Soluci¨®n para G¨¹rtel

El esc¨¢ndalo que se cern¨ªa sobre la posibilidad de que Pablo Ruz fuera apartado del caso G¨¹rtel se ha salvado con la pr¨®rroga de sus funciones en el Juzgado 5 de la Audiencia Nacional. Aunque la plaza sale a concurso junto con otras, Ruz seguir¨¢ en comisi¨®n de servicios hasta marzo. Esto le permitir¨¢ cerrar la pieza principal, pero no le dar¨¢ tiempo a terminar la investigaci¨®n de la presunta contabilidad B del PP (abierta a partir de los papeles de B¨¢rcenas)y otros asuntos de alto voltaje.

Para seguir m¨¢s all¨¢ de marzo de 2015, Ruz tendr¨ªa que ser juez de apoyo del futuro titular del Juzgado 5. Legalmente no le era posible mantenerse en comisi¨®n de servicios m¨¢s all¨¢ de junio, un plazo tambi¨¦n escaso para acabar lo que tiene entre manos. De ah¨ª la soluci¨®n votada por la comisi¨®n permanente del Poder Judicial, que preside Carlos Lesmes. Suscita dudas, puesto que el magistrado de apoyo es el que se ocupa de los casos nuevos, quedando los antiguos para el titular; pero la c¨²pula del Poder Judicial cree contar con argumentos para sostener que Ruz deber¨ªa terminar los sumarios empezados.

La oposici¨®n parlamentaria se muestra desconfiada y denuncia maniobras del PP. Sin entrar en estos vericuetos, hay que sentar el principio de que no se puede mantener la extrema politizaci¨®n que rodea todos los casos judiciales en los que hay partidos implicados. Las fuerzas pol¨ªticas tienen que aprender a tener menos peso directo en el ¨®rgano de gobierno de los jueces y a abandonar la tentaci¨®n de manejarlo.

Es cierto que un en¨¦simo cambio de magistrado en el caso G¨¹rtel arruinar¨ªa la credibilidad judicial. Y no puede ser m¨¢s evidente la necesidad de acabar de una vez con la tramitaci¨®n de este asunto y sus derivados, y hacerlo con la discreci¨®n y profesionalidad demostradas por Ruz. Aunque parezca fr¨¢gil la soluci¨®n encontrada para su continuidad, lo cierto es que le permitir¨¢ seguir con el caso.