El golpe del verdugo me ha ense?adoa andar sobre mi herida.A andar... Y m¨¢s andar...A resistir
Mahmud Darwish, poeta palestino, 1941-2008. (Cantor de la sangre)
Un palestino lleva a hombros a su hijo en el este de Gaza. /?MOHAMMED SALEM?(REUTERS)
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La escena se repite siempre con la misma brutal y parsimoniosa insistencia: Israel ataca a Palestina y a los palestinos, destroza centenas de casas, sus calles, barrios enteros, sus escuelas y hospitales, destruye su red el¨¦ctrica y sus reservas de agua. Mata, mata a miles de hombres y mujeres inocentes, centenas de ni?os y ni?as en algunos pocos d¨ªas. La escena se repite siempre con una m¨®rbida obstinaci¨®n, como si fuera la rutina necesaria de un horror al que ya nos hemos acostumbrado: Israel ataca a Palestina y a los palestinos, mientras el mundo mira indiferente o indignado, tanto da. Nada cambia. La escena se repite, se repite y se repite, mientras Palestina se reduce a un interminable repertorio de destrozos, mientras Gaza se retuerce contra el mar que alguna vez le brind¨® vida y poes¨ªa, pero que ahora la abraza a ca?onazos; mientras Cisjordania se desmenuza en fragmentos, se dilacera, se rasga, se desmigaja hasta desaparecer. La escena se repite siempre con la misma brutal y parsimoniosa insistencia.
Mientras duran los ataques, Palestina gana la primera plana de los medios de comunicaci¨®n en todo el mundo. Se organizan debates y actos de apoyo a su pueblo, de solidaridad con los que sufren la prepotencia de una violencia que parece no tener l¨ªmites. Tambi¨¦n, aunque en mucho menor medida, se levantan voces de apoyo al ej¨¦rcito israel¨ª y a su aparentemente heroico combate al extremismo isl¨¢mico. Se justifica la defensa de la vida, generando muertes y destrucci¨®n; se justifica la condena al terrorismo, ejerci¨¦ndolo desde un Estado que, siendo heredero de uno de los mayores holocaustos de la historia humana, produce una crisis humanitaria de proporciones incalculables en una poblaci¨®n indefensa que no ha cometido otro delito que querer vivir en la tierra en la que siempre ha vivido.
Cuando la operaci¨®n militar acaba, casi nadie se acuerda de Palestina. La muerte y el dolor permanecen, sembrando de sufrimiento y humillaci¨®n, de silencio y escarnio la vida de los que quedan vivos, esperando el pr¨®ximo ataque.
Las operaciones militares israel¨ªes se justifican en la ret¨®rica de la ¡°autodefensa¡±. Hoy, como siempre, se sostiene que Israel tiene derecho a defenderse del ataque que sufre su poblaci¨®n civil por las brigadas militares de Hamas. El relato ignora la historia y parece fundarse en la presunci¨®n de que Israel y Palestina conviven armoniosamente en la Tierra Prometida, hasta que un d¨ªa, un grupo de extremistas enfurecidos decide atacar por aire o bajo tierra, como topos asesinos, a una indefensa poblaci¨®n que se apresta a vivir su vida de manera tranquila y apacible. Cada vez que empieza una operaci¨®n militar, un discurso de impostada inocencia y candidez pretende justificar, hacia adentro y hacia fuera, que Israel s¨®lo fundamenta su violencia en el leg¨ªtimo derecho de ejercer la defensa de sus ciudadanos. Esta vez, lo ha hecho asesinando a casi 500 ni?os y ni?as.
Por su parte, Hamas dice tambi¨¦n ejercer el leg¨ªtimo derecho a la defensa de su Estado y de los principios que lo fundamentan. Dice actuar para proteger a su pueblo, atacando, con una brutalidad indirectamente proporcional a su eficacia militar, todo lo que exista del otro lado de sus cada vez m¨¢s diezmadas fronteras. La vida para Hamas depende de la aniquilaci¨®n de los israel¨ªes, sean ellos soldados, campesinos, amas de casa, ni?os o ni?as. La ineficacia de sus ataques en nada disminuye la brutalidad de un movimiento que deposita su futuro en una pol¨ªtica de exterminio.
