"Estar¨ªa bien aguantar cinco a?os m¨¢s"

"Creo que ser¨¢ mejor que sostenga yo el m¨®vil, ?no?¡±, dice Pau Gasol desde el asiento de copiloto del coche al que nos hemos subido junto a su s¨¦quito. Se supone que debemos cruzar el centro de Madrid en 15 minutos un viernes a mediod¨ªa. ¡°La otra opci¨®n es que me siente atr¨¢s con vosotros, pero no parece muy sensata¡±, bromea el ex de los Lakers, mientras gira sus 213 cent¨ªmetros para ver a cuatro personas hacinadas en el asiento de atr¨¢s del veh¨ªculo. Ha finalizado la sesi¨®n fotogr¨¢fica para esta portada de ICON y Pau tiene otro compromiso con los medios. Se ha ofrecido a terminar la entrevista en el trayecto, sin pensar en que las previsiones aritm¨¦ticas para el viaje no inclu¨ªan un sexto tripulante. Con media mejilla pegada al cristal de la ventana, le pasamos el tel¨¦fono al manager, que se lo acerca al conductor, quien finalmente se lo alcanza al flamante nuevo fichaje de los Chicago Bulls. ¡°Cuando me digas, arranco la grabaci¨®n¡±, ofrece Pau, mientras el coche negocia las calles de La Latina. Tercera pregunta. Entones, claro, suena el tel¨¦fono¡­ Y maldecimos nuestra suerte.

Mierda.

Es tu madre [Gasol, tras informar de qui¨¦n llama, hace adem¨¢n de acercarnos el terminal].

Cuelgue.

Cuelgo, pero eso ha estado feo.

Lo entender¨¢.

[Dos minutos m¨¢s tarde, suena de nuevo].

Mierda.

Es una tal Mar¨ªa [Pau, esta vez, ni se inmuta].

?Qui¨¦n?

Mejor cuelgo.

Gracias.

[Un minuto y medio m¨¢s tarde, otra llamada].

Mierda.

Es tu jefe.

?Cuelgue!

No, no. Esta vez lo voy a coger.

Y mientras Pau bromea por el aparato, el manager nos susurra al o¨ªdo: ¡°Para que no pase esto, debes ponerlo en modo avi¨®n¡±. Le respondemos que con las cintas de cassette esto no pasaba. Asiente por no darnos un bofet¨®n. Pau, finalmente, cuelga el tel¨¦fono. ¡°Ya est¨¢, todo arreglado. Sigues teniendo trabajo. ?Cu¨¢l era la pregunta?¡±. Ni idea. ¡°S¨ª, hombre, le has preguntado sobre lo de la tienda de productos espa?oles en Los ?ngeles¡±, interviene el conductor. ¡°Es verdad. Mira, tengo ciertos proyectos e ilusiones que no involucran el deporte. Me gustar¨ªa contribuir al posicionamiento y al ¨¦xito de nuestros productos en el extranjero. Me ilusiona hacerlo. Tenemos una cocina excepcional. Es muy exportable, y lo puede ser todav¨ªa m¨¢s. Es un proyecto que me ilusiona. Cuando me retire quiero seguir ligado al baloncesto, pero tambi¨¦n quiero emprender m¨¢s proyectos fuera de este ¨¢mbito¡±, responde el jugador a la pregunta del ch¨®fer. Todo el coche asiente, mientras uno de sus tripulantes reza por que no haya m¨¢s curvas hacia la izquierda antes de llegar al destino.

?Cu¨¢nto tiempo m¨¢s se ve jugando?

Tengo 33 a?os. Estar¨ªa bien poder jugar hasta los 38. Esa es la idea, aunque la carrera de un deportista puede cambiar en cualquier momento, sobre todo, cuando ya se tienen unos a?os. Tratar¨¦ de disfrutar cada momento.

?Teme m¨¢s ahora a las lesiones?

