Anuncios navide?os

Llega la Navidad y con ella los esperados anuncios navide?os. Todos los criticamos, pero a la vez estamos esperando cu¨¢l ser¨¢ el nuevo anuncio de la loter¨ªa o qui¨¦nes ser¨¢n las ¡°burbujitas¡± Freixenet de este a?o. Todas estas cosas son las que hacen la Navidad, hacen la fiesta, hacen la alegr¨ªa, el consumismo, la familia. Todos lo criticamos, pero a la vez nos sentimos atra¨ªdos por esa corriente. ?Qu¨¦ har¨ªamos si llega el d¨ªa 25 y no ha aparecido en la televisi¨®n el hijo que vuelve por Navidad a ver a la familia, o el cava que sigue siendo el mismo que el de a?o anterior con un vestido discretamente distinto? Echar¨ªamos de menos estos momentos. Pero este a?o, la crisis ha estado presente en los anuncios navide?os y me imagino que, bajo la presi¨®n de las risas que el a?o pasado causaron reconocidos cantantes del pa¨ªs, este a?o la loter¨ªa ha querido reflejar la situaci¨®n actual de muchas personas que tienen puesta la esperanza en la loter¨ªa. Por otro lado, la directa que Ikea ha dejado caer, poniendo en rid¨ªculo el consumismo abusivo con la representaci¨®n de un simple molde de galletas de un ni?o, muestra que cada vez m¨¢s la fiebre por las compras, ya sea por sentido com¨²n o por la crisis, est¨¢ disminuyendo.¡ª Cristina Luengo Aguilera.