Para las fuerzas pol¨ªticas conservadoras que gobiernan Israel, la vida depende de someter a Palestina a una sistem¨¢tica destrucci¨®n, transform¨¢ndola en una monta?a de escombros.
El ejercicio de la ¡°autodefensa¡± impide, anula, aniquila, obtura la posibilidad de que ambos pueblos construyan su futuro sobre el derecho que efectivamente tienen y merecen: el derecho a vivir en paz, a criar a sus ni?os y ni?as, a imaginar un futuro de tranquilidad y prosperidad, el derecho a tener y a construir una naci¨®n y a edificarla sobre los principios de la dignidad y del bien com¨²n. Algo que alguna vez el mundo consagr¨® en su declaraci¨®n de derechos fundamentales. All¨¢, en 1948, el mismo a?o en que todo comenz¨®.
Un genocidio es el exterminio de un pueblo por parte de una fuerza, Estado o ej¨¦rcito opresor. Un genocidio supone la destrucci¨®n f¨ªsica e identitaria, cultural y territorial de una naci¨®n o de un grupo ¨¦tnico. El genocidio es la forma m¨¢s extrema de exclusi¨®n, basada en la aspiraci¨®n por aniquilar a un pueblo oprimido. Los genocidas pretenden silenciar y borrar cualquier marca o trazo de vida, cualquier suspiro en la memoria, cualquier vestigio de pasado y de futuro en la historia de una naci¨®n.
La Shoah palestina se expresa hoy con crueldad en el rostro de los miles de ni?os y ni?as asesinados por el Estado de Israel durante los ¨²ltimos a?os. Pero tambi¨¦n se expresa en las violaciones a los derechos humanos, en los abusos de poder y en la prepotencia que sufre cotidianamente la poblaci¨®n de Gaza y Cisjordania, en el muro de verg¨¹enza que las circunda, en los centenares de ni?os y ni?as detenidos ilegalmente por el ej¨¦rcito israel¨ª, mantenidos en prisiones militares que violan todas las leyes internacionales, sin proceso ni condena.
La organizaci¨®n Defence for Children International informa que, en enero de 2014, 183 ni?os palestinos fueron detenidos en prisiones militares israel¨ªes. En febrero: 230; en marzo: 202; en abril: 196; en mayo: 214; en junio, antes de la operaci¨®n ¡°Margen Protector¡±: 202. En las ¨²ltimas semanas, el n¨²mero se ha quintuplicado. Se los mantiene amarrados, vendados, se los somete a castigos f¨ªsicos, no se les permite el acceso a ning¨²n abogado y se les hace firmar declaraciones testimoniales en hebreo, lengua que no dominan.
La agresi¨®n contra la infancia palestina, as¨ª como contra escuelas y hospitales, constituye un delito internacional que ha sido condenado decenas de veces, aunque se mantiene impune. Pero es mucho m¨¢s que esto en la gram¨¢tica del genocidio que Israel perpetra contra el pueblo palestino. Se trata de un ataque al principal horizonte de esperanza sobre el que se puede aferrar el destino de una naci¨®n. Matar y encarcelar ni?os y ni?as es la forma m¨¢s cruel de diezmar la identidad de un pueblo, de tratar de imponerle una derrota ejemplar, de humillarlo, de postrarlo ante el futuro. De asesinar su dignidad.
El inventario de sufrimientos vividos por el pueblo jud¨ªo deber¨ªan ser el principal argumento para rechazar vehementemente los atropellos que el ej¨¦rcito israel¨ª lleva a cabo en los territorios palestinos. Sin embargo, parece haberse transformado en la principal coartada para justificarlos.
Dos Holocaustos, dos Shoah, el mismo dolor, la misma verg¨¹enza.
