Johan Cruyff, car¨¢cter es destino

¡°Nac¨ª justo despu¨¦s de la guerra, en 1947. Un tiempo dif¨ªcil. Mucha gente cercana hab¨ªa perdido a los suyos¡­ Mis padres ten¨ªan una tienda de frutas y verduras; empez¨¢bamos lo que podr¨ªamos llamar una vida nueva en un barrio de la periferia de ?msterdam. El campo del Ajax estaba a dos minutos de casa. Mi juguete preferido era la pelota. Mi padre muri¨® cuando yo ten¨ªa doce a?os; enferm¨® del coraz¨®n ¨Cen el fondo lo mismo que tuve yo¨C. Mi madre tuvo que vender la tienda porque no pod¨ªa llevarla sola. No recuerdo bien ese momento, soy sencillo de pensamientos, pero perder a mi padre fue un problema enorme. Nos hac¨ªa mucha falta, en todos los sentidos. Era de los pocos que, al tener tienda, conduc¨ªa una furgoneta, y cuando ¨ªbamos a jugar a alg¨²n sitio nos llevaba a todos los ni?os. Se notaba mucho su ausencia, porque ten¨ªamos que coger la bicicleta. Mi madre empez¨® a trabajar en el Ajax limpiando los vestuarios; iba a verla a menudo, y los jugadores me dejaban jugar con ellos. Cuando pas¨¦ a profesional, con 16 a?os, no quise que siguiera y ella busc¨® otra cosa. En aquellos a?os toda la gente del club me ayud¨® mucho. Y aunque estaba muerto, con mi padre siempre tuve una relaci¨®n perfecta¡±.

Lo dijo en el minuto 35 de la entrevista. Bebimos agua. Me sudaban las manos, como ocurre cuando el entrevistador sabe que ha llegado a una isla. Johan Cruyff continu¨® su relato.

¡°Hablo a menudo con mi padre. Ante un problema le digo: ¡®?Est¨¢s de acuerdo o no est¨¢s de acuerdo?¡¯, y cuando me despierto s¨¦ lo qu¨¦ voy a hacer. Un d¨ªa le puse a prueba: ¡®Yo creo que est¨¢s ah¨ª, aunque muchos piensan que estoy loco, porque est¨¢s muerto¡­ ?Por qu¨¦ no me lo demuestras y me paras el reloj?¡¯. Me fui a dormir, y por la ma?ana el reloj no funcionaba. Me dije: ¡®Esto es absurdo¡¯, y lo llev¨¦ a la relojer¨ªa de mi suegro. ¡®Mira, ya funciona. Estar¨ªa un poco sucio¡¯. Al d¨ªa siguiente se hab¨ªa parado de nuevo. Volv¨ª y le dije al t¨¦cnico: ¡®Eres s¨²per malo¡¯. Lo abri¨® para revisarlo: ¡®?Qu¨¦ raro, ahora ya est¨¢ en marcha; est¨¢ perfecto!¡¯. Aquella noche le dije a mi padre: ¡®Te creo, s¨¦ que est¨¢s ah¨ª, no hace falta que lo vuelvas a parar¡¯. Y las agujas se quedaron en paz¡±.

Nada de lo que vemos en el f¨²tbol ser¨ªa posible sin la llegada, el carisma y el talento inigualable de Johan", dice Pep Guardiola

Cruyff aparece en la sede de la Fundaci¨®n que lleva su nombre con un un jersey de cachemir italiano, da tres besos, responde a todo y se blinda con una determinaci¨®n salpicada por alg¨²n silencio t¨ªmido. Dice factbook y twister, y por escucharle pronunciar quiz¨¢s, servidora pagar¨ªa. Debe ser la consecuencia de una filia familiar: a lo largo de los setenta, en el comedor de mi casa, tuvimos dos h¨¦roes en la transici¨®n: Su¨¢rez y Cruyff. Mi padre incluso sujetaba el cigarrillo como ¨¦l. Logr¨¦ entrevistarlo hace m¨¢s de veinte a?os, para la revista Woman, y le pregunt¨¦ cosas como si le gustar¨ªa entrenar a un equipo de f¨²tbol femenino: ¡°No, en absoluto. Que Dios me libre de esa cruz¡±, me respondi¨®.

Menos distante y m¨¢s confiado que en 1993, habla en tono bajo y con un batido de acentos cremosos. Con sus famosos cinco idiomas my way.

