Bienvenida sea la comunidad sefard¨ª

Probablemente mantengo una idea rom¨¢ntica y poco ajustada a la realidad de lo que fue la Pen¨ªnsula en la alta Edad Media y el renacimiento, fuera o no Espa?a por entonces. La idea de un lugar donde jud¨ªos, moros y cristianos conviv¨ªan con sus m¨¢s y sus menos, pero conviv¨ªan, siempre me ha resultado muy gratificante.

Entre tanta noticia terrible que nos impacta cada d¨ªa, la concesi¨®n de la nacionalidad espa?ola a la comunidad sefard¨ª me ha alegrado enormemente. Supongo que los 500 a?os que han pasado desde su expulsi¨®n en 1492 son ya demasiados a?os y ser¨¢ dif¨ªcil que decidan volver al lugar del que nunca debieron marcharse. Hasta donde conozco, desafortunadamente, no existe una comunidad musulmana equivalente a la sefard¨ª que haya mantenido unos lazos emocionales con esta que fue su tierra. Si estoy equivocado y existe tal comunidad deber¨ªa de conced¨¦rseles la misma opci¨®n que a los sefard¨ªes. Sea como sea, me alegro por los sefard¨ªes y deseo de coraz¨®n que decidan, despu¨¦s de tanto tiempo, volver con nosotros. Espero que la ley avance y se ratifique en el Congreso y en el Senado y aunque tarde se subsane un error que nunca debi¨® ser cometido. Bienvenidos a vuestra casa.¡ª Jos¨¦ Antonio Moreno Serradilla.