Sin br¨²jula
En el horizonte parpadea un intermitente a merced del que crea que los deseos se cumplir¨¢n por el mero hecho de haberlos so?ado. Feliz 2015
La cultura moderna consiste en que las agujas magn¨¦ticas de todas las br¨²julas se han vuelto locas y se?alan en todas las direcciones al gusto de cualquier explorador, que se haya extraviado en la propia niebla. Perdidos en la ciudad todos los sem¨¢foros est¨¢n en intermitente y ese parpadeo amarillo da paso franco al primero que aporte un sue?o loco o divertido, como el que impone a la brava en un cruce el morro del coche. El sem¨¢foro rojo marcaba antes la libertad de los otros, pero hoy la gente se siente m¨¢s libre en medio del atasco y cree tener derecho a ir en sentido contrario si le apetece. En las encrucijadas de la ciudad algunos prohombres benefactores de la humanidad est¨¢n en los pedestales con el brazo de bronce extendido en el aire se?alando a una determinada direcci¨®n. Pueden ser conquistadores a caballo, h¨¦roes revolucionarios, que hasta ahora han dirigido el tr¨¢fico de la historia con mucha autoridad. Marx, Lenin, Stalin y otros visionarios exhib¨ªan un dedo autoritario hacia el futuro que estaba enfrente. Hace mucho que sus pedestales fueron derribados. En cambio, las estatuas de artistas, literatos, cient¨ªficos y pol¨ªticos liberales suelen tener un libro en la mano izquierda y con la derecha levemente separada del cuerpo apuntan hacia el suelo, y all¨ª donde parec¨ªa haberles ca¨ªdo una moneda de oro, hoy solo se?alan una mierda de perro. Ya no existen agujas que indiquen el Norte, ni maestros que marquen con el dedo una ense?anza ni revolucionarios que gu¨ªen con el brazo de bronce nuestro destino. En el Shangh¨¢i de Mao ha habido decenas de muertos en una estampida que produjo el delirio de una lluvia publicitaria de dinero falso. En el horizonte parpadea un intermitente a merced del que crea que los deseos se cumplir¨¢n por el mero hecho de haberlos so?ado. Feliz 2015.
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