Theodor Adorno, el gran fil¨®sofo alem¨¢n, perseguido por el nazismo, sostuvo poco antes de morir, en 1966, que ¡°el primer y principal desaf¨ªo de la educaci¨®n es evitar que Auschwitz se repita¡±. Resum¨ªa as¨ª las dos dimensiones emancipadoras de la educaci¨®n: el rechazo radical a toda forma de barbarie humana y la construcci¨®n de una pedagog¨ªa de la esperanza como recurso fundamental en la lucha contra la opresi¨®n y el avasallamiento de los derechos de los m¨¢s d¨¦biles.
El antisemitismo aumenta en el mundo y no son pocas las veces que afirmamos que su ant¨ªdoto est¨¢ en una educaci¨®n m¨¢s cr¨ªtica y comprometida, una educaci¨®n que ayude a nuestros ni?os, ni?as y j¨®venes a comprender mejor las diversas fisonom¨ªas que asume el racismo y todas las formas de discriminaci¨®n que existen sobre la tierra. Una educaci¨®n que forme sujetos m¨¢s libres y justos, m¨¢s solidarios y humanos. Una educaci¨®n que no s¨®lo muestre sino que tambi¨¦n ayude a construir de forma efectiva un mundo igualitario y donde los derechos de los seres humanos sean defendidos y protegidos contra toda prepotencia, contra toda agresi¨®n y atropello a la dignidad que los fundamenta y les da sentido.
Cuando esta nueva operaci¨®n militar israel¨ª concluya, Palestina dejar¨¢ de ser noticia. Que permanezca en nuestras escuelas, haciendo de su historia y de su futuro de libertad, la causa de todos los que defienden un mundo mejor. Por los miles de ni?os y ni?as palestinos que han muerto, por nuestros ni?os y ni?as, por nosotros.
S¨®lo quiero morir en mi tierra
Que me entierren en ella,
Fundirme y desvanecerme en su fertilidad
Para resucitar siendo hierba en mi tierra,
Resucitar siendo flor
Que deshoje un ni?o crecido
En mi pa¨ªs.
S¨®lo quiero estar en el seno de mi patria
Siendo tierra
Hierba
O flor
Fadwa Tuqan, poeta palestina, 1917-2003
(S¨®lo quiero estar en su seno, del poemario La noche y los jinetes, 1969)
Desde Salvador, Bahia
?tima de cinco notas sobre la infancia palestina.
Comentarios
De acuerdo a tu punto de vista, Israel no tiene derecho a defenderse y si fuera posible exterminarlo ser¨ªa lo mejor.Yo vivo en Israel y estoy a favor de una soluci¨®n con los palestinos y estoy en contra de la guerra, pero tu art¨ªculo deja claro que eres antisemita y que gente como yo s¨ª est¨¢ muertaSer¨ªa lo mejor para todos. Es una verg¨¹enza que un diario como el pa¨ªs de rienda suelta a reporteros hip¨®critas y antisemitas.
Se sigue en la onda de comparar dos dramas incomparables, como lo hizo el otro d¨ªa Nicol¨¢s Sartorius - de buena fe, supongo - en el blog de la Fundaci¨®n Alternativas. Isra?l es un Aparato de Estado como cualquier otro y no conozco todav¨ªa ninguno, excepto quiz¨¢s la Rep¨²blica de San Marino, que no haya cometido cr¨ªmenes o tropel¨ªas. Porqu¨¦ entonces siempre se se?ala a Isra?l con el dedo ? Deber¨ªa el Estado de los Jud¨ªos estar abonado al angelismo ? La reapropiaci¨®n de la violencia en el Ghetto de Varsovia y en Sobibor ha recolocado a los Jud¨ªos al mismo nivel que los dem¨¢s seres humanos, tras milenios de ser llevados al matadero cada vez que las comunidades en que viv¨ªan precisaban de un chivo expiatorio. No es ciertamente una buena noticia que la reapropiaci¨®n de la capacidad de defenderse y de atacar al pr¨®jimo constituya, parad¨®jicamente, una carta de presentaci¨®n, un derecho factual a integrar plenamente este nuestro consorcio humano: "Don't fuck with de jews!" era el mensaje que