Cuotas para hombres

El primer ministro, David Cameron, ha sido muy criticado por haber presentado los cambios en su gabinete como una ¡°reorganizaci¨®n pensada para las mujeres¡±, como si la promoci¨®n a ese puesto fuera una recompensa de g¨¦nero. Como consecuencia de ello, las mujeres que fueron promovidas vieron da?ada su imagen en el imaginario popular y los hombres que perdieron sus puestos para dejar sitio a las reci¨¦n llegadas se sintieron agraviados.

Poner el foco en ¡°la necesidad de mujeres¡± distorsiona el debate sobre la representaci¨®n, seg¨²n se?ala el acad¨¦mico Rainbow Murray en el ¨²ltimo American Political Science Review. Eso significa que las mujeres son vistas como un conjunto m¨¢s que como personas concretas seleccionadas por sus m¨¦ritos. Tambi¨¦n significa que son juzgadas sobre si merecen o no la plaza de una manera diferente a la de los hombres. Raramente se hace la pregunta en sentido inverso: por qu¨¦ los hombres blancos de ¨¦lite est¨¢n tan sobrerrepresentados, lo que reduce la representatividad de Westminster a una peque?a subsecci¨®n de la sociedad (¡­). Si la partida se jugara al rev¨¦s, poniendo el foco en la desmesurada desproporci¨®n del n¨²mero de hombres, quedar¨ªa despejado el camino para una representaci¨®n m¨¢s proporcional de mujeres y hombres. La variedad y no la homogeneidad se convertir¨ªa en la nueva normalidad. Las mujeres ya no volver¨ªan a ser definidas como ¡°las otras¡±. Tampoco los hombres se ver¨ªan obligados a someterse al examen de irrelevantes calificaciones y el escrutinio de la imagen corporal, la vestimenta o los h¨¢bitos de compra pasar¨ªan a la historia.

Londres, 25 de julio.