El mayor mapa del c¨¢ncer en Espa?a demuestra la desigualdad por regiones
Un atlas analiza datos de un mill¨®n de muertes en 20 a?os Hay zonas donde el riesgo de morir por ciertos tumores es m¨¢s de un 50% mayor
La frase de moda entre los expertos en salud p¨²blica, ¡°el c¨®digo postal es m¨¢s importante que el c¨®digo gen¨¦tico¡±, se cumple en ocasiones en el caso de los tumores malignos. El mayor mapa de la mortalidad por c¨¢ncer realizado hasta la fecha en Espa?a muestra numerosas manchas rojas, zonas en las que los riesgos de morir por ciertos tumores son m¨¢s de un 50% m¨¢s altos que en el resto del pa¨ªs.
El atlas, elaborado por investigadores del Centro Nacional de Epidemiolog¨ªa, utiliza datos de un mill¨®n de muertes por c¨¢ncer registradas en Espa?a entre 1989 y 2008. El mapa constata, por ejemplo, que el riesgo de morir por c¨¢ncer de est¨®mago es mucho mayor en ¨¢reas de Castilla y Le¨®n, como Burgos y Palencia, que en el resto de Espa?a. Los autores, dirigidos por el epidemi¨®logo Gonzalo L¨®pez Abente, atribuyen este exceso de mortalidad a las costumbres alimentarias en estas zonas rurales, ¡°en las que pueden consumirse m¨¢s alimentos curados o ahumados y menos frutas y vegetales que en las zonas costeras¡±, aunque los investigadores no descartan otras causas ambientales. Casi 145.000 personas murieron por c¨¢ncer de est¨®mago en Espa?a durante el periodo estudiado.
El presidente de la Sociedad Espa?ola de Epidemiolog¨ªa, Esteve Fern¨¢ndez, recalca que estos mapas muestran riesgos relativos, no absolutos. ¡°Puedes tener un riesgo de morir por un determinado c¨¢ncer que triplique el riesgo en otra zona, pero el riesgo absoluto sigue siendo peque?o. Nadie tiene que mudarse despu¨¦s de ver estos mapas¡±, tranquiliza Fern¨¢ndez. Casi siempre es m¨¢s peligroso el mero hecho de fumar, recuerda.
El nuevo mapa tambi¨¦n expone los muertos por c¨¢ncer de pulm¨®n, m¨¢s de 340.000 en el periodo de estudio. Las zonas con mayor riesgo de mortalidad en los hombres se localizan en Extremadura, Andaluc¨ªa occidental (Huelva, Sevilla y C¨¢diz), Asturias y Cantabria. En las mujeres, los mayores riesgos se encuentran en algunos pueblos de Pontevedra y Ourense.
Aunque la distribuci¨®n del c¨¢ncer de pulm¨®n se relaciona con el n¨²mero de fumadores, los investigadores tambi¨¦n apuntan a la contaminaci¨®n atmosf¨¦rica. Y, en el caso de los pueblos gallegos, los cient¨ªficos se?alan al rad¨®n, un gas radiactivo que se origina de manera natural a partir del uranio del subsuelo. Pese a su poder cancer¨ªgeno, el Ministerio de Fomento lleva dos a?os con un borrador de normativa contra el rad¨®n metido en el congelador. Unos 300.000 edificios en Espa?a podr¨ªan superar en su interior los m¨¢ximos recomendados de este gas radiactivo, seg¨²n los c¨¢lculos preliminares que maneja el arquitecto Borja Frutos, del Instituto de Ciencias de la Construcci¨®n Eduardo Torroja (CSIC). La adaptaci¨®n de las viviendas, con la instalaci¨®n de un sistema de extracci¨®n de rad¨®n, rondar¨ªa los 4.000 euros en el caso de viviendas unifamiliares de 100 metros cuadrados.
