Un tercio de las v¨ªctimas de crisis humanitarias se queda sin ayuda
Los fondos internacionales para emergencias son mayores que nunca Espa?a aport¨® en 2013 unos 38 millones de euros, un 88% menos que en 2010
Rep¨²blica Centroafricana, Siria, Irak, Sud¨¢n del Sur, Sierra Leona, Filipinas, Liberia, Afganist¨¢n¡ Estos son algunos de los pa¨ªses que mayor protagonismo obtuvieron en los a?os 2013 y 2014, aunque no por razones positivas. Han sufrido y siguen sufriendo conflictos armados de dudosa soluci¨®n, como Siria o Sud¨¢n del Sur, epidemias de enfermedades muy virulentas como el ¨¦bola en ?frica occidental o desastres naturales como el tif¨®n Haiy¨¢n que asol¨® Filipinas en noviembre de 2013. En estos dos ¨²ltimos a?os, 78 millones de personas, seg¨²n Naciones Unidas, fueron v¨ªctimas de este tipo de cat¨¢strofes y, de todas ellas, un tercio nunca lleg¨® a recibir la ayuda que necesitaba, seg¨²n el informe La acci¨®n humanitaria en 2013-2014: Una respuesta tard¨ªa, elaborado por el Instituto de Estudios sobre conflictos y Acci¨®n Humanitaria (IECAH) en colaboraci¨®n con M¨¦dicos sin Fronteras.
La ayuda humanitaria alcanz¨® cifras r¨¦cord durante el a?o 2013: 22.000 millones de d¨®lares fueron destinados a fondos de emergencia, un 27% m¨¢s que en el a?o anterior y un 13% m¨¢s que en 2010, el a?o que hasta ahora ten¨ªa el r¨¦cord de desembolso porque en ¨¦l se produjeron desastres de grandes dimensiones, como el terremoto de Hait¨ª o las inundaciones de Pakist¨¢n. Y, sin embargo, miles de personas quedan desasistidas despu¨¦s de haber sido v¨ªctimas de una guerra, un terremoto o una hambruna. ?Por qu¨¦? "Las necesidades han crecido mucho en 2013 y 2014 e incluso los llamamientos de la ONU no se han cubierto del todo", ha explicado este mi¨¦rcoles en Madrid Francisco Rey, codirector del IECAH durante la presentaci¨®n del informe.
En este periodo, que acabar¨¢ con 50 millones de refugiados o desplazados, la mayor cifra desde la II Guerra Mundial, se han agravado crisis humanitarias existentes y han surgido otras nuevas, haciendo que se declararan de manera simult¨¢nea cinco emergencias de nivel tres, el m¨¢ximo nivel de gravedad que decretan las Naciones Unidas para las crisis humanitarias. Hablamos de cuatro conflictos armados en Siria, Rep¨²blica Centroafricana, Sud¨¢n del Sur e Irak y de la epidemia de ¨¦bola que afecta a Sierra Leona, Liberia y Guinea Conakri.
Los donantes priorizan unas crisis sobre otras en funci¨®n de preferencias institucionales. Y esto revierte en un reparto desigual de la ayuda?
Otra de las causas es la tardanza de la comunidad a la hora de responder a situaciones de emergencia (de ah¨ª el nombre del informe). "La tardanza cuesta vidas y el caso que mejor lo ejemplifica es la respuesta al ¨¦bola: la respuesta internacional ha sido muy timorata y en ese periodo ha habido muchas muertes", ha aseverado Rey en referencia a los cuatro meses que la comunidad internacional tard¨® en declarar la epidemia como una emergencia humanitaria.
La falta de voluntad pol¨ªtica en la resoluci¨®n de conflictos armados es otra de las razones. Los donantes eligen d¨®nde dirigir sus recursos; priorizan unas crisis sobre otras en funci¨®n de sus preferencias institucionales, y esto revierte en un reparto desigual de la ayuda que dejar¨¢ muchos olvidados por el camino. El informe critica la excesiva politizaci¨®n del Consejo de Seguridad de la ONU, donde se pone de relieve que la maquinaria humanitaria es ineficaz en conflictos tan politizados como los de Gaza o Ucrania. "2014 es el a?o en que nos damos de cara con un sistema internacional de ayuda al que le cuesta mucho ser efectivo en situaciones de enorme complejidad", ha lamentado Joan Tubau, director general de M¨¦dicos sin Fronteras en Espa?a. "El actual sistema no es capaz de reaccionar a la violencia de las guerras y no tiene capacidad de mediar pol¨ªticamente para mitigarlas".
