Exilio dorado para las primeras damas ¨¢rabes

Detr¨¢s de un dictador ¨¢rabe se esconde siempre una mujer rica, o dos. Y cuando el hombre cae, ellas no lo hacen necesariamente. El pasado mes de noviembre, las im¨¢genes de una veintea?era luciendo un largo vestido rosa revolucionaban la red. La joven aparec¨ªa celebrando por todo lo alto, como a las ¨¢rabes de clase alta les gusta hacer, su fiesta de compromiso. Las instant¨¢neas hubieran pasado desapercibidas si no fuera porque se trataba de Banin Hussein, nieta del depuesto presidente iraqu¨ª Sadam Hussein. La joven celebr¨® el matrimonio en la capital jordana, donde vive exiliada desde que su padre fuera ahorcado en Bagdad en 2006.

De los cinco hijos que Sadam tuvo con su segunda esposa Sayida, quedan tres hijas. La m¨¢s joven, Hala vive con su madre en Qatar, mientras que Rana y Raghad disfrutan de una c¨®moda vida en su exilio en Am¨¢n. Nadie sabe cu¨¢nto de la fortuna de Hussein ¡ªestimada en 8.000 millones de euros¡ª habr¨¢ logrado llevarse la viuda. El diario brit¨¢nico The Telegraph entrevistaba a Raghad en su villa donde reside a costes pagados por los jordanos. En los gastos se incluye el equipo de militares que velan por su seguridad y que le acompa?an en misiones de compras, al gimnasio o incluso a esos retoques quir¨²rgicos que se ha hecho para combatir el tiempo. En el comedor de su casa, retratos del difunto Sadam Hussein dan un extra?o toque al hogar. Fue el hombre de hierro quien dej¨® a sus hijas Raghad y Rana viudas, y a ocho de sus nietos hu¨¦rfanos de padre al ejecutar a dos yernos por espiar para los servicios de inteligencia extranjeros.

Tras Sadam cayeron m¨¢s aut¨®cratas, esta vez durante las revueltas populares de la primavera ¨¢rabe de 2011. Las primeras damas de los l¨ªderes depuestos nunca olvidaran la cara del joven vendedor ambulante tunecino, Mohamed Bouazizi, que a sus 27 a?os se inmol¨® hastiado de las injusticias de un sistema corrupto. Su muerte desat¨® una ola de protestas que termin¨® por expulsar de sus palacios a las mujeres que vivieron a la sombra de Zine el Abidine Ben Al¨ª, Hosni Mubarak y Muammar Gadafi. La inmolaci¨®n de Mohamed Bouazizi las desterr¨® al tiempo que expuso ante el mundo las cleptocracias de aquellas que un d¨ªa protagonizaron las portadas de los diarios nacionales, como defensoras de los derechos de la mujer. Pero, ?d¨®nde fue a parar la familia de estos dictadores?

Suzanne Mubarak entreg¨® el palacio de Uruba a cambio de su libertad

El 14 de enero de 2011, diez d¨ªas despu¨¦s de que Bouazizi muriera, Leila Ben Al¨ª, esposa de Zine el Abidine Ben Al¨ª, se dirigi¨® al Banco Central para retirar 1,5 toneladas de lingotes de oro, valorados en 50 millones de euros. Antes de subirse al jet privado y volar rumbo a Arabia Saud¨ª, dejando tras de s¨ª 23 a?os de poder, meti¨® en su maleta sus valiosas joyas. Inicialmente, el jet vol¨