Gaza se desangra

Gaza vive las jornadas m¨¢s sangrientas desde que comenzaran los bombardeos israel¨ªes hace dos semanas. La decisi¨®n del primer ministro Netanyahu de entrar en la Franja ¡ªsucumbiendo a sus socios m¨¢s belicistas¡ª ha llevado la batalla a zonas urbanas densamente pobladas, incluida la ciudad de Gaza. M¨¢s de 500 muertos, la mayor¨ªa palestinos, y el clamor internacional no han detenido el diluvio de fuego, pese a que los combates se han cobrado ya la vida de una veintena de soldados israel¨ªes.

Israel, en alas de su abrumadora superioridad militar, no considera llegada la hora de la tregua. Su ofensiva en Gaza no va a acabar con el r¨¦gimen extremista de la Franja, sostenido b¨¢sicamente por Ir¨¢n, ni pretende la reocupaci¨®n de un territorio que a?adir¨ªa la pesadilla de otro mill¨®n largo de palestinos bajo el Gobierno de Jerusal¨¦n. Gaza es m¨¢s manejable aislada y sitiada, con un Gobierno incompetente y maniatado ahora tambi¨¦n desde el vecino Egipto. Con su decisi¨®n, Netanyahu intenta b¨¢sicamente destruir los t¨²neles por los que Ham¨¢s se infiltra en Israel y los emplazamientos de sus cohetes.

Es leg¨ªtimo el derecho de cada pa¨ªs a defenderse, pero mantener un asalto duradero a gran escala acarrea riesgos significativos para Israel. No solo el de la comprobada vulnerabilidad de sus tropas en escenarios de guerrilla urbana. Tambi¨¦n la multiplicaci¨®n exponencial de v¨ªctimas civiles en una guerra obscenamente asim¨¦trica, que contribuye a degradar m¨¢s la percepci¨®n internacional del Estado jud¨ªo.

Solo en los ¨²ltimos d¨ªas ha surgido un movimiento de mediaci¨®n entre Ham¨¢s e Israel. Tras la llamada al alto el fuego del Consejo de Seguridad, Obama intenta alistar en un eventual armisticio al presidente egipcio, hostil a los fundamentalistas palestinos de la Franja, que gozaron de la protecci¨®n de los proscritos Hermanos Musulmanes. Washington y sus aliados europeos buscan tambi¨¦n la implicaci¨®n de Qatar y Turqu¨ªa. Mientras la agitaci¨®n diplom¨¢tica cobra forma, Israel intenta destruir la capacidad militar de Ham¨¢s. Para Netanyahu, un alto el fuego antes de avanzar en sus objetivos militares equivaldr¨ªa a una derrota. La tragedia de Gaza es la inexistencia de un plan de paz cre¨ªble para Oriente Pr¨®ximo. En ese vac¨ªo, el final de la operaci¨®n en curso, cuando llegue, significar¨¢ probablemente el comienzo de una nueva cuenta atr¨¢s hacia otro ciclo de violencia.