soltaba el personaje interpretado por Daniel Craig en "Munich", de Spielberg. Deploro terriblemente la matanza de civiles que est¨¢ llev¨¢ndose a cabo en Gaza, es injustificable, pero hay entre los plumillas occidentales una necesidad compulsiva, dir¨ªa que euroc¨¦ntrica, de erigirse en protectores morales del pr¨®jimo a golpe de angelizar y victimizar a diestro y siniestro. Como los Jud¨ªos ya no son los "pobrecitos Jud¨ªos", ahora se crean los "pobrecitos" de Ham¨¢s o de Hezboll¨¢. En esta deriva "protectora", "denunciadora"(por lo tanto, establecedora de diferenciales artificiales), se inscriben las primeras piedras del determinismo primero y del antisemitismo despu¨¦s. Constituir Isra?l en eterno problema (la question Juive?) es ya una nota de antisemitismo, aunque sea de andar por casa, como si instalar cuchillas en las vallas de Melilla para que los menesterosos de Africa se corten manos y piernas no fuese una infamia del mismo calibre, pero esa, claro, con boca peque?a. El antisemitismo como ideolog¨ªa de substituci¨®n, con Isra?l representando a nivel internacional la misma coartada que representara anta?o ETA a nivel nacional: Un malo sempiterno que nos redima a todos, comparativamente, de nuestros pecadillos. El infierno est¨¢ pavimentado de buenas intenciones.
La tasa de mortalidad infantil entre los ¨¢rabe-israel¨ªes era del 6,8 por 1.000 en 2010. En ese a?o, el conjunto de los pa¨ªses ¨¢rabes soportaban una tasa del 35,2 por mil y s¨®lo algunos pa¨ªses del Golfo p¨¦rsico se acercaban al nivel de los ¨¢rabes de Israel, sin que ninguno lo superara. Del mismo modo, la expectativa de vida de los ¨¢rabe-israel¨ªes era en 2010 de 78,6 a?os, superior a la de todos los pa¨ªses musulmanes, siendo los EAU los que m¨¢s se acercaban a esa cifra con 77,7 a?os.Por otra parte,en el ¨ªndice de desigualdad de g¨¦nero del IDH de la ONU, Israel se sit¨²a en el puesto 25 de todo el mundo, sin que haya ni un s¨®lo pa¨ªs musulm¨¢n que se le pueda comparar .En suma, curioso perpetrador de holocautos este Israel que consigue prolongar la vida de aquellos que presuntamente querr¨ªan destruirlo. http://hdr.undp.org/sites/default/files/reports/14/hdr2013_en_complete.pdfhttp://hdr.undp.org/sites/default/files/reports/270/hdr_2010_en_complete_reprint.pdfhttp://brookdale.jdc.org.il/_Uploads/dbsAttachedFiles/Myers-JDC-Brookdale-Facts-and-Figures-on-Arab-Israelis-March-2012.pdfPor cierto, que Israel cuida de los ni?os ¨¢rabes mejor que lo hacen Brasil y Argentina de sus propios hijos y ofrece a las mujeres,adem¨¢s, mayores cotas de igualdad que esos dos pa¨ªses sudamericanos donde,seg¨²n nuestro anfitri¨®n, no se est¨¢ perpetrando holocausto alguno; por supuesto, ya est¨¢ ¨¦l all¨ª para denunciarlo e impedirlo. Ham¨¢s, esa banda yihadista emparentada con el IS sirio, que ahora est¨¢ matando y mutilando musulmanes en proporciones semejantes a lo que pretender¨ªa hacer su hom¨®loga palestina con cuantos se le opusieran, est¨¢ usando al pueblo palestino como carne de ca?¨®n de su propaganda antisrael¨ª con la connivencia de lo m¨¢s desnortado de la izquierda occidental, que parece no s¨®lo desconocer d¨®nde est¨¢ el verdadero enemigo de la libertad, el progreso y la democracia, sino ser incapaz hasta de pensar fuera de los m¨¢s rancios esquematismos antisemitas.Cabe especular con la ocasi¨®n de que podr¨ªa haber dispuesto Hanna Arendt para descubrir la banalidad all¨¢ en el relajado acomodo de una terraza de Bah¨ªa.
