El abus¨®n

Por fin los gobernantes espa?oles han conseguido captar en el exterior una atenci¨®n informativa similar a la de la caza del toro de Tordesillas o a la que obtuvo en su d¨ªa el lanzamiento de cabra desde el campanario de Manganeses de la Polvorosa. El maltrato a los animales exige dar cada vez m¨¢s explicaciones, y aunque siempre hay cr¨¢neos privilegiados dispuestos a justificar tradiciones milenarias de hace medio milenio, no acaba de ser presentable el espect¨¢culo de una turba humana persiguiendo, acorralando y linchando bovinos. Unas especies evolucionan m¨¢s que otras. Como los caballos de Aquiles en un memorable poema de Kavafis, llegar¨¢ un momento en que los ¡°nobles animales se entreguen al llanto¡± en el ruedo ib¨¦rico. El caso es que el Gobierno espa?ol se ha puesto a buscar una alternativa para llamar la atenci¨®n. Y lo ha hecho con gran diligencia, a la vista de los resultados. Por decirlo de una manera brutalmente simb¨®lica, ha puesto a la mujer al borde del abismo, despose¨ªda de su libertad, en lo alto del campanario, ahora que en la Polvorosa los quintos ya no despe?an a nadie. Gracias a The Times, referente mundial del periodismo conservador, hemos podido descubrir que el actual Gobierno espa?ol no es ni siquiera de naturaleza conservadora. Es un matiz interesante. Lo que viene a recordar el editorial de The Times (23.12.2013) es que una cosa es ser un conservador y otra muy diferente es ser un abus¨®n: ¡°Trasladar la legislaci¨®n penal a un tema de salud y de conciencia de las mujeres es un abuso de poder del Gobierno¡±. Una pr¨¢ctica que el editorial asemeja a los reg¨ªmenes autocr¨¢ticos. Otro diario de referencia, The Financial Times, dedic¨® su editorial a la cuesti¨®n catalana, Spain¡¯s next crisis (15.12.2013), con una recomendaci¨®n final: ¡°Es un problema pol¨ªtico que requiere una soluci¨®n negociada". Veremos qu¨¦ especie se impone en los conservadores. El abus¨®n o el dem¨®crata.