¡°La distribuci¨®n espacial [de la mortalidad por tumores] puede revelar diferencias en los factores de riesgo y contribuir de manera significativa a establecer pol¨ªticas para luchar contra el c¨¢ncer¡±, explican los autores del mapa, publicado recientemente en la revista especializada BMC Cancer. L¨®pez Abente, una autoridad mundial en este tipo de investigaciones y al¨¦rgico a la prensa desde hace a?os, no ha querido explicar sus resultados a este peri¨®dico. Habitualmente, pide cautela antes de extraer conclusiones r¨¢pidas a partir de sus datos.
El epidemi¨®logo tambi¨¦n es responsable de otros estudios que se?alan que, en los pueblos cercanos a una mina de carb¨®n a cielo abierto, el riesgo de fallecer por c¨¢ncer de colon es un 9,7% superior al del resto de la poblaci¨®n y el de morir por un tumor de pulm¨®n es un 6,6% mayor. Minas de este tipo se encuentran en Le¨®n, Palencia, Teruel, Ciudad Real y C¨®rdoba.
El equipo de L¨®pez Abente tambi¨¦n acaba de presentar en un congreso en Anchorage (Alaska, EEUU) un estudio que muestra el exceso de mortalidad por c¨¢ncer en los pueblos espa?oles cercanos a cementeras. En estos municipios, el riesgo de morir por c¨¢ncer colorrectal es un 10% mayor que en los pueblos situados a m¨¢s de cinco kil¨®metros, en el caso de las mujeres, y un 7% mayor en los hombres, para los que el riesgo de fallecer por c¨¢ncer de est¨®mago tambi¨¦n es un 9% mayor.
El riesgo de morir por c¨¢ncer colorrectal es un 10% mayor cerca de cementeras
El nuevo mapa de L¨®pez Abente estudia la mortalidad por los seis principales tipos de c¨¢ncer dividida en quinquenios. ¡°La novedad de este mapa es que no es una foto, sino que muestra la evoluci¨®n en los ¨²ltimos 20 a?os¡±, aplaude Fern¨¢ndez. El valor de esta pel¨ªcula cient¨ªfica se observa al analizar las 115.000 muertes por c¨¢ncer de mama entre las mujeres espa?olas en el periodo 1989-2008. En los 10 primeros a?os aparec¨ªan manchas rojas en Catalu?a y Baleares, atenu¨¢ndose recientemente y dejando paso a puntos calientes en pueblos de Huelva, Sevilla y C¨¢diz, con un riesgo de morir por c¨¢ncer de mama un 10% mayor que en el resto de Espa?a.
Los autores sugieren que se ¡°monitorice¡± este presunto cambio de distribuci¨®n espacial, aunque advierten de que el estudio de la mortalidad por tumores de mama ha perdido validez. Gracias a los programas de detecci¨®n temprana y a los avances terap¨¦uticos, la supervivencia de las mujeres a los cinco a?os de ser diagnosticadas supera el 80%. Lo ideal ser¨ªa analizar la incidencia de la enfermedad, no la mortalidad, pero no existen registros detallados en Espa?a.
El equipo de L¨®pez Abente ya public¨® atlas m¨¢s incompletos, como los de los periodos 1978-1992 y 1989-1998. Una de las novedades respecto a aquellos es la distribuci¨®n del c¨¢ncer de vejiga, culpable de m¨¢s de 77.000 muertes en Espa?a entre 1989 y 2008. Adem¨¢s del vicio de fumar, responsable del 50% de estos tumores, los epidemi¨®logos alertan del riesgo de los trabajadores del sector de la fabricaci¨®n de ciertas sustancias qu¨ªmicas industriales, como las aminas arom¨¢ticas, empleadas en la producci¨®n de colorantes. Tambi¨¦n sufren un riesgo elevado las personas dedicadas a la fabricaci¨®n de pinturas, tintes, gomas, cuero y aluminio, as¨ª como los conductores de camiones, posiblemente por su exposici¨®n a las emisiones de los motores di¨¦sel.
Los hombres sufren el 82% de las muertes por c¨¢ncer de vejiga en Espa?a. La mayor tasa de mortalidad aparece en pueblos de C¨¢diz, Sevilla y Huelva, con su Polo Qu¨ªmico, y en la comarca del Bages, otra zona con industrias textiles y qu¨ªmicas situada en el centro de Catalu?a. Sin embargo, los cient¨ªficos subrayan que estas manchas rojas se est¨¢n atenuando en los ¨²ltimos a?os.