Cuando avanza la vida te das cuenta de tu fragilidad como ser humano. En mi caso, como jugador de baloncesto, adem¨¢s de lo moral, existe lo f¨ªsico. Entonces no te queda m¨¢s que cuidarte. Tratas de prevenir lesiones trabajando a nivel f¨ªsico y mental para estar siempre a punto y poder avanzarte a lo que pueda venir.

Para alguien tan acostumbrado a ganar, esta p¨¦sima temporada en los Lakers debe haber sido un drama.

Ha sido dif¨ªcil, complicada. Debes entenderlo, ser consciente y analizar por qu¨¦ pasa. Una vez lo asumes y lo comprendes, pues lo llevas mejor. Eso no hace que el tema se vuelva m¨¢s agradable, pero entender lo que sucede, al menos, ayuda a llevar mejor las cosas.

?Es el Mundial un b¨¢lsamo tras una temporada tan mala como esta?

Obviamente, es m¨¢s refrescante cuando has tenido una temporada menos positiva. Cambiar el chip es necesario, y un equipo potente como este, pues hace que te ilusiones m¨¢s de lo normal. Contamos con un buen grupo, tenemos altas expectativas, como en cada campeonato de los ¨²ltimos cinco a?os.

La primavera de su descontento

Siempre he tratado de mantenerme alejado de la pol¨ªtica. Si te metes, te caen palos, hagas lo que hagas

El d¨ªa en que tiene lugar todo esto, Pau Gasol no deber¨ªa estar en Madrid; deber¨ªa estar subido a alg¨²n avi¨®n rumbo a alguna ciudad sede de alguna franquicia de la NBA para disputar un partido de los playoffs. Eso es lo que hacen los jugadores de Los Angeles Lakers cada primavera. Pero este ha sido un a?o excepcional. Excepcionalmente malo. La franquicia no se ha clasificado para las eliminatorias finales, Pau se ha enfrentado a su entrenador, Mike d¡¯Antoni, ha sufrido un par de episodios de v¨¦rtigo (¡°la primera vez que me sucedi¨® me asust¨¦ much¨ªsimo. No sab¨ªa qu¨¦ era eso. Fue horrible. Luego, bueno, como casi todo, si te tratas, se cura¡±), Kobe Bryant, el jugador estrella del equipo, se ha lesionado y Gasol ha terminado el a?o con sus peores n¨²meros desde que aterriz¨® en Los ?ngeles. Todo mal. El jugador, dos veces campe¨®n de la NBA con los Lakers, es, por primera vez en su larga carrera ¨Caterriz¨® en EE UU en 2001 para jugar con los Memphis Grizzlies¨C, libre de decidir ad¨®nde quiere ir, con qui¨¦n quiere jugar. Un mes m¨¢s tarde se confirmar¨¢ que deja el equipo m¨¢s odiado de la liga para fichar por los Bulls de Chicago, donde hizo historia Michael Jordan. La franquicia cumple los requisitos que Pau enumeraba durante nuestro encuentro. ¡°A estas alturas de mi carrera, el dinero es secundario [percibe aproximadamente 19 millones de d¨®lares por temporada]. Uno debe pensar en fichar por un equipo competitivo, que est¨¦ en una ciudad atractiva, donde uno vea que puede ser feliz. Mira, si vienen, por ejemplo, los Jazz de Utah, deber¨ªan llegar con un equipo muy bien armado para convencerme. Vivir all¨ª no es mi ideal, me entiendes, ?no?¡±, confiesa Pau, quien en estos seis a?os en Los ?ngeles se ha adaptado a la perfecci¨®n a una ciudad a la que no es f¨¢cil hacerse. Ha vivido en Redondo Beach, a escasos metros de la playa, ha participado en la vida social y cultural de la urbe y ha disfrutado del clima e incluso de los largos trayectos en coche que requiere cualquier cosa en la metr¨®polis californiana. ¡°Es una ciudad con sus ritmos y sus cosas, pero a m¨ª me encanta¡±, asegura el jugador. ¡°Cuando llegu¨¦ me dec¨ªan que se me iba a ser complicado adaptarme. Es una cultura distinta, pero tuve la suerte de que mi familia me acompa?¨® desde el primer momento. El baloncesto era mi b¨¢lsamo y disfrut¨¦ mucho jugando. En realidad, es para lo que est¨¢s ah¨ª¡±.