Cuando viv¨ªa en Whasington DC, en 1980, ten¨ªa relaci¨®n con Jimmy Carter y se convirti¨® en embajador de f¨²tbol de Estados Unidos. En su contrato se obligaba a grabar varios spots para ni?os minusv¨¢lidos y Downs, y justo en su vecindario ten¨ªa un ni?o con el s¨ªndrome de Down que no pod¨ªa jugar en la calle como los otros. Empez¨® a visitar la casa de los Cruyff y ¨¦ste le ense?aba a chutar, a cabecear¡­Hasta que un d¨ªa de verano, lo vio entrar en casa y se lanz¨® a la piscina. Ni su madre ni nadie hab¨ªa podido meterlo en el agua, le aterrorizaba. ¡°Y a partir de ah¨ª empez¨® a nadar¡±. Desde entonces Cruyff decidi¨® compartir su seguridad, su famosa ¡°mentalidad positiva¡±. Esa fue la semilla.

A sus 66 a?os defiende a muerte el binomio ¡°deporte contra marginaci¨®n¡±. La Johan Cruyff Foundation, creada en 1997, ha extendido sus tent¨¢culos por todo el mundo: ha creado 190 campos, los cruyff courts, muchos en medio de la nada; ha acogido a m¨¢s 50.000 ni?os discapacitados y ha acercado el deporte a otros 300.000 peque?os; ha fundado un m¨¢ster internacional en Gesti¨®n Deportiva, y su fe en que ¡°los principales mandamientos de la vida vienen del deporte¡± es inquebrantable.

Cuando el holand¨¦s volador lleg¨® a Barcelona en agosto de 1973 ¨Cel pasado a?o se cumplieron cuatro d¨¦cadas¨C, tra¨ªa consigo un aire de modernidad europea, de libertad y flequillo. Era el Cruyff de la adrenalina, veloz, altivo, respond¨®n, tozudo, capaz de alternar frases surrealistas y grandes verdades con y sin bal¨®n. Uno de los hombres m¨¢s atractivos entre los a?os setenta y los ochenta. Chuler¨ªa rubia. Lo que ha sido Mick Jagger en el rock, eso s¨ª, sin haber pisado jam¨¢s un coffeeshop.

Cruyff no solo fue el mejor jugador de su ¨¦poca, y uno de los mejores de la historia. Dicen que invent¨® buena parte del f¨²tbol moderno, tanto en el terreno de juego como en el de los contratos, la publicidad y las broncas con los clubes.

¡°?Qui¨¦n te ayuda a ti chico?, me pregunt¨® mi suegro (Cor Coster) cuando nos conocimos.Y yo le respond¨ª: ¡°A mi no me ayuda nadie¡±. Y me dijo que ¨¦l se ocupar¨ªa.

En la junta me preguntaron:¡°?Qui¨¦n es ¨¦ste?¡± . ¡°Bueno, este me ayuda a mi¡±,les dije. ¡°?Y por qu¨¦ te ayuda?¡±

- Vosotros ten¨¦is 50 a?os, yo tengo 17 y ¨¦l tambi¨¦n tiene 50 por lo tanto hay un poco de equilibrio.

- No, no, si ¨¦l est¨¢ aqu¨ª no hablamos, me replicaron.

Y me desped¨ª: ¡°Si quer¨¦is algo a partir de ahora hay que hablar con ¨¦l¡±. Enseguida me llamaron. Entonces no exist¨ªa el manager, no exist¨ªa nada de esto. Y nos hemos re¨ªdo mucho despu¨¦s¡­sin darnos cuenta inventamos el marketing, el renting...

Mantiene una estrecha relaci¨®n con grandes del deporte internacional, aunque hay un nombre que destaca por encima de todos: Pep Guardiola, el alumno que ha llegado m¨¢s lejos, el favorito. Le pregunto a Guardiola qu¨¦ ha significado Cruyff en su vida deportiva y personal, y responde desde M¨²nich por e-mail: ¡°Nada de lo que vemos ahora y hemos visto en los ¨²ltimos 15 o 20 a?os en el c¨¦sped de un campo de f¨²tbol hubiera sido posible sin la llegada, el carisma, el talento inigualable de Johan. Imposible visualizar todo esto sin ¨¦l¡±.

