La presi¨®n del bistur¨ª

Todav¨ªa no se puede volver atr¨¢s en el tiempo. Y envejecer es algo tan inevitable que parece irrisorio puntualizarlo. Aunque la lucha est¨¢ ah¨ª. Ellas la combaten mucho m¨¢s; en Espa?a, el 88% de las operaciones de cirug¨ªa est¨¦tica se realizan a mujeres ¡ªseg¨²n datos de la Sociedad Espa?ola de Cirug¨ªa Pl¨¢stica Reparadora y Est¨¦tica, SECPRE¡ª. Si a la lucha contra el paso de los a?os le sumamos la fama, la presi¨®n por aparentar lo que ya no se es se multiplica. ?Pero qu¨¦ pasa cuando lo que parece ser obra de un cirujano, en realidad no lo es?

El 12 de agosto, la cantante Thal¨ªa public¨® en su cuenta de Instagram una fotograf¨ªa junto a un tarro de cristal con cinco huesos. ¡°Para mis amorosos fans filipinos, aqu¨ª est¨¢ la prueba. Mis famosas costillas, las he guardado conmigo todos estos a?os¡±, dec¨ªa su mensaje. Fue su forma de responder a los rumores que levant¨® hace poco una presentadora filipina sobre una supuesta operaci¨®n de la mexicana para estrechar su cintura.

La perfecci¨®n continua que se les exige a las celebrities puede llegar a rozar la tiran¨ªa. ¡°El factor est¨¦tico es fundamental en sus carreras¡±, aclara Santiago de Mollinedo, de la agencia de marketing Personality Media. El doctor Gustavo Sordo, cirujano pl¨¢stico y miembro de SECPRE, lo normaliza: ¡°Es posible que existan ciertas expectativas en alguien que vive de su imagen para que la mantenga. Y es l¨®gico hasta cierto punto que usen la tecnolog¨ªa que tienen a su alcance¡±.

A Michelle Pfeiffer su dermat¨®logo le orden¨® tirar el espejo de aumento que ten¨ªa en el ba?o; ¡°el mejor consejo que nadie me dio¡±. Y es que seg¨²n asegur¨® el pasado a?o la actriz, de 56 a?os, la imagen ¡°es tan fundamental que puede causar estragos en la psique¡±. Aunque la californiana dice haber aceptado ya que el tiempo pasa para todos, incluso para aquellos cuyos rostros aparecen en pantallas de m¨¢s de 10 metros de largo: ¡°Hay menos presi¨®n cuando lo reconoces. Ya estoy m¨¢s cerca de los 60 que de los 50 y creo que, para mi edad, estoy bien¡±.

Revelar la relaci¨®n m¨¦dico paciente es ilegal. Y lo m¨¢s importante, inmoral

Aunque esa realidad es m¨¢s dif¨ªcil de ver para otras. El cambio que ha sufrido el rostro de Nicole Kidman gracias al b¨®tox le ha valido las cr¨ªticas de medios de comunicaci¨®n y fans. Y sobre todo de sus detractores, que aseguran que ha perdido expresividad. Hace unos meses, reconoci¨® haberse equivocado y neg¨® seguir usando b¨®tox: ¡°Fue un error, fruto de la presi¨®n y del deseo de lucir mejor. Algo que les pasa a muchas actrices en Hollywood. No he vuelto a usarlo y lo que se ve ahora es fruto de una vida sana, de alejarme del humo del tabaco y de dormir las horas que puedo: nada de cirug¨ªa¡±.

Obcecarse con el cambio f¨ªsico lleva, en muchas ocasiones, al desastre est¨¦tico. El doctor Sordo aclara que la obsesi¨®n por las operaciones no es com¨²n: ¡°Generalmente existen uno o dos deseos de cambio a lo largo de la vida¡±. La naturalidad es, como asegura el t¨®pico, la clave. ¡°Es lo que siempre recomendamos¡±, afirma Mollinedo. Aunque las celebrities no tienen que anunciar cada paso que dan, ¡°siempre est¨¢n expuestas al rumor, a la cr¨ªtica, incluso a la ofensa¡±, concluye el experto.

Kate Winslet, reconocida luchadora por aceptar su cuerpo, ha estado en varias ocasiones en la diana de los rumores ofensivos. El peri¨®dico Grazia public¨® que hab¨ªa acudido a un m¨¦dico dietista para controlar su peso. Tuvo que rectificar. En 2008, Daily Mail la acusaba de mentir sobre el ejercicio que hac¨ªa para mantenerse en forma. La oscarizada actriz les demand¨® al considerar que el art¨ªculo da?aba su ¡°reputaci¨®n personal y profesional¡±. El tabloide la indemniz¨® con 28.000 euros y una disculpa en sus p¨¢ginas.

A la altura de Winslet est¨¢ Emma Thompson, que ha reiterado en varias ocasiones que el b¨®tox ser¨ªa una traici¨®n a todo en lo que cree: ¡°No le veo ning¨²n sentido. Tengo 50 a?os y pienso, ?qu¨¦ tiene de malo? Me encantar¨ªa poder lavar el cerebro a todas las mujeres del mundo y explicarles que no importa su aspecto. Es una obsesi¨®n insana¡±. Y muchas son las famosas que no quieren que se les cuelgue ese sambenito. Pen¨¦lope Cruz lanz¨® un comunicado para desmentir que hubiese hecho dieta Dukan; la actriz Megan Fox public¨® en su Facebook varias fotograf¨ªas con la frente arrugada para demostrar que ella no se hab¨ªa inyectado b¨®tox ¡ªaunque viendo su cambio f¨ªsico con los a?os, es m¨¢s que probable que se haya sometido a otras cirug¨ªas¡ª; Kim Kardashian y Jennifer L¨®pez han tenido que asegurar que sus respectivos traseros son naturales. Cuatro mujeres que tambi¨¦n viven de su belleza y que han tenido que desmentir en alguna ocasi¨®n haberse hecho alg¨²n cambio con la hoja de un bistur¨ª. Por orgullo o por privacidad, para el doctor Sordo ¡°tienen derecho a comunicar aquellos aspectos sobre sus biograf¨ªas que deseen¡±.

Los cirujanos, la mano detr¨¢s de los ¨¦xitos o los fracasos pl¨¢sticos m¨¢s comentados, no se sienten heridos por ser negados: ¡°No somos m¨¢s que el t¨¦cnico que soluciona los problemas que le plantea el paciente. Tenemos que estar ocupados en dar el mejor servicio, no de la publicidad gratuita que nos pueda dar un personaje¡±. El derecho a contar que ellos respiraron a 30 cent¨ªmetros de sonrisas millonarias no existe: ¡°Ni para gente reconocida ni para la que no lo es. Revelar la relaci¨®n m¨¦dico paciente es ilegal. Y lo m¨¢s importante, inmoral¡±.

Roza lo inmoral hacer bromas relacionadas con este tema, seg¨²n el experto de Personality Media, ¡°que no deja de ser un tema m¨¦dico, un tema muy delicado como es la salud. Hay un dicho perfecto para este caso que es: m¨¢s vale parecer tonto que abrir la boca y demostrarlo¡±. Seg¨²n Mollinedo, en este caso, Thal¨ªa lo borda.