C¨¢rcel a la carta para Ortega Cano

La ¨²nica vinculaci¨®n conocida entre Jos¨¦ Ortega Cano y Zaragoza se remonta a las tardes en las que como matador de toros hac¨ªa el pase¨ªllo en La Misericordia y a su proclamada devoci¨®n por la Virgen del Pilar. Por eso, cuando la Direcci¨®n General de Prisiones confirm¨® el pasado mi¨¦rcoles que el torero hab¨ªa ingresado en la prisi¨®n de Zuera, la noticia dej¨® descolocados a los medios de comunicaci¨®n que desde hace d¨ªas aguardaban apostados a las puertas de Sevilla I y de Soto del Real, las c¨¢rceles m¨¢s cercanas a sus domicilios habituales. La elecci¨®n no fue casual, como tampoco ninguno de los pasos que en las ¨²ltimas semanas ha dado Ortega Cano. Todo estaba calculado para que el momento en el que el matador comenzara a cumplir la condena que le impusieron por la muerte de Carlos Parra ¡ªfallecido en mayo de 2011¡ª fuera lo menos traum¨¢tico posible.

El abogado Enrique Trebolle ha sido el art¨ªfice de la estrategia en la que se ha movido el torero desde la noche del accidente de coche que marc¨® su vida para siempre y la persona en quien ha confiado su destino ahora que ya ocupa una celda en ese centro penitenciario como otros 1.600 condenados. Trebolle tiene su despacho en Zaragoza y conoce al dedillo el funcionamiento del establecimiento.

¡°La raz¨®n principal es el cuadro m¨¦dico estupendo que hay en esta instituci¨®n¡±, explica el abogado. ¡°Pero hay otra raz¨®n evidentemente, que yo ejerzo en Zaragoza, tengo el despacho en Zaragoza y habr¨¢ m¨¢s comodidad para verle. Estamos dispuestos a trat¨¢ndole continuamente y a cualquier cosa que est¨¦ a nuestra disposici¨®n para que se sienta apoyado e informado de todo¡±.

Su defensa, adem¨¢s, siempre ha argumentado ante el juez que la salud del diestro es delicada y que debe tenerse en cuenta en todo el proceso. ¡°Aqu¨ª estar¨¢ m¨¢s cerca del m¨¦dico que le ha salvado la vida en un par de ocasiones. Ese es el motivo¡±, y advierte: ¡°Nada de tratos de favor¡±.

As¨ª que por todo ello el diestro acept¨® la propuesta de su letrado de pasar encerrado los pr¨®ximos dos a?os y medio en tierras aragonesas. Esa es la condena que tiene pendiente, aunque dentro de siete meses puede comenzar a disfrutar de beneficios penitenciarios. A¨²n le queda adem¨¢s la baza del indulto que ha solicitado, si bien esa opci¨®n se maneja como una posibilidad muy remota.

El mi¨¦rcoles expiraba el plazo para que el torero pudiera ingresar de forma voluntaria en cualquier c¨¢rcel del Estado espa?ol. Hacerlo en este tiempo le permit¨ªa poner en marcha su estrategia y entrar en Zuera. Ahora, para poder quedarse tiene que demostrar arraigo, condici¨®n que solo podr¨ªa lograr en principio en Sevilla, Madrid y tambi¨¦n probablemente en Sanl¨²car de Barrameda, donde reside Ana Mar¨ªa Ald¨®n, su pareja y madre de su hijo biol¨®gico. Pero para salvar ese obst¨¢culo, Trebolle tambi¨¦n tiene una soluci¨®n. Ald¨®n y el beb¨¦ se mudar¨¢n a Zaragoza, y de esta manera Ortega Cano lograr¨¢ tener la vinculaci¨®n necesaria que le permita permanecer en el centro penitenciario.

Ortega Cano y Ald¨®n comenzaron su relaci¨®n hace poco m¨¢s de dos a?os. Poco despu¨¦s anunciaron que iban a ser padres. La pareja nunca ha vivido de manera permanente en la misma ciudad. Ella, que huye de la atenci¨®n medi¨¢tica, prefiri¨® permanecer en su casa de Sanl¨²car, que Ortega Cano visitaba con asiduidad. ?l, mientras, se instal¨® en un ¨¢tico frente a la estaci¨®n del AVE de Santa Justa en Sevilla. All¨ª ha pasado los ¨²ltimos d¨ªas antes de emprender camino a la c¨¢rcel. En esa ciudad y contrarreloj ha intentado recuperar la relaci¨®n con su hijo Jos¨¦ Fernando. Pero solo ha tenido un mes para hacerlo, ya que el joven, de 20 a?os, sali¨® el 1 de abril de prisi¨®n tras ser condenado a un a?o y nueve meses por agresi¨®n y robo con violencia. Jos¨¦ Fernando sigue ahora un tratamiento para resolver sus problemas con las drogas que su padre ha elegido y que supervisar¨¢n sus t¨ªos.

Y es que Ortega Cano ha estado muy activo en el tiempo previo a su ingreso en prisi¨®n, decretado por el juez el pasado 23 de enero. No solo ha intentado dejar atados a su manera los asuntos familiares, tambi¨¦n sus negocios.

El torero recibi¨® hace un a?o una gran inyecci¨®n de dinero gracias a la venta de la Finca Yerbabuena, a la que se dirig¨ªa la noche en que se cruz¨® en el camino de Carlos Parra. Se embols¨® 5,4 millones que en los ¨²ltimos meses ha intentado invertir. Primero compr¨® la casa de Sevilla; luego, un restaurante en Benidorm; m¨¢s tarde visit¨® fincas cerca de Madrid... Al mando de sus asuntos empresariales ha dejado a su hermano Paco, la persona que le acompa?¨® hasta la puerta de la c¨¢rcel de Zuera el pasado mi¨¦rcoles, y a su cu?ado Aniceto. Pero ¨¦l, desde su celda, est¨¢ dispuesto a supervisar todo con Trebolle como enlace.

Ortega no ha pedido perd¨®n a la familia de Carlos Parra y sigue negando que la noche del accidente hubiera bebido aunque las pruebas de alcohol que se le practicaron as¨ª lo indican. Por consejo de su abogado, ha guardado silencio hasta ingresar en prisi¨®n, aunque se ha dejado ver con aparente normalidad por la calle e incluso se ha permitido rememorar tardes de gloria taurina. Cuatro d¨ªas antes de entrar en Zuera, el torero sal¨ªa a hombros de la plaza de Cieza (Murcia), de la que se ha convertido en empresario. Poco despu¨¦s bajaba a la arena e iniciaba el pase¨ªllo a la c¨¢rcel.