Abba: ¡°Nadie pudo haber vestido nunca tan mal como nosotros¡±

Internet est¨¢ lleno de p¨¢ginas web en las que se anuncian ¡°trajes y accesorios estilo Abba¡±. Hay pelucas, botas, minifaldas arriesgadas, trajes discotequeros, conjuntos de blanco inmaculado, camisetas absolutamente kitsch, horteradas cargadas de lentejuelas, mucho spandex, telas de raso¡­ La oferta es interminable. Y, a juzgar por la cantidad, debe de existir una gran demanda. Pero cuando hace cuatro d¨¦cadas el grupo sueco formado por dos parejas apareci¨® sobre los escenarios de su pa¨ªs vistiendo aquellos trajes imposibles, las audiencias en Suecia sufrieron un fuerte shock, seguido del que se sinti¨® en el resto del mundo poco despu¨¦s de que Abba diera el salto internacional tras ganar Eurovisi¨®n en 1974 con la canci¨®n Waterloo.

Lo que hasta ahora no sab¨ªamos es que aquel estilo, que despu¨¦s se populariz¨® y hoy incluso se reivindica, no ten¨ªa una mente pensante detr¨¢s como la que s¨ª se escond¨ªa tras la ropa punk de la banda The Sex Pistols, concebida por la dise?adora Vivianne Westwood y el manager Malcom McClaren. Lo que se escond¨ªa en el armario de Abba era m¨¢s bien una calculadora. El objetivo de aquella ropa no era marcar tendencia sino ahorrar: el fisco sueco permite desgravar la ropa de trabajo y la ¨²nica forma que Abba ten¨ªa de desgravarse los trajes con los que sal¨ªan al escenario era adquiriendo prendas que nadie se hubiera atrevido a ponerse para salir a la calle. ¡°Tienen que ser trajes fantasiosos, para el escenario, ropa con el logo de su empleador u otros atributos que los distingan completamente de la ropa del d¨ªa a d¨ªa¡±, dice la ley sueca.

¡°Honestamente, creo que durante aquellos a?os ten¨ªamos pinta de locos. No creo que nadie vistiera tan mal sobre un escenario como nosotros¡±. Esta es una de las confesiones que hace Bj?rn Ulvaeus, uno de los cuatro miembros de la banda, en el libro Abba: The Official Photobook, que se edita el mes pr¨®ximo en Reino Unido. Se trata de una recopilaci¨®n con m¨¢s de 600 im¨¢genes oficiales de un grupo que ha vendido m¨¢s de 400 millones de discos en todo el mundo y que a pesar de haberse disuelto en 1982, en la ¨²ltima d¨¦cada ha vivido un fuerte revival que ha precipitado la reedici¨®n de sus discos y ha propiciado un musical, Mamma Mia, que se ha convertido en uno de los m¨¢s taquilleros de la historia tanto en Broadway como en el West End londinense.

En el libro se incluyen tambi¨¦n m¨¢s de 100 fotograf¨ªas in¨¦ditas de una banda que figura entre las diez que m¨¢s discos han vendido de la historia, superando en algunos pa¨ªses incluso a los Beatles. Las fotos est¨¢n acompa?adas de comentarios y recuerdos de Agnetha F?ltskog, Bj?rn Ulvaeus, Benny Andersson y Anni-Frid Lyngstand, los cuatro integrantes de un grupo c¨¦lebre por temas como Super-Trouper, Dancing Queen, Ring Ring, Fernando o Mamma Mia.

Si pagar poco a hacienda fue una de sus obsesiones durante los a?os de ¨¦xito de Abba, el fisco tambi¨¦n fue una de sus pesadillas a?os despu¨¦s. Ulvaeus, considerado el l¨ªder del grupo, fue acusado de no declarar ingresos por diez millones de euros entre 1999 y 2005 pero apel¨® contra la multa que le puso la hacienda sueca y gan¨®. ¡°Estoy muy feliz de haber recibido por escrito la confirmaci¨®n de que siempre he hecho lo correcto en relaci¨®n a mis impuestos¡±, declar¨®, tras su victoria, en 2007.