Jorge Lorenzo: "Muchos aficionados se ceban con mis errores"
El viejo Lorenzo era un piloto al que los accidentes solo dejaban secuelas en lo f¨ªsico; el nuevo Lorenzo es un tipo dispuesto a afrontar la metaf¨ªsica de cada batacazo. Rostro de los relojes Sector, admite sin reparos ser esclavo de su imagen
"Fracasa de nuevo, fracasa mejor¡±. Jorge Lorenzo (Palma de Mallorca, 1987) no conoc¨ªa la frase de Samuel Beckett, pero la suscribe sin dudarlo. ?l, un hombre acostumbrado al ¨¦xito desde muy joven, al ¨¦xito precoz, que debe ser el m¨¢s dif¨ªcil de digerir y procesar, sabe mejor que nadie que el verdadero combustible de la excelencia son las derrotas. El miedo al fracaso. El odio a perder, un poderoso est¨ªmulo que los deportistas como ¨¦l suelen llamar hambre. ¡°Aun as¨ª, duermo estupendamente despu¨¦s de una derrota¡±, nos aclara en un primer atisbo de la actitud zen que exhibe en esta ma?ana de febrero, seis semanas antes de que la temporada 2014 de Moto GP arranque en Catar. ¡°Incluso Michael Jordan, que probablemente ha sido el mejor deportista de todos los tiempos, fallaba m¨¢s de la mitad de sus tiros a canasta, y supongo que eso no le quitaba el sue?o. Si el mejor de todos estaba tan lejos de la perfecci¨®n absoluta, ?c¨®mo voy a martirizarme yo por un error, por un tropiezo?¡±.
Dec¨ªa Marcelo Bielsa que, en el deporte y en la vida, el fracaso es la norma y el ¨¦xito, la excepci¨®n. Pero en el caso de Lorenzo, esa excepci¨®n estad¨ªstica se produce con desarmante frecuencia: en las 12 temporadas que lleva como profesional (debut¨® como piloto de 125 cc en Jap¨®n, con 15 a?os y un d¨ªa) ha ganado uno de cada tres campeonatos del mundo y m¨¢s de una de cada cuatro carreras disputadas. Tanto ¨¦xito en un universo regido por la certidumbre del fracaso no puede ser casualidad.
?El secreto? Ese diez por ciento de inspiraci¨®n y un noventa por ciento de transpiraci¨®n que dec¨ªa Picasso. ¡°No s¨¦ si la proporci¨®n es exactamente esta, pero si algo he aprendido es que el trabajo duro te lleva mucho m¨¢s lejos que el talento¡±. Trabajo duro, en su caso, implica tambi¨¦n llevar una d¨¦cada acumulando heridas de guerra. Un rosario de brutales peajes que este invierno, sin ir m¨¢s lejos, le ha hecho pasar varias veces por el quir¨®fano (clav¨ªcula, lumbares, la extracci¨®n de una placa en el codo¡) y que hace que su fisioterapeuta, al aplicar los dedos sobre su cuerpo escueto y fibrado, se refiera a ¨¦l como Robocop.
¡°S¨ª, lo peor de esta profesi¨®n son las ca¨ªdas¡±, concede. ¡°Cada vez que te ves en el hospital, con un hueso roto, dolores terribles y sin poder competir te prometes que har¨¢s todo lo posible para no volver a irte al suelo. Pero en el fondo sabes que te caer¨¢s de nuevo, una y mil veces, porque las ca¨ªdas y los huesos rotos son la rutina de mi deporte. Cuanto m¨¢s tiempo lleves sin un batacazo, m¨¢s cerca est¨¢ la pr¨®xima ca¨ªda¡±. Hay que caer de nuevo. Caer mejor.
Nos hab¨ªamos citado con ¨¦l en su casa, la villa de m¨¢s de mil metros cuadrados que compr¨® hace un par de a?os en el Maresme, a unos 30 kil¨®metros de Barcelona, y que hace pocas semanas exhibi¨® sin modestia en un v¨ªdeo de YouTube del que se arrepiente. All¨ª, el piloto mallorqu¨ªn sigue una relajada pero intensa rutina de puesta a punto que incluye salir a correr todos los d¨ªas con Ricky Card¨²s, su amigo y excompa?ero de piso.
