Fotogaler¨ªa: vidas infantiles a golpe de click

Pincha en la imagen Javi, profesor de M¨¢laga Acoge, con su beb¨¦. / ISMAEL

?En qu¨¦ se diferencia el d¨ªa a d¨ªa de un ni?o que se encuentra en riesgo de exclusi¨®n social del de otro que no lo est¨¢? Quiz¨¢ no hay tantas diferencias despu¨¦s de todo. Esta es una de las conclusiones obtenidas por los miembros de la asociaci¨®n M¨¢laga Acoge tras realizar con medio centenar de menores la actividad Mi casa, mi barrio, mi ciudad. Durante una semana, la entidad facilit¨® c¨¢maras de fotos a los ni?os que acuden a diario a realizar actividades para que retrataran su entorno: d¨®nde viven, d¨®nde juegan, c¨®mo son sus familias o qu¨¦ hacen en su d¨ªa a d¨ªa."Tienen una vida rutinaria como todos tenemos aunque pertenezcan a familias de bajos recursos", explica Isabel Pineda, coordinadora del programa. "En el d¨ªa a d¨ªa todos van a cole, a todos los visten y duchan los padres¡­ tienen familias normales", a?ade.

El primer d¨ªa realizaron un breve cursillo con el fot¨®grafo Quique Ma?as para aprender el funcionamiento de una c¨¢mara. Durante los cinco d¨ªas siguientes, 60 ni?os de entre tres y 16 a?os, la mayor¨ªa de origen magreb¨ª y subsahariano, salieron de excursi¨®n por los diferentes barrios malague?os a los que pertenecen para mostrar al resto sus lugares preferidos. Ellos, acostumbrados a verse a menudo pero sin m¨¢s relaci¨®n que la que cultivan durante sus horas de juego, descubrieron lo cerca que viven unos de otros y algunos recursos que tienen muy cerca de sus casas como parques, bibliotecas o museos.

Siempre acompa?ados de una c¨¢mara desechable que luego se llevaban a casa, inmortalizaron todo lo que les pareci¨® interesante: familias tomando el t¨¦ en torno a una mesa, dormitorios infantiles, los juguetes favoritos, la vecina de al lado, las vistas por la ventana de su casa, compa?eros de juego o el cielo sobre sus cabezas, sin m¨¢s. La puesta en com¨²n de sus trabajos les ense?¨® que todas las costumbres valen, por distintas o extra?as que parezcan. "Si uno es mulsulm¨¢n, se ve que en su casa tomar el t¨¦ es un ritual, algo muy impuesto, y es tan respetable como la costumbre de otro", comenta Pineda. "Cada uno vive con sus caracter¨ªsticas y con sus fomas, se trata de normalizar las costumbres que cada uno tiene y aprender que ninguna es mejor que otra, todas son v¨¢lidas".

Como una imagen vale m¨¢s que mil palabras, los ni?os de M¨¢laga Acoge nos han enviado una muestra de sus trabajos con un comentario del por qu¨¦ de esa foto que se puede ver pinchando en la imagen que encabeza esta entrada. Como aut¨¦nticos artistas consagrados.