Su hijo, tambi¨¦n futbolista, Jordi Cruyff afirma que Johan ha sido un gran padre ¡°diferente y especial, estricto, exigente, pero eso lo valoro mucho ahora porque siempre hizo que sacara lo mejor de mi, que no me conformara ni me acomodara¡±. Le pregunto si la sombra del padre ha sido muy alargada y Jordi Cruyff admite que ha sido dif¨ªcil ser su hijo. ¡°De joven fue duro llevar la etiqueta de enchufado. Con la edad fui madurando y ya no me importa lo pensar¨¢n los dem¨¢s. Las cosas me han ido bien dentro y ahora fuera del terreno de juego y eso me enorgullece a mi y a mi padre".

El d¨ªa anterior a nuestra entrevista me cogi¨® el tel¨¦fono Danny Coster, la mujer de Cruyff. Se conocieron de muchachos, pertenec¨ªan a la misma cuadrilla. Los trench y las botas m¨¢s chic de la Espa?a de los ochenta, madre cien por cien holandesa ¨Co como imaginamos a las madres modernas holandesas- que mantienen unida una gran familia de hijos, sus parejas y sus ex parejas, adem¨¢s de ocho nietos. He visto su boda en blanco y negro en YouTube, parecen pr¨ªncipes. En casa de la pareja se escucha a Diana Krall y Elton John, se desayuna tarde y se respira calor ¨Chijos, parejas, ex y ocho nietos¨C y compromiso.

¡°Acabamos de llegar de Zara, como cada a?o en diciembre; pasamos horas all¨ª, y todos los vendedores imaginan que tenemos unos nietos muy mimados, pero no compramos para ellos sino para quienes m¨¢s lo necesitan¡±, me confiesa ella. A punto de cumplir 45 a?os de matrimonio, la hija de Cor Coster, un vendedor de diamantes que se convirti¨® en manager del futbolista, es la otra mitad de Johan Cruyff.

?Qu¨¦ significa Danny en su vida?

Es important¨ªsima en todas las cosas que hago, que muchas veces son problem¨¢ticas. Tiene una opini¨®n muy formada. Antes de empezar un proyecto tenemos casi batallas sobre si debo hacerlo o no. Es muy fuerte y piensa muy bien.

?Por qu¨¦ no lleva usted m¨®vil, ni utiliza el e-mail?

Si alguien me busca, me encuentra. Vivo con mucha intensidad, pero entre la actividad y el descanso tiene que haber un equilibrio. Y con el m¨®vil no es posible.

?Hace tiempo que no tiene estr¨¦s?

No tengo estr¨¦s, no. Aunque me encanta resolver problemas, me gustan los puzles y esas cosas; los he hecho toda la vida. Si me encuentro un problema quiero saber c¨®mo puedo resolverlo.

?Le cost¨® mucho dejar de fumar?

No. No he fumado nunca m¨¢s. Pero esas son cosas que en mi mente est¨¢n claras: si se puede elegir bien; si no, hay que olvidar.

??Y ha hecho meditaci¨®n, yoga, ayurverda?

Siempre he hecho todo. Pruebo todas las cosas nuevas, y luego sigo o no, desde energ¨ªas, spas o ayurveda. Adem¨¢s, he visto operaciones de todo tipo, de cerebro, de cadera, de rodillas, de tobillos¡­ Esto surgi¨® un d¨ªa en que un amigo me dijo ¡°Ostras, ? y si el doctor se equivoca de rodilla?¡± , estaba tan obsesionado que me ofrec¨ª a entrar en el quir¨®fano con ¨¦l y ¡°vigilar¡± al doctor. Y as¨ª empez¨® la cosa, y fui entrando con uno, con otro¡­.

?El deporte salva?

Sabemos que quien es un l¨ªder para lo malo tambi¨¦n puede serlo para lo bueno; solo depende del ¨¢mbito. Y con nuestros campitos, por ejemplo, les ense?amos esto. Organizamos torneos, y un torneo significa que hay que invitar a otros equipos, que hay que ir al supermercado, hay que poner un poco de m¨²sica¡­ hay que organizarlo todo. Tienes que ir a la polic¨ªa para que ese d¨ªa te ayuden a organizarlo; y, en vez de que la polic¨ªa les busque a ellos, son los chicos los que buscan a la polic¨ªa, lo que hace que los malos h¨¢bitos bajen una enormidad. Nosotros seguimos el m¨¦todo Montessori, usamos su conocimiento y lo traspasamos a lo nuestro, al deporte. Todo el mundo ve el deporte como tiempo libre, pero no lo es. Es educaci¨®n y es crear. Porque en el deporte, en l¨ªneas generales, est¨¢ la vida. Nosotros tenemos 14 mandamientos ¨Chay que hacer las cosas juntos (ganar juntos y perder juntos), hay que intentar cosas, hay que respetar al contrario, hay que¡­¨C que sirven totalmente para la vida y que vienen del deporte¡±.

