Gibraltar, admirable

Ver Gibraltar ahora es impresionante. Hace 30 a?os, cuando lo conoc¨ª por primera vez, a pesar de ser oriunda de La L¨ªnea, era una ciudad decadente, sucia y de edificios desconchados y decr¨¦pitos. Hoy, gracias a la carretera que en 1987 construy¨® Espa?a sobre una playa natural de La L¨ªnea, que desapareci¨®, pueden acceder los 12 millones de visitantes que recibe la Roca cada a?o. Es impresionante admirar la nueva terminal del aeropuerto internacional construida sobre terreno espa?ol y que, aunque iba a recibir vuelos procedentes de Espa?a, y servir de uso compartido, la realidad es que no recibe ninguno desde hace a?os. Sin embargo, Espa?a, a la que Gibraltar debe agradecer mucho, amablemente, permiti¨® miles de l¨ªneas telef¨®nicas y otros servicios sanitarios.

Es impresionante y precioso el nuevo puerto deportivo con marinas ganadas al mar. Es admirable la pujanza del comercio y los nuevos edificios y hoteles sobre terrenos tambi¨¦n a?adidos. Es digno de admiraci¨®n ver la nueva playa y la zona de nueva creaci¨®n en la cara este de la Roca. Impresiona Gibraltar para bien. Y todo, en parte gracias a los sucesivos Gobiernos espa?oles que, sin distinciones, han ayudado a los gibraltare?os, nuestros queridos ¡°llanitos¡±.

E impresiona cuando atraviesas la frontera: La L¨ªnea; casas desconchadas, solares abandonados, paro, el comercio hundido, sin apenas turismo y sin m¨¢s porvenir que seguir mirando a la Roca, por la que naci¨® y de la que vive. Es impresionante ver la enorme desigualdad que existe entre Gibraltar y La L¨ªnea. Y la impunidad con la que la colonia se ha convertido en lo que es. Hay que verlo para creerlo.¡ª Rosario Bachiller Luque.