Floriano

?Dice Mar¨ªa Dolores de Cospedal, secretaria general del Partido Popular, que la corrupci¨®n que puede haber en un partido la hay en la sociedad; o sea, que la sociedad es igual de corrupta que su estructura pol¨ªtica. Sin embargo, Mariano Rajoy, que es el jefe de todos los populares, dice que la sociedad espa?ola no es una sociedad corrupta.

Esto no lo arregla ni Carlos Floriano. Porque me parece que entre las dos afirmaciones existe una contradicci¨®n insalvable. Ser¨ªa bueno que desde el PP se nos hiciera llegar cu¨¢l de las dos ideas es la correcta. Yo, mientras tanto, no sabr¨¦ a qu¨¦ atenerme. No s¨¦ si escupirle a la cara al panadero sabiendo de antemano que me ha enga?ado en el peso o si tirar la botella de vino en medio del bar porque es seguro que el camarero le ha metido garraf¨®n. En esto s¨ª sigo a De Cospedal.

Si sigo a Rajoy, debo continuar comprando sellos en el F¨®rum Filat¨¦lico, pisos en Sofico, tricotosas en Matesa y ¨®peras en el Palau.

¡ª?Qu¨¦ hacer? Se preguntar¨ªa Lenin.

Y Floriano le contestar¨ªa:

¡ªAnalizar la situaci¨®n concreta.

Ya est¨¢ todo m¨¢s claro: no te puedes fiar de nadie por mucho que venga de parte de De Cospedal.

Ahora bien, como ciudadano me siento insultado en lo m¨¢s profundo de mi ser.

?Por qu¨¦ De Cospedal se atreve a decir que vivo en una comunidad tan miserable y emporcada como es su partido? ?Por qu¨¦ tengo que soportar que me comparen al presidente de mi comunidad de vecinos con Luis B¨¢rcenas o ?lvaro Lapuerta? Yo quiero vivir en paz alg¨²n minuto de mi vida sin tener la sospecha de que mi hijo o mi mujer me la est¨¢n pegando con la tarjeta de cr¨¦dito.

Floriano, de una vez, coge ese toro por los cuernos.

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