethoven.
7. All about Anna (Jessica Nilson, 2005).
Una f¨¦mina dirige este relato de la vida sexual (activ¨ªsima, se entiende) de una mujer soltera, interpretada por la voluptuosa Gry Bay. Lars Von Trier (?oh, se cierra el c¨ªrculo!) es uno de los productores del filme.
"Es la delicatessen escandinava de los ¨²ltimos a?os", apunta Luis Landeira.
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