?C¨®mo se ata los cordones cada d¨ªa sabiendo que es un mito?

Sobre todo, no hay que pensarlo, aunque a veces me sorprende que la gente sepa m¨¢s de m¨ª que yo mismo. Dicen que me conocen m¨¢s de cuatro mil millones de personas.

Me han dicho que en su familia no son religiosos. ?No cree en Dios?

Yo s¨ª creo. No s¨¦ si se llama Dios, pero creo mucho. Hay algo superior a nosotros. No s¨¦ c¨®mo, ni por qu¨¦, pero lo hay. Y creo tambi¨¦n que t¨² puedes tener calidad, pero tienes que ser un batallador, invertir el 100% de ti mismo para recoger el 100% de tus posibilidades, si no lo haces no lo tendr¨¢s. Para dar batalla hay que ir con todo.

Y saber rodearse de las personas adecuadas.

Toda mi vida he tenido alrededor de cinco o seis asesores de todo tipo. Casi todos est¨¢n en la fundaci¨®n. Cuando dej¨¦ de ser entrenador e hice algunas cosas, me dijeron: ¡°?Ostras, ?c¨®mo puedes hacerlo t¨², si no has estudiado?¡±. De hecho, solo tengo un diploma: el de nataci¨®n. Hasta que piensas que ellos han estudiado un libro que est¨¢ escrito, y t¨² uno que no est¨¢ escrito: la calle, el comercio, el deporte... la vida. Aprender a actuar con cien mil personas contempl¨¢ndote que te abuchean; ir a vivir con tu familia a otro pa¨ªs y buscar casa, colegios; tener tambi¨¦n que ser el mejor cuando pita el ¨¢rbitro... T¨² tienes cosas por las que nadie ha pasado, por lo tanto tienes capacidad. Quiz¨¢s no tienes el conocimiento, pero eso se puede adquirir. No es necesario saberlo todo sino ser consciente de lo que no sabes. Si t¨² dices, ¡°?Hostia, no tengo ni pu?etera idea de esto¡±, busca a alguien, escucha a los dem¨¢s. Aunque tengo mis propios pensamientos.

Usted tiene mucha autoridad. Y se sale con la suya.

S¨ª, es que esas cosas son as¨ª. Cuando iba a nacer nuestro tercer hijo, Danny y yo pensamos, ¡®Bueno, estamos aqu¨ª¡¯, y aqu¨ª hab¨ªa dos nombres que nosotros no conoc¨ªamos: Nuria y Jordi. Y resulta que fue ni?o, as¨ª que fue Jordi. Hicimos el registro en Holanda y al venir aqu¨ª a inscribirlo me dicen: ¡®No, no, Jordi no puede ser¡¯. ¡®?C¨®mo que no puede ser?¡¯, repliqu¨¦. ¡®Aqu¨ª se tiene que llamar Jorge¡¯. ¡®No, se llama Jordi, y se escribe as¨ª...¡¯. ¡®Eso no podemos hacerlo¡¯. ¡®Si no quieres hacerlo no lo hagas, es tu problema, no el m¨ªo, pero si escribes algo y yo lo tengo que firmar, entonces lo escribes como yo quiero¡¯, les dije. Al final lo hizo, y me dijo: ¡®Hago lo que quieres, ?eh?¡¯. No es que yo cambiara la ley, ni mucho menos, pero sin saber nada de pol¨ªtica lo consegu¨ª.

A su llegada a Barcelona se organiz¨® un revuelo enorme, ?qu¨¦ recuerda de ese momento?

S¨ª, cuando vine aqu¨ª hab¨ªa problemas pol¨ªticos y deportivos: mi club, el Ajax, me hab¨ªa vendido ya, de palabra, al Real Madrid. Pero como yo siempre he sido de ¡°lo que ellos dicen no lo hago¡± y ten¨ªa ya relaciones en Barcelona -a trav¨¦s de dos antiguos entrenadores m¨ªos, Vic Buckingham y Rinus Michels-, me dije: "No voy para Madrid, voy a Barcelona¡±. Y a partir de ah¨ª se organiz¨® un l¨ªo tremendo: con los papeles, el transfer, la clasificaci¨®n de Holanda para el Mundial... El d¨ªa que debut¨¦ fue una liberaci¨®n; y ese mismo d¨ªa hab¨ªa una serie de catalanes que se hab¨ªan reunido en secreto en una iglesia y hab¨ªan acabado en la c¨¢rcel, as¨ª que todo el mundo fue a verlos all¨ª y no estuvieron en el campo.