En su primera rueda de prensa, tras ser elegido en primera ronda del draft, con solo 21 a?os, ya mostr¨® un sorprendente nivel de ingl¨¦s y un todav¨ªa m¨¢s fascinante desparpajo. Le iba a ir bien, solo ten¨ªa que engordar un poco. Trece a?os m¨¢s tarde, el de Sant Boi es capaz de analizar aquella liga con la sabidur¨ªa de un tipo que la ha ganado dos veces, ha jugado cuatro All Stars y fue elegido novato del a?o en su primera temporada. En EE UU es un nombre tan c¨¦lebre y una figura tan asimilada en la cultura de aquel pa¨ªs que, durante los pasados Juegos Ol¨ªmpicos, muchos estadounidenses no comprend¨ªan c¨®mo era posible que Pau (y su hermano Marc) jugaran con la selecci¨®n espa?ola y no con la de las barras y estrellas. ?Espa?a? Como mucho, M¨¦xico. ¡°Dentro de lo que cabe, todos los vestuarios de todas las ligas son similares. Condiciona mucho el rendimiento del equipo, eso determina el estado de ¨¢nimo de los jugadores, pero el perfil del jugador es pr¨¢cticamente el mismo en todas partes. Lo que s¨ª es distinto en la NBA es el elemento cultural. A veces, no se entiende que hay que saber anteponer el inter¨¦s colectivo al personal. En muchas ocasiones debes hacer sacrificios por el bien del equipo, y eso es algo que se debe comprender si se quiere alcanzar el ¨¦xito. Si eres uno de los capitanes, un veterano dentro del vestuario, cuando las cosas se tuercen debes dar un pu?etazo sobre la mesa. Eso es lo que hice un par de veces esta pasada temporada. No hay que temer decir lo que se piensa en momentos complicados, pues las consecuencias de hacer eso siempre ser¨¢n positivas. No importa que haya gente que se puede enfadar, es parte de tu responsabilidad. Debes entender en qu¨¦ lugar est¨¢s y cu¨¢l es tu papel. Debes pensar en el equipo cuando las cosas van mal, no pensar en qu¨¦ har¨¢s t¨² cuando la temporada acabe¡±.

A estas alturas de mi carrera, el dinero es secundario. Quiero un equipo competitivo

La temporada de Pau no fue mala solo por el triste desempe?o de su equipo en la NBA. La cosa ya empez¨® con flojera cuando, a primeros de septiembre de 2013, el jugador se embarc¨® en un vuelo rumbo a Buenos Aires para defender la candidatura de Madrid a celebrar los Juegos Ol¨ªmpicos de 2020. El varapalo fue may¨²sculo. Y aunque la alcaldesa aliviara la tragedia a?adiendo altas dosis de humor con el fin de rebajar la tensi¨®n, lo cierto es que, como recuerda el catal¨¢n, ¡°la decepci¨®n fue muy grande. No s¨¦, tal vez las expectativas eran demasiado altas. Supo mal por toda esa gente que se hab¨ªa hecho ilusiones. Caer eliminados a la primera fue duro. Pero fue una experiencia positiva. Aprend¨ª mucho, estuve con un grupo de personas muy interesante, form¨¦ parte de la presentaci¨®n frente al COI, conoc¨ª Buenos Aires, com¨ª churrascos buen¨ªsimos. Ya est¨¢. Eso es lo que cuenta¡±.

?Hab¨ªa algo de pol¨ªtica en que usted formara parte de aquella delegaci¨®n?

No. Mira, entiendo que los deportistas interesen a los pol¨ªticos para utilizarlos para su propio beneficio: pol¨ªtico, econ¨®mico, de imagen, el que sea. Tienes que ir con cuidado para que no se te manipule contra tu voluntad, saber d¨®nde est¨¢s, d¨®nde te metes. Personalmente, siempre he tratado de mantenerme alejado de esto, pues soy consciente de que te van a caer palos, hagas lo que hagas y digas lo que digas. Me mantengo al margen. Solo quiero estar tranquilo.