Esta ma?ana, mientras corr¨ªan entre los pinos, nogales y abetos de la fronda mediterr¨¢nea en la que vive, a Lorenzo se le ha ido el santo el cielo. Llega tarde a la cita en la sala de musculaci¨®n privada de su residencia, y a¨²n tiene que ducharse y hacer al menos un cuarto de hora de estiramientos. Eso s¨ª, su entrada en escena es un derroche de cordialidad. Adem¨¢s, propone una soluci¨®n para el problema de horarios que acaba de plantearse: ¡°?Qu¨¦ tal si te llevamos de vuelta a Barcelona y me entrevistas por el camino?¡±. Instalados ya en el asiento trasero del coche que conduce uno de sus asistentes, Lorenzo abre fuego hablando de JL 99, la l¨ªnea de relojes de gama alta de la marca italiana Sector de la que es imagen oficial y que promociona estos d¨ªas.
Este es el v¨ªdeo de nuestra sesi¨®n con Lorenzo:
Sector se dirige a un hombre fuerte, din¨¢mico y determinado, y por eso le han elegido a usted para representar a la marca. ?Se reconoce en esas cualidades?
Seguro. Aunque la verdad es que tampoco soy una persona demasiado din¨¢mica. S¨ª lo soy en todo lo que tiene que ver con mi profesi¨®n, pero en casi todo lo dem¨¢s soy bastante vago. La paz y la tranquilidad que tengo aqu¨ª en los meses de invierno no la cambiar¨ªa por nada, ni por fiestas ni por viajes. La determinaci¨®n s¨ª es una de las cualidades que me definen. Desde peque?o he tenido las ideas muy claras. Y la fuerza¡ Tengo un car¨¢cter fuerte, siempre lo he tenido. He tratado de endulzarlo para que la gente no me perciba como una persona agresiva, arrogante y peleada con el mundo.
?Un deportista de ¨¦lite es esclavo de su imagen?
Sin duda. Y a m¨ª me ha perjudicado alguna salida de tono puntual, alg¨²n calent¨®n, mi falta de sentido de la diplomacia. Pero creo que ¨²ltimamente he hecho progresos en ese aspecto. Intento identificar las cualidades positivas de las personas que me rodean y copiarlas. Hay que ser humilde para hacer eso. Si no tienes esa humildad, es imposible evolucionar como he hecho yo estos a?os. Eso s¨ª, la imagen que me precede es la que es, y muchos aficionados y parte de la prensa se ceban con mis errores. Cualquier paso en falso, cualquier declaraci¨®n que se pueda manipular se aprovecha para seguir alimentando eso, pero el Jorge Lorenzo actual ya no tiene nada que ver con el de hace diez a?os.
?A qu¨¦ edad se recuerda sentado en una moto?
No s¨¦ distinguir con precisi¨®n entre los verdaderos recuerdos y las cosas que creo recordar porque me las ha contado mi padre, pero dir¨ªa que mis primeros recuerdos son de cuando ten¨ªa unos cinco a?os. Dos a?os antes ya corr¨ª mi primera carrera en circuito, aunque fue de manera ilegal, porque ni siquiera ten¨ªa licencia para competir. El director del circuito me vio por all¨ª y me invit¨® a participar. Solo complet¨¦ una manga y, al final, le pregunt¨¦ a mi padre si hab¨ªa ganado. Hab¨ªa quedado ¨²ltimo y me hab¨ªan doblado dos o tres veces.
?En qu¨¦ momento tuvo claro que las motos iban a ser mucho m¨¢s que un juego?
Mi padre vio que ten¨ªa talento desde el principio. ?l es muy disciplinado, un piloto amateur que siente pasi¨®n por las motos, pero nunca lleg¨® a profesional, y me inculc¨® desde muy peque?o que si me esforzaba lo suficiente yo s¨ª que podr¨ªa conseguirlo.
Tantos esfuerzos te quitan el hambre de los 15 a?os. Cuesta conservar ese punto de locura que da esa punta m¨¢s de velocidad
?Nunca consider¨® posibles alternativas?
No me dio tiempo. Todo fue rodado. Sue?as con llegar a profesional, que ya es un reto formidable, y en cuanto lo consigues, apuestas por ello a muerte. Ya no miras atr¨¢s.
Su carrera ha venido marcada desde el principio por la precocidad. ?Cuesta hacerse a la idea de que va camino de convertirse en un veterano, si no lo es ya?
Eso suena fatal, pero supongo que es la verdad. Yo a¨²n espero dar un ¨²ltimo gran salto cualitativo y llegar a un nivel superior como piloto. Pero la realidad de mi deporte me dice que los 26 a?os suelen ser el punto ¨¢lgido, y a partir de ah¨ª lo normal es que te mantengas unos pocos a?os y luego empieces a declinar.
?Supone la juventud una ventaja en un deporte tan exigente como Moto GP?