?Se refiere a la detenci¨®n de la comisi¨®n permanente de la Asamblea de Catalunya en la parroquia Maria Mitjancera?

S¨ª, no sab¨ªa nada de nada de eso, pero Armand Carab¨¦n, que era un buen amigo y presidente del Bar?a [fue quien hizo las negociaciones para el fichaje], me cont¨® que aquella gente estaba en la c¨¢rcel y me pidi¨® que firmara unas fotos. Yo las firm¨¦ sin saber nada de pol¨ªtica. Entonces me sorprendi¨® la que se mont¨®, porque no estaba acostumbrado a estas cosas.

?Sigue viendo los Bar?a-Madrid?

S¨ª, s¨ª, pero no soy fan¨¢tico

?Y con el club, silencio?

S¨ª, no comparto como piensan y por tanto no quiero relaci¨®n.

?Por eso devolvi¨® la insignia de presidente de honor?

S¨ª. Para m¨ª la presidencia de honor es una responsabilidad, y, si no hay di¨¢logo ni respeto, es una incoherencia e hipocres¨ªa seguir llevando esa distinci¨®n.

?Qu¨¦ es lo que m¨¢s le molesta del Bar?a?

?Catalu?a y Espa?a? Yo creo que no entenderse es una estupidez. Cada uno puede usar al otro de una manera positiva"

Que con el presupuesto que tienen eliminan los deportes amateur del club, que es ¡°m¨¢s que un club¡±. Siempre la excusa del dinero.

?Catalu?a tiene un problema?

Catalu?a tiene el mismo problema desde hace 40 a?os, le veo poca diferencia. Lo que falta en ambos sentidos es el respeto a pensar diferente, a poder hacer las cosas diferentes y no solo aprovecharse.

?Comprende el sentimiento independentista?

Bueno, sobre todo es un discurso financiero, ah¨ª est¨¢ la base, y a partir de ah¨ª cada vez es un pasito m¨¢s.

?No cree que es un asunto pol¨ªtico?

Creo que es una estupidez.

?Separarse de Espa?a es una estupidez?

No, lo que yo creo es que no entenderse es una estupidez. Porque cada uno puede usar al otro de una manera positiva.

?Pero dentro de Espa?a?

De pol¨ªtica no tengo ni idea, pero si desde hace 40 a?os unos dicen que est¨¢n mal tratados, hay que cambiar el tratamiento.

?Cree que el poder escucha?

No, en l¨ªneas generales, no. Solo escucha cuando va mal, no escucha para mejorar las cosas. Yo soy tozudo y lo s¨¦.

De usted tambi¨¦n dicen que es arrogante, pesetero, seductor¡­ ?C¨®mo ha vivido todo esto?

A decir verdad, hay muchas cosas que pasan de las que no me doy ni cuenta. Dicen que soy arrogante pero a menudo me cruzo con gente pero no les veo. Estoy en mi mundo, pensando en otra cosa. Puede que sea un escudo, una forma de defensa.

?Tambi¨¦n con las mujeres?

Normal, llevo 45 a?os casado, tengo 2 hijas.

Pero, ?c¨®mo ha llevado su atractivo?

A todo el que es conocido le pasa lo mismo, yo no me doy cuenta.

?Ha tenido alg¨²n mito en el cine, alguna actriz?

No, no pienso en esas cosas. Ni elijo mi propia ropa. Quiero decir que son asuntos que no est¨¢n en mi mundo.

?De qu¨¦ tiene miedo?

Bueno, yo tengo miedo a muchas cosas. El miedo a la altura, ahora un poco menos, pero hace quiz¨¢s 15 a?os o m¨¢s, a partir del segundo piso no pod¨ªa acercarme al cristal. Nunca me ver¨¢s en el metro.

?Tiene claustrofobia?

S¨ª. A ir a un TAC donde metes la cabeza. No hago esas cosas. Los telesillas, por ejemplo, me superan; cierro los ojos y estoy en otra cosa, en otro sitio, me enga?o a mi mismo.

