La historia en abstracto
FOTO: Fernando Alda
Extramuros, junto a la muralla de Conil de la Frontera, en C¨¢diz, la historia habla un idioma abstracto en la rehabilitaci¨®n de tres viviendas y una calle que, sin reclamar protagonismo, contribuyen a construir la ciudad a partir de los materiales, la escala y el car¨¢cter discreto de la tradici¨®n popular. Esos mismos atributos describen, a su vez, los fundamentos de la arquitectura moderna.
El arquitecto Sebasti¨¢n de Alba busc¨® enfatizar esos valores de la abstracci¨®n que encuentra paralelismos entre el origen de la tradici¨®n arquitect¨®nica moderna y la naturaleza de la construcci¨®n local y popular. As¨ª, lo neutral, o el paso atr¨¢s, se convirti¨® aqu¨ª en una forma de respeto hacia la historia y hacia la memoria, y, a la vez, en una manera de dar valor la cultura de la ciudad.
Una exigencia de la Delegaci¨®n Provincial de Cultura lo puso f¨¢cil. Solicitaban el soterramiento de todas las instalaciones vistas que discurr¨ªan por la fachada del edificio a rehabilitar y cruzaban a las calles colindantes. Sin cables ganaba la abstracci¨®n. Tambi¨¦n eliminando ruidos visuales y ac¨²sticos en las calles que los arquitectos reconquistaron para los peatones (por orden del ayuntamiento) se reforzaba la idea de la limpieza sin ornamentos moderna. As¨ª, las viviendas y la plaza ahora miran al mar. Pero tambi¨¦n se ven desde el mar, limpias y s¨®lidas.
Para sumarse al lugar, m¨¢s all¨¢ de dar un paso atr¨¢s, el edificio utiliza el mismo tipo de granito gris y con el mismo formato que el empleado en la pavimentaci¨®n de la calle. La continuidad la ampara el silencio, pero tambi¨¦n los peque?os gestos. Tal vez por eso, los proyectistas atribuyen a la intervenci¨®n una ¡°vocaci¨®n ling¨¹¨ªstica¡± por la manera en que se ocupa de mantener el di¨¢logo entre las partes. Tambi¨¦n hablan de conciliaci¨®n y de filiaci¨®n gen¨¦tica, para definir el arraigo y la buena convivencia
As¨ª, los rasgos m¨¢s abstractos, que son tambi¨¦n los m¨¢s neutros, permanecen junto a la tradici¨®n de los patios, aqu¨ª concatenados. La rehabilitaci¨®n ha sustituido en las viviendas los planos horizontales por losas de hormig¨®n visto que revelan otra forma de construir un mismo idioma esquem¨¢tico, fundamental y desnudo que mantiene para las fachadas el valor de la proporci¨®n y la relaci¨®n entre vac¨ªos y macizos.
Las tres viviendas d¨²plex se alojan en la cruj¨ªa formada por los muros de las fachadas y los muros de los dos patios concatenados y conectados, a trav¨¦s de un zagu¨¢n, al espacio que ocupa la escalera comunitaria. Esta v¨ªa de acceso conduce a la terraza de la primera planta y a la azotea, donde est¨¢ el sol¨¢rium, pero hay otros accesos: a cada vivienda se llega desde un punto distinto en el espacio com¨²n de los patios.
Por dentro, las viviendas son espacios di¨¢fanos y continuos. En la planta baja, la cocina est¨¢ en un plano algo m¨¢s elevado que la sala de estar. La primera aloja la zona privada de dormitorios y ba?o.
La paleta de los materiales es ¡°escasa y noble¡±, apuntan los arquitectos: revoco de mortero de cal, granito gris, caliza blanca, hormig¨®n blanco visto, madera lacada blanca, carpinter¨ªa de aluminio anodizado en acero inoxidable y contraventanas correderas de chapa de acero galvanizado termolacado en blanco que, cuando est¨¢n cerradas, subrayan el car¨¢cter abstracto de los edificios.
Coste por m2 de ejecuci¨®n material de la rehabilitaci¨®n, seg¨²n los arquitectos: 809,26 €/m2.
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