Huelva, con su Polo Qu¨ªmico, y la comarca catalana del Bages tienen mayores tasas de mortalidad por c¨¢ncer de vejiga
La distribuci¨®n de los 105.000 fallecimientos de hombres por c¨¢ncer de pr¨®stata no muestra puntos alarmantes, aunque en los primeros 15 a?os se detect¨® una desigualdad entre el norte y el sur. Galicia era la regi¨®n con m¨¢s pueblos con riesgos altos, frente a Andaluc¨ªa, que presentaba riesgos por debajo de la media. ¡°La diabetes o el factor protector que ofrecen los antidiab¨¦ticos orales quiz¨¢ puedan explicar la baja mortalidad por c¨¢ncer de pr¨®stata observada en Andaluc¨ªa, ya que en el periodo 1989-1998 esta regi¨®n ten¨ªa una tasa de mortalidad relacionada con la diabetes m¨¢s alta que en el resto de Espa?a¡±, explica el equipo de L¨®pez Abente.
El investigador Miquel Porta, expresidente de la Federaci¨®n Europea de Epidemiolog¨ªa, aplaude el nuevo mapa del c¨¢ncer y se?ala directamente a las autoridades. ¡°Me preocupa que las pol¨ªticas que deber¨ªan estar actuando sobre lo que detecta L¨®pez Abente sean demasiado d¨¦biles¡±, lamenta. ¡°La ingesta de vegetales y fruta fresca reduce el riesgo de c¨¢ncer de est¨®mago y no debe convertirse en un lujo. Las pol¨ªticas econ¨®micas no est¨¢n s¨®lo para los indicadores de los que nos hablan los ministros De Guindos y Montoro, tambi¨¦n para facilitar una alimentaci¨®n saludable¡±, opina Porta, catedr¨¢tico de Salud P¨²blica en el Instituto de Investigaciones M¨¦dicas del Hospital del Mar, en Barcelona.
El atlas desvela que, en los ¨²ltimos cinco a?os estudiados, el exceso de riesgo de morir por c¨¢ncer de pulm¨®n en las mujeres se ha centrado en las ciudades. Los autores apuntan a ¡°la sinergia entre la contaminaci¨®n del aire y fumar¡±. Porta hace un llamamiento a las autoridades a tomar medidas. ¡°Si vemos que en los centros urbanos aparece m¨¢s c¨¢ncer de pulm¨®n en mujeres, y sabemos que hay una interacci¨®n entre el tabaco y la poluci¨®n, la respuesta es actuar sobre el tabaco y la contaminaci¨®n atmosf¨¦rica, creando m¨¢s espacios peatonales y zonas verdes¡±, proclama.
"El c¨¢ncer no es una loter¨ªa"
¡°Estos datos nos recuerdan que necesitamos pol¨ªticas mucho m¨¢s vigorosas y que la sociedad deber¨ªa exigirlas. Estos mapas dejan claro que el c¨¢ncer no es una loter¨ªa. Los ciudadanos deber¨ªamos votar pensando en el rad¨®n, en las industrias contaminantes, en las emisiones de los coches¡±, zanja el epidemi¨®logo Miquel Porta.
El sexto y ¨²ltimo c¨¢ncer estudiado en el atlas es el colorrectal, causante de casi 225.000 muertes entre 1989 y 2008. Su distribuci¨®n geogr¨¢fica es relativamente homog¨¦nea, sin sorpresas, aunque Porta destaca como factor de riesgo la obesidad, vinculada adem¨¢s a personas con bajos ingresos econ¨®micos. ¡°Estamos fracasando en las pol¨ªticas contra la obesidad. Como con otros factores de riesgo, no se puede reducir todo a la ¨®ptica individual, a que cada uno se apa?e con sus vicios. El Ministerio de Sanidad deber¨ªa ser m¨¢s activo en monitorizar estos patrones geogr¨¢ficos y en incentivar pol¨ªticas¡±, sentencia.
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