Dame un beso
El proyecto Colecci¨®n de Besos consigue reunir casi tres mil im¨¢genes de gente que se besa, un r¨¦cord mundial
El poder de las emociones en estos tiempos de crisis impuls¨® a una fot¨®grafa, una economista y un arquitecto t¨¦cnico a intentar el primer r¨¦cord del mundo de fotograf¨ªas de besos. Virginia Mar¨ªn (51), Cristina Sierra (50) y Kike Mar¨ªn (44) han conseguido reunir casi 3.000 im¨¢genes, y la colecci¨®n sigue creciendo.
El objetivo de su proyecto (http://www.colecciondebesos.com) es reivindicar el valor de las emociones y, en concreto, de los besos como medio para contagiar ilusi¨®n y optimismo en un momento social tan dif¨ªcil e incierto como el actual.
Cristina y Virginia, amigas desde la infancia, decidieron en 2012 dar un vuelco a sus vidas, reinventarse en sus profesiones y ¡°hacer algo grande¡± para el mundo: estaban hartas de crisis, de gente triste, de negatividad y adem¨¢s¡ se acercaba el fin del mundo (la profec¨ªa maya que nos tuvo en ascuas durante 2012). As¨ª que con dosis masivas de optimismo y toneladas de pasi¨®n decidieron que ya que quer¨ªan hacer algo grande y que cambiara el mundo iban a batir un r¨¦cord: el 12 de diciembre de 2012 a las doce horas y doce minutos habr¨ªan conseguido reunir 2.012 fotos de gente bes¨¢ndose.
Para ello contaron con Kike, por aquello de las nuevas tecnolog¨ªas, el otro optimista del proyecto. Y as¨ª, esas ¡°tres patas pa¡¯ un banco con mucho glamour¡± como define al grupo Cristina Sierra, y tirando de amigos y amigas, buscando apoyos aqu¨ª y all¨¢, se pusieron manos a la obra. Sin apenas medios, con un fondo blanco y la colaboraci¨®n de amigas ¡°dinamizadoras¡± de besos, el 14 de febrero de 2012 se plantaron en una calle de Jerez y comenzaron a invitar a la gente a ser protagonistas de la mayor colecci¨®n de besos del mundo. ¡°Pero¡ ?en la boca?¡±, preguntaron algunos algo alarmados.
Y de pronto¡ sucedi¨® el milagro. ¡°A la gente le cambiaba la cara, se transformaba. Al plasmar los besos en una fotograf¨ªa estamos congelando un momento ¨²nico, cargado de sentimientos, convirtiendo una imagen bidimensional en un elemento que va m¨¢s all¨¢ de las dimensiones¡±.
Cada fotograf¨ªa tiene una historia detr¨¢s. La de Leonor, que se fue a buscar a ¡°su Antonio porque hac¨ªa m¨¢s de 50 a?os que no le daba un beso¡±, o la de esa mujer mayorc¨ªsima que tir¨® un beso ¡°volao¡± a los empresarios para que dieran trabajo a los j¨®venes.
Pero el equipo, adem¨¢s de buscar aparcar por un rato los malos rollos, pretend¨ªa hacer una radiograf¨ªa social: ¡°Detr¨¢s de cada beso hay una historia, trayectorias que convergen en un punto que se convierte en un momento m¨¢gico¡±. Buscaron gente de todo tipo, sin importar el g¨¦nero, la edad, el f¨ªsico, el sexo o las tendencias de cada cual. Muchos se fueron a sus casas a buscar a sus perros o gatos: ¡°Nunca pens¨¦ que la gente quisiera tanto a sus mascotas¡± dice Cristina Sierra entre risas. O ese joven gay de Madrid que nunca hab¨ªa besado a una chica ¡°y le gust¨®¡±.
La cosa mejor¨® cuando cambiaron las condiciones: ¡°Cambiamos el fondo blanco por el ¡®cubo m¨¢gico¡¯. Era como si de pronto la gente entrara en el ¡®cubo del amor¡¯. La transformaci¨®n de la actitud de la gente all¨ª era total.
Y lograron el r¨¦cord: despu¨¦s de recorrer Andaluc¨ªa decidieron que ¡°o iban a Madrid o no lo consegu¨ªan¡±¡ Y en Chueca consiguieron su objetivo. Pero decidieron no parar.
Veintid¨®s eventos y casi tres mil fotograf¨ªas despu¨¦s siguen adelante. Este proyecto colaborativo y altruista, apoyado por los medios con entusiasmo y por algunos peque?os patrocinadores (los grandes, por diversas razones, se quedaron por el camino), necesita ¡°monetizarse¡± en palabras de Cristina Sierra, hacerse rentable. Tras ser seleccionados por Zinc Shower del Centro de Creaci¨®n Contempor¨¢nea Matadero de Madrid como el ¨²nico proyecto transformador social andaluz, est¨¢n inmersos en llevar su plan a Marruecos y plasmar todo su trabajo en un libro. Y todo, con mucho optimismo: ¡°Hemos recibido mucho m¨¢s de lo que hemos dado¡±, afirma Cristina Sierra. ¡°Queremos demostrar que cuando algo se ve y se cree, se crea¡±.
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