?Siente que debe significarse pol¨ªticamente?

Es que la pol¨ªtica es un campo que jam¨¢s me ha llamado la atenci¨®n. Prefiero centrarme en lo m¨ªo.

?Sirven los ¨¦xitos deportivos para explicar la modernizaci¨®n de un pa¨ªs, o est¨¢n muy lejos de ser algo con semejante valor?

Para el caso de Espa?a, creo que, en algunos aspectos, s¨ª puede servir, pero en muchos otros, no tanto. Se debe estar orgulloso del ¨¦xito que se ha tenido a nivel deportivo, pero no creo que sea algo que se traduzca en el buen funcionamiento de otras ¨¢reas dentro del rendimiento general del pa¨ªs.

El glorioso final de su verano

Han pasado un par de meses desde la sesi¨®n fotogr¨¢fica. Durante aquella ma?ana, Pau se dedic¨® a bromear sin compasi¨®n sobre pr¨¢cticamente cualquier detalle que se le pusiera delante. Habl¨® con todo el mundo, soport¨® alfileres, pantalones que le llegaban por los gemelos y le quedaban rid¨ªculamente cortos, estuvo sol¨ªcito con todas las peticiones que se le hicieron y hasta se arranc¨® con un par de bastante logradas imitaciones de Chiquito de la Calzada. Pero ha pasado el verano y ya est¨¢ aqu¨ª el Mundial. En este tiempo, Gasol ha fichado por los Bulls y se ha juntado con sus compa?eros de selecci¨®n para completar una fase de preparaci¨®n formidable, que hace albergar grandes esperanzas al respecto del papel que pueda desempe?ar el equipo en el Mundial que arranc¨® el pasado s¨¢bado. Dos semanas antes del inicio del campeonato, y con el fin de actualizar las respuestas del jugador, contactamos de nuevo con su manager. ¡°P¨¢same las preguntas por email y yo se las hago a Pau, que lo voy a ver esta tarde¡±, nos dice. Enviamos el email. Para nuestra sorpresa, las respuestas no llegan por escrito redactadas por alg¨²n familiar o empleado, como suele suceder casi siempre en estos casos, sino que son dos archivos de audio con el m¨¢nager leyendo nuestras preguntas al jugador. ?Dos archivos? Pues eso. Play.

?En qu¨¦ se diferencia este equipo espa?ol del ¨²ltimo que se encontr¨® usted? [la pregunta, le¨ªda por el manager suena mucho mejor]

Las sensaciones siempre son buenas. Estar con la selecci¨®n es un placer. Tenemos buena relaci¨®n, y adem¨¢s de jugar bien al baloncesto, nos llevamos muy bien. Lo especial de este equipo es la calidad, tanto baloncest¨ªstica como humana, la experiencia que llevamos acumulada tras tantos campeonatos y la ilusi¨®n que mantenemos por competir al m¨¢ximo.

?Facilita, pero tambi¨¦n deval¨²a el ¨¦xito que se pueda lograr en el Campeonato el hecho de que EE UU llegue con un equipo sin casi ninguna de sus figuras?

Creo que¡­

Y de golpe, la grabaci¨®n se corta. Abrimos el segundo archivo y se oye al manager: ¡°Se ha cortado, seguimos¡±. Esto es lo que pasa cuando no se pone el m¨®vil en modo avi¨®n. En fin, ah¨ª va la opini¨®n de Pau sobre el combinado yanqui: ¡°¡­ EE UU tiene un equipazo con grand¨ªsimos jugadores. Es cierto que tiene bajas sensibles, pero siguen siendo favoritos¡±. Fin de la grabaci¨®n.

Asistente de estilismo: Inma Barandica / Maquillaje y peluquer¨ªa: Jos¨¦ Luis Ruzafa @ Talents para MAC y GHD. Agradecimientos: Palacio Duarte Pinto Coelho