Hace varios a?os el l¨ªder de HAMAS predijo la destrucci¨®n del Estado de Israel para el a?o 2025. Pero a Pablo Gentili no le interesa referirse a esta "visi¨®n de futuro" de HAM?S, con lo cual desconcentra a su p¨²blico lector de una comprensi¨®n cabal de la problem¨¢tica palestino-israel¨ª. A Pablo Gentili no le interesa que en la regi¨®n se establezca una paz duradera. Porque si fuera as¨ª se pondr¨ªa de pi¨¦ en el mero centro del problema y no en la periferia. Pablo Gentili se divierte, seguramente, imaginando con HAM?S la destrucci¨®n del Estado de Israel. Pero la historia se ocupar¨¢ de bajarlo de sus vuelos imaginarios, de sentarlo, y de ubicarlo en el verdadero centro del an¨¢lisis. En ¨¦se momento quiz¨¢s quiera escribir con m¨¢s sesos sobre el tema. Pero lo dudo. Gente como ¨¦l jam¨¢s reconoce un error y en vez de ello se muda a otros temas. Como el f¨²tbol.
No soy ¨¢rabe ni jud¨ªo, pero tengo ojos,los cierro?Tengo o¨ªdos, los tapono?Y siento, amo,sufro,razono,se supone que tengo un alma,me la arranco?Y luego que?Dejar¨ªa de sentir lo que siento cuando veo las im¨¢genes del holocausto?Pues no quiero??como tampoco quiero dejar de sentir lo que siento por el holocausto que esta perpetrando el pueblo de Israel contra el pueblo Palestino??
Lo siento Jose Luis, pero me parece que de "holocaustos" ("Shoah" ser¨ªa m¨¢s correcto ?) sabe usted bastante poco. Lo que est¨¢ viendo en Gaza es una guerra, un acto b¨¦lico, no un "holocausto", si por "holocausto" entiende usted exterminar millones de civiles con m¨¦todos industriales fordianos, en aplicaci¨®n suprema de lo que es el capitalismo de Estado. Y es que usted y el autor del blog, nos han salido "poetas", que no historiadores. Atribuirle a cada significante su correcto significado es el principio rector de la interpretaci¨®n objetiva del mundo (hasta donde la objetividad alcance, antes de que la substituyan las pasiones tristes). Cosa diferente es que repruebe usted lo que el ej¨¦rcito de isra?l est¨¢ haciendo en Gaza, que eso lo reprobamos muchos, a¨²n sin convertir a Ham¨¢s en corderitos de Dios. Pero no asimile usted lo incomparable, que en el caso que nos ocupa hay sem¨¢ntica incluso para que cualquier periodista de monda haga sus pinitos estil¨ªsticos, mientras que en los Lager del Este de Europa, hace 70 a?os, se desat¨® un horror mayor que la capacidad humana para describirlo. Aqu¨ª ven ustedes todo lo que hay y les da incluso para escribir poemas. En el comparando obsceno que hacen ustedes, les remito a Bela Balacs, cuando escribi¨® que "La ¨²ltima puerta debe permanecer cerrada". Abrirla para manirla y utilizarla como punto de comparaci¨®n es un acto pornogr¨¢fico. Hablen de lo que quieran, protesten, es muy leg¨ªtimo, pero les ruego que no utilicen t¨¦rminos como "holocausto" o "genocidio", porque no vienen al caso.
