Saber desconectar

Tengo 19 a?os y me considero, o por lo menos lo hac¨ªa, un adicto a todo el mundo 2.0 que nos rodea. Digo ¡°por lo menos lo hac¨ªa¡±, porque a mediados de verano un amigo m¨ªo me propuso la apuesta de ver si era capaz de no conectarme a Facebook y derivados en 10 d¨ªas. M¨¢s por orgullo que por recompensa, acept¨¦. Los primeros d¨ªas, pues como el que deja de fumar: un mono tremendo por ver qu¨¦ se coc¨ªa en las redes en mi ausencia. Llegada la meta llam¨¦ a mi amigo, no para restregarle mi triunfo, sino para darle las gracias: incre¨ªble el tiempo que he ganado de verano.

No invito a que dejes las redes sociales, ni mucho menos, invito a que reflexiones lo que suponen en tu vida y tomes decisiones que solo t¨² sabr¨¢s si son suficientes o necesarias, que te enfrentes a esta realidad aunque no sea trending topic.

Propongo un m¨¦todo para ello: analiza el verbo ¡°saber¡±, saber el tiempo que me lleva, saber cu¨¢nto me enriquece, saber si teniendo conocimiento de todo lo que comen, beben, escuchan y sienten mis ¡°amigos¡± fortalece mis relaciones sociales. Y con estas y mil preguntas m¨¢s a las que uno puede llegar, analices el verbo ¡°desconectar¡±, desconectar para conectar con la gente de verdad, desconectar para no tener en la cabeza 2.000 cosas absurdas y que a las tres o cuatro que tienen importancia, no puedas dedicarle ni 10 segundos porque est¨¢s actualizando Facebook, Twitter e Instagram. Desconecta para disfrutar del mundo tal cual es, sin filtros, likes y RT.¡ª Juan Pablo Chart Pascual.