En cambio, le asocio con la idea de la libertad.

S¨ª, casi todos en mi generaci¨®n, en Holanda, eran guerreros. Quer¨ªamos cambiar las cosas que no estaban bien, que eran injustas.

Su sentido de la justicia¡­

Bueno, nosotros, por ejemplo, jugamos el Mundial de 1974, y hac¨ªa justamente dos a?os que el f¨²tbol era profesional. Las empresas ven¨ªan, hab¨ªa promociones¡­ Y la Federaci¨®n, en esa ¨¦poca, negoci¨® con Adidas. Quer¨ªan que llev¨¢ramos su camiseta, y yo ped¨ª mi parte. Me la negaron diciendo que la camiseta era suya, y yo les dije que la cabeza era m¨ªa. Entonces en todo el Mundial jugu¨¦ con una camiseta diferente del resto.

?Se ha sentido expatriado en Espa?a?

No, soy y siempre ser¨¦ holand¨¦s. Y vivo aqu¨ª muy a gusto.

?Y qu¨¦ tiene de holand¨¦s?

Bueno, Holanda ha sido un pa¨ªs aventurero, estuvieron en Indonesia, Sud¨¢frica, Nueva York fue Nueva Amsterdam¡­ Han estado en todos los sitios y ese esp¨ªritu est¨¢ dentro de nuestros genes. Curiosidad, ambici¨®n, pragmatismo.

El contrato de Bale es una exageraci¨®n. Y mentalmente muy dif¨ªcil de soportar para ¨¦l. Espero que se olvide del tema y juegue como ha jugado desde ni?o

?Le disgustan los contratos millonarios de los cracks?

S¨ª. El 98% de los deportes es m¨¢s pobre que un rat¨®n; solo vemos el 2%, al Messi de turno y a todos estos que est¨¢n cobrando de manera desmesurada. Y esto no es justo. A m¨ª me da igual lo que cobren, pero el gran ingreso en el deporte viene de la publicidad. El contrato de Tiger Woods con Nike es mil veces mayor de lo que pueda cobrar en el campo, es otra din¨¢mica, otra forma de verlo. Por lo tanto a esta gente no le hace falta cobrar tanto dinero.

?C¨®mo ve el fichaje de Bale?

Es una exageraci¨®n. Y mentalmente muy dif¨ªcil de soportar para ¨¦l. Espero que se olvide del tema y juegue como ha jugado desde ni?o. Claro que tiene calidad, eso es indiscutible. Pero si juega bien es que han acertado, y si juega mal, fuera. Todo un desbarajuste hac¨ªa la persona.

?Es muy desequilibrante?

En todos los sentidos. De un d¨ªa a otro pasas de superpobre a superrico ?C¨®mo se puede llevar eso mentalmente? Es dificil¨ªsimo. Cuando tienes el dinero todos est¨¢n a tu lado, pero los que dirigen, los presidentes de los clubes, los ejecutivos¡­ nadie asume la responsabilidad de protegerles para que se dediquen a jugar al f¨²tbol. Una de las excepciones es Rafa Nadal, este es un ejemplo como Dios manda, la familia le est¨¢ protegiendo en todos los sentidos.

?Cu¨¢l es su opini¨®n sobre el Rey?

Soy mon¨¢rquico, aqu¨ª y en Holanda. Son buena gente. Seguramente el Rey ha cometido estupideces, tambi¨¦n ha cambiado la sociedad y se acusan m¨¢s. Pero cuando le dijo a Chavez aquello de ¡°?por qu¨¦ no te callas?¡±, eso solo lo puede hacer un Rey, alguien que est¨¢ por encima. Me cae bien.

?Y Letizia?

Hace un papel perfecto, es como M¨¢xima en Holanda, la nueva generaci¨®n.

?Mourinho?

Debe ser un buen entrenador, pero la manera en que se comporta no me gusta.

Usted dice no ser ni de derechas ni de izquierdas.

Yo no soy de nadie.

Aunque tiene un acusado sentido social.

La palabra social se puede usar de varias maneras, y en este caso se trata de darle a gente lo que necesita, y no pensar en beneficios. Yo puedo ser mucho m¨¢s duro o mucho m¨¢s simp¨¢tico que cualquiera. Hay que marcar la l¨ªnea bien recta y, o se ayuda o no. En esto tambi¨¦n soy muy holand¨¦s.