El sintecho de Miley Cyrus s¨ª tiene un hogar

Se llama Jesse Helt, tiene 22 a?os, es natural de Oreg¨®n (Estados Unidos) y sus ojos son tan azules como el cielo californiano que se refleja en su cara mientras duerme. Porque este indigente lo hace a la intemperie: es uno m¨¢s de los 1,6 millones de sintecho que se calcula hay en EE UU. Techo no tiene pero su rostro ha dado la vuelta al mundo. Lo busca hasta la polic¨ªa. Helt acompa?¨® a Miley Cyrus a la entrega de premios de MTV el domingo y all¨ª recogi¨® el galard¨®n en lugar de la cantante, que le cedi¨® su lugar para permitirle entonar un emotivo discurso sobre la situaci¨®n de las personas sin hogar, de aquellos como ¨¦l, llegados a la meca del espect¨¢culo en busca de una oportunidad. El momento no pudo ser m¨¢s Hollywood en una gala como esta, que en las ¨²ltimas d¨¦cadas ha pasado de trasgresora a burguesa. Corrieron las l¨¢grimas, las primeras de la propia Cyrus, acostumbrada a dar otro tipo de n¨²meros en el escenario. Y a Helt le tembl¨® tanto el pulso que Jimmy Falon, que ejerc¨ªa de maestro de ceremonias, tuvo que sujetarle el micr¨®fono.

Un momento de emoci¨®n y conciencia seguido del cinismo natural de esta industria. Porque¡­ ?qui¨¦n es Jesse Helt? Como muchos otros, Katy Perry, amiga de Cyrus, pens¨® que este rubio de buena planta y melena resplandeciente era el nuevo revolc¨®n de la cantante. En realidad Cyrus le hab¨ªa conocido esa misma semana, al visitar el centro de acogida My Friend¡¯s Place por el que pasan unos 1.700 j¨®venes sin techo al a?o. Situado en el coraz¨®n de Hollywood, en el llamado bulevar de los sue?os rotos, el lugar ofrece cama, ducha y ¨¢nimos. Y, el pasado martes, tambi¨¦n la presencia de la superestrella de 21 a?os interesada en la situaci¨®n de estos chicos ¡°hambrientos, perdidos y asustados¡± como se describi¨® a s¨ª mismo Helt en su discurso.

?l lleg¨® all¨ª buscando una oportunidad como actor o como modelo. Seg¨²n su portafolio en la web Model Mayhem, estaba dispuesto a decir que s¨ª a todo. ¡°Me encantar¨¢ trabajar con todo tipo de fot¨®grafos¡±, a?ade ah¨ª insinuante. Seg¨²n ha declarado ahora su madre, Linda Helt, a la prensa local su hijo se march¨® de casa en busca de oportunidades en Los ?ngeles. De ah¨ª que tras cursar sus estudios b¨¢sicos abandonara su casa natal, a su familia y a sus tres hermanos para ¡°triunfar por s¨ª mismo¡±. Tambi¨¦n lleg¨® a Los ?ngeles huyendo de la polic¨ªa despu¨¦s de haber violado los t¨¦rminos de su libertad condicional tras ser condenado por una falta menor. Luego vinieron las llamadas de que estaba viviendo ¡°bajo un arbusto¡±. Seg¨²n su madre, Jesse siempre pudo regresar a casa pero ¡°no quiso volver a mam¨¢¡±. ¡°Jesse necesitaba una bendici¨®n¡±, a?adi¨®.

Cyrus fue la bendici¨®n de Helt pero la vocalista tambi¨¦n encontr¨® en ¨¦l la respuesta a sus inquietudes. Seg¨²n ha dicho a la prensa, la idea de invitarle a la gala naci¨® antes de conocerle. Fue hace un a?o, tras el esc¨¢ndalo que gener¨® su paso por estos mismos galardones y su famoso twerking junto a Robin Thicke. ¡°No me hab¨ªa dado cuenta de mi alcance, de mi poder¡±, reconoci¨® en unas declaraciones en las que a?adi¨®: ¡°Si tengo esta gran oportunidad de hablar con los j¨®venes, ?de qu¨¦ quiero que hablen?¡±. La respuesta la dio Helt y su discurso escrito con el que acept¨® el galard¨®n de Cyrus al mejor v¨ªdeo del a?o por Wrecking ball.

Su paso por la ceremonia le ha garantizado a Helt una nueva oportunidad. La ex princesa Disney se ha ofrecido a ¡°ayudarle a empezar una nueva vida¡±. Lo primero que ha hecho ha sido pagarle un billete para que pueda visitar a su madre. Tambi¨¦n se puede quedar con la estatuilla de los premios MTV. Adem¨¢s, Cyrus ha puesto en marcha una colecta en red, mediante prizeo, en la que rifa un viaje para dos para su pr¨®ximo concierto en R¨ªo de Janeiro con el fin de recolectar ayuda destinada a My Friend's Place. Los ¨²nicos perdedores de esta historia fueron los MTV, que en su edici¨®n pasada sumaron cerca de dos millones m¨¢s de espectadores cuando la joven int¨¦rprete prefiri¨® menear sus posaderas antes que abrir su buen coraz¨®n.