Cuando Palestina desaparece de las primeras p¨¢ginas vuelve la ¡°rutina¡± que silencian los medios occidentales y la formidable propaganda palestina oculta. Comienzan las acciones violentas en Cisjordania, lanzamiento de c¨®cteles Molotov contra viviendas y coches de jud¨ªos, incendios de bosques israel¨ªes, la educaci¨®n en el odio a los jud¨ªos contin¨²a en las escuelas financiadas por la ONU y desde Gaza, se contin¨²an lanzando cohetes contra las peque?as ciudades israel¨ªes fronterizas y alg¨²n que otro disparo de mortero contra patrullas de fronteras. Con suerte, ning¨²n trabajador israel¨ª que vaya a reparar la valla de seguridad, ser¨¢ asesinado por un francotirador desde la Franja o desde el L¨ªbano. Dentro de unos meses, si a los grupos armados palestinos les interesa, aumentar¨¢n el n¨²mero de cohetes lanzados contra Israel y la maquinaria propagand¨ªstica palestina se pondr¨¢ en marcha de nuevo, y los medios occidentales, volver¨¢n a la carga con sus editoriales contra Israel, y eludir¨¢n decir que ha respondido a los sucesivos ataques palestinos. Nada nuevo que no sepamos ya.
Es lamentable ver como ambos lugares estan siendo victimas y victimarios de la guerra ocasionada por los mismo pol¨ªticos. Y bien sufren los que inician con la guerra??? (jefes de estado, jefes militartes, etc) No. El que sufre y seguira sufriendo por el enga?o pol¨ªtico y expancionista es el pueblo. S¨ª porque los que mueren son nuestros ni?os de palestina, nuestros ni?os de israel, madres y padres inocentes.... mientras tanto esos pol¨ªticos por lo que an votado estan felices insistiendo en la venganza en ser mas que todos. No en defender a un pueblo. La defensa de un pueblo debe ser con la paz y las buenas ideas de intercambio. No con guerras, No con muertes, No con sufrimiento.....la unica solucion es que el pueblo israel y el pueblo palestino encarcelen a esos politicos que tanto da?o nos hacen...
Es incre¨ªble que un estado asesino tenga la aprobaci¨®n de su pueblo, he le¨ªdo los escritos anteriores y me parece mentira la justificaci¨®n de lo injustificable y la negaci¨®n de la realidad. Siempre separ¨¦ a los pueblos de sus gobernantes ya que en Argentina pocas veces los gobiernos representaron al pueblo. Yo ten¨ªa la esperanza de que un pueblo noble y sufrido como el de Israel, habiendo tenido la tr¨¢gica experiencia de su Shoah, permita semejante abuso e impunidad hacia un pueblo indefenso y hacia mujeres y ni?os. Estoy conmovido y ya no acompa?ar¨¦ las marchas contra el brutal ataque a la mutual AMIA, no voy a permitir asentir a un gobierno asesino y seguir¨¦ esperando a que su noble pueblo se revele, ya que los verborr¨¢gicos que escribieron las notas anteriores son la misma basura que los que los gobiernan, los palestinos son mas semitas que muchos israel¨ªes de Israel, ?quienes son los antisemitas?
Es horrible.
Ning¨²n ni?o deber¨ªa vivir en guerra, ni israel¨ª, ni palestino, no sirio, ni irak¨ª....entiendo que como docente al Sr. Gentili le duela la situaci¨®n en la que viven y se educan los ni?os palestinos. Pero sabe cu¨¢l es el Curr¨ªculo de las esculas palestinas? Es m¨¢s sabe lo que Hamas les obliga a aprender? Hamas es un grupo terrorista que deliberadamente niega reconocer al estado de Israel, por lo que la UN no les concede a los palestinos la creaci¨®n de un estado propio. El problema es que Hamas no quiere que los ni?os palestinos vivan y estudien en paz. El problema es que Hamas se traga todos los recursos de la UN. El problema es que Israel lleva 60 a?os intentando vivir en Paz pero grupos terroristas como Hamas y naciones circundantes se lo han estado impidiendo. El problema es que los palestinos son los que tiene que rebelarse contra la tiran¨ªa de Hamas que solo en estos d¨ªas ha ahorcado a una docena de "presuntos colaboradores". El problema es que el lenguaje de la paz significa transparencia, respeto, libertad, igualdad. - Los israel¨ªes que quieren la paz y los palestinos que la quieren son los que tiene que elegir goberantes que la busquen y la lleven a cabo. Es un conflicto de dos partes ahora mismo. - No hasta el 73.-La soluci¨®n la tiene que encontrar ellos. y desde luego victimizar a unos y demonizar a otros no ayuda para nada.
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