El poder para cambiar las cosas

Las movilizaciones de ciudadanos, trabajadores y m¨¦dicos de la sanidad madrile?a han conseguido parar el intento de privatizaci¨®n de seis hospitales p¨²blicos en la Comunidad de Madrid. Sin duda, un rotundo ¨¦xito ciudadano y democr¨¢tico que, junto al conseguido por los vecinos del barrio de Gamonal, en la ciudad de Burgos, dejan un mensaje claro y contundente a los pol¨ªticos de medio pelo: no se puede gobernar sin consenso y contra los intereses de los ciudadanos.

Si analizamos el comportamiento de la casta pol¨ªtica actual y su vocaci¨®n de servidores p¨²blicos, podr¨ªamos concluir que, salvo honrosas excepciones, no est¨¢n en pol¨ªtica por amor a la profesi¨®n, sino por intereses espurios. Hay pol¨ªticos convencidos de que los votos de los ciudadanos son una carta en blanco para convertirse en se?ores feudales con derecho de pernada. Meterse en pol¨ªtica para medrar y favorecerse a s¨ª mismo o a terceros, a costa del erario y bienestar p¨²blicos, es una canallada inaceptable en un Estado democr¨¢tico.

Conf¨ªo en que estas dos significativas victorias ciudadanas nos devuelvan la confianza en nuestra capacidad y poder para cambiar las cosas. Conf¨ªo en que este triunfo sobre el comportamiento desp¨®tico y prepotente de unos gobernantes interesados y mediocres siente precedente y sea el acicate para salir del estado de sitio, resignaci¨®n y miedo en el que nos hallamos sumidos los honrados y sufridos ciudadanos. Cuando se lucha por causas nobles y justas, siempre se gana, aunque solo sea en dignidad.¡ª Pedro Serrano Mart¨ªnez.