En este contexto, Espa?a rompe la tendencia en el aumento de los fondos para acci¨®n humanitaria porque es uno de los pa¨ªses que la ha reducido. En 2013 se presupuestaron como gasto en acci¨®n humanitaria 38 millones de euros, un 88% menos que en 2010, cuando se consignaron 365 millones de euros. Tan solo entre 2013 y 2012 la ayuda se redujo un 47%. Esto supone que el porcentaje que a d¨ªa de hoy el Estado destina a las crisis humanitarias dentro de la partida de Ayuda Oficial al Desarrollo sea un 2,17% del total, una cantidad que no permitir¨ªa dar una respuesta "digna" ante una emergencia, seg¨²n el informe. "No parece muy l¨®gico que un pa¨ªs que adem¨¢s forma parte del Consejo de Seguridad de la ONU recorte tanto su aportaci¨®n", ha criticado Rey. Para ¨¦l, el problema no est¨¢ solo en la falta de fondos sino de voluntad: "El Programa Mundial de Alimentos pidi¨® a Espa?a utilizar la base a¨¦rea de Canarias para gestionar la crisis del ¨¦bola. El Gobierno tard¨® meses en contestar y lo hizo al final negativamente".
Como hitos relevantes dentro de la cooperaci¨®n espa?ola, destaca el papel de las comunidades aut¨®nomas, cuya aportaci¨®n ha supuesto un 25% del total. Las tres que m¨¢s fondos contabilizaron en 2013 fueron Andaluc¨ªa con cinco millones de euros, Extremadura con 1.142.000 y Pa¨ªs Vasco con 800.000, cantidades "muy relevantes", seg¨²n el documento. Para el a?o 2015, sin embargo, las previsiones no son muy alentadoras porque los presupuestos generales prev¨¦n una partida similar a la del periodo anterior. "El ¨²ltimo borrador presupuesta 45 millones para 2015, nos parece una cifra muy corta para la magnitud de las crisis de la que estamos hablando", ha aseverado Rey, quien considera que el porcentaje de fondos destinados a ayuda humanitaria deber¨ªa aumentar hasta llegar a los recomendados por los donantes internacionales, es decir, entre el 7 y 10% de toda la ayuda al desarrollo.
Ejemplos que sacan los colores
La epidemia de ¨¦bola en ?frica occidental y la guerra civil en Siria han sido dos de los casos m¨¢s sonrojantes a la hora de constatar las limitaciones del sistema internacional para abordar la prevenci¨®n y la asistencia humanitaria. La tardanza a la hora de responder ante los contagios por ¨¦bola en Liberia, Sierra Leona y Guinea han ocasionado miles de muertes que pod¨ªan haberse evitado y tambi¨¦n han contribuido a la propagaci¨®n de la enfermedad, que a¨²n est¨¢ lejos de ser erradicada. M¨¦dicos sin Fronteras, que ha atendido a 4.000 enfermos y mantiene sobre el terreno a 3.100 trabajadores m¨¦dicos de la regi¨®n y a otros 300 provenientes de otros pa¨ªses, ha denunciado este mi¨¦rcoles, una vez m¨¢s, que la ayuda ha llegado muy tarde y no de forma correcta. "Cuando la respuesta lleg¨® se centr¨® en crear camas. Lo que hace falta a d¨ªa de hoy es ayudar a reabrir los hospitales, m¨¢s m¨¦dicos y enfermeros, y recursos para poder ocuparse de los centros sanitarios", ha denunciado Joan Tubau, director general de la organizaci¨®n humanitaria en Espa?a.
En el caso de Siria, M¨¦dicos sin Fronteras ha descrito un panorama desolador en un pa¨ªs cada vez m¨¢s alejado de encontrar una soluci¨®n pac¨ªfica y negociada, y donde la organizaci¨®n est¨¢ encontrando muchos problemas para implantarse debido a los secuestros, los atentados, los asesinatos indiscriminados y la violencia generalizada. "2014 deja 200.000 nuevos muertos y el mayor n¨²mero de desplazados y refugiados desde la crisis de Ruanda y los Grandes Lagos, hace 20 a?os", ha aseverado Tubau. El director de MSF ha llamado la atenci¨®n sobre el empeoramiento de la situaci¨®n de la poblaci¨®n civil, especialmente mujeres y ni?os menores de cinco a?os, que han vivido este a?o el surgimiento de un nuevo actor militar, el Estado Isl¨¢mico de Siria e Irak, que ejerce unos niveles de violencia extraordinarios hacia las minor¨ªas no musulmanas y chi¨ªes mientras la comunidad internacional sigue decidiendo c¨®mo posicionarse en el conflicto. "Hasta hace un a?o se trataba de ver si uno estaba del lado de la oposici¨®n o del Gobierno de El Asad, que significaba estar un bloque m¨¢s ruso o m¨¢s occidental. En los ¨²ltimos meses, la convergencia de una guerra entre facciones chiitas y sunitas del islam ha hecho que la situaci¨®n se haga mucho m¨¢s compleja", ha lamentado.
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