Hasta cierto punto. Cuando eres joven eres m¨¢s valiente, tienes m¨¢s hambre y est¨¢s dispuesto a asumir m¨¢s riesgos. Eso puede darte una ligera ventaja en situaciones l¨ªmite, pero tambi¨¦n tiendes a tomar peores decisiones y te caes mucho m¨¢s. Yo creo que estoy cerca del punto ¨®ptimo entre juventud y experiencia, pero si me das a elegir, me quedo con la experiencia y todo lo que te ense?a.
?Se siente hoy mejor piloto que cuando le gan¨® por vez primera el mundial de Moto GP a Valentino Rossi, en 2010?
Sin duda. Me he ca¨ªdo y me he levantado muchas m¨¢s veces. En cuanto pasas por la experiencia horrible de estar en una cama de hospital, la mentalidad te cambia. Entiendes mucho mejor de qu¨¦ va esto, qu¨¦ es de verdad lo que te juegas. Eres m¨¢s regular, cometes menos errores, adelantas a tus rivales de forma m¨¢s segura, asumiendo menos riesgos. De alguna manera, mejoras. Pero s¨ª es cierto que tantos a?os de exigencia f¨ªsica te quitan un poco el hambre de los 15 a?os o 20 a?os. El reto es encontrar la motivaci¨®n para seguir entrenando muy duro y conservar ese punto de locura que a veces, muy pocas veces, te da esa punta m¨¢s de velocidad para hacer vuelta r¨¢pida o adelantar en la ¨²ltima curva. Pero, en l¨ªneas generales, prefiero ser veterano, calmado y prudente.
Hace 35 a?os, el motociclismo espa?ol contaba con un pionero genial, ?ngel Nieto, y detr¨¢s de ¨¦l, un erial. ?Qu¨¦ ha pasado?
Que somos ahora mismo los jamaicanos del motociclismo. Gracias a una mezcla de cultura, tradici¨®n, cualidades gen¨¦ticas, apoyo federativo y talento natural dominamos la disciplina como ellos dominan los cien metros lisos.
?Va a durar? ?Existe un relevo generacional s¨®lido m¨¢s all¨¢ de Marc M¨¢rquez?
Durar¨¢ si lo seguimos valorando. Hace 35 a?os, ?ngel Nieto era portada de la prensa generalista si ganaba carreras en 125 cc. Hoy hacemos tripletes en Moto GP y casi ni es noticia.
?La afici¨®n espa?ola devora a sus ¨ªdolos?
Nos acostumbramos con demasiada facilidad. Quiz¨¢ se valora menos porque casi la mitad de los pilotos del circuito son ahora espa?oles. Parece que corremos solos y el campe¨®n del mundo es, en realidad, el campe¨®n de Espa?a. Pero hay que recordar el largo trecho que hemos recorrido.
De sus casi 200 carreras en las tres categor¨ªas profesionales, ?por cu¨¢l le gustar¨ªa ser recordado?
La del circuito de Phillip Island en 2007. Ese d¨ªa sent¨ª que rozaba, no la perfecci¨®n, porque eso es imposible, pero s¨ª mi mejor nivel. Las sensaciones sobre la moto eran inmejorables, sacaba a los dem¨¢s un par de segundos por vuelta. Todo parec¨ªa f¨¢cil, pero las siguientes carreras se encargaron de recordarme que casi nunca lo es. Y luego, recuerdo tambi¨¦n el doble adelantamiento por fuera que les hice a Casey Stoner y Dani Pedrosa, mis dos principales rivales desde hace muchos a?os, en aquella curva de Brasil. Me sent¨ª superior y pens¨¦ que era el momento de intentar una locura.
?Los rivales a los que se enfrenta le hacen m¨¢s grande?
Solo si consigues ganarles. Si te enfrentas a rivales formidables y siempre te ganan ellos, nadie se acordar¨¢ de ti, porque esto es deporte, y el segundo es el primero de los que pierden.
?Valentino Rossi le hizo m¨¢s grande a usted?
Claro. Porque cuando llegu¨¦ a Moto GP, mi reto, mi obsesi¨®n, era ganar a Valentino, que era el mejor de todos y el que ten¨ªa la misma m¨¢quina que yo. De hecho, me sorprendi¨® la facilidad con que consegu¨ª ganarle la primera vez que nos enfrentamos, y luego vinieron los palos, las derrotas y las decepciones, como consecuencia de ese ¨¦xito inesperado y de las conclusiones err¨®neas que saqu¨¦ de ¨¦l. Ahora recuerdo todo aquello como una gran lecci¨®n, una de las que m¨¢s me han ayudado a convertirme en el piloto que soy ahora mismo.
El Gran Premio de Argentina de MotoGP se disputa este fin de semana en el nuevo trazado de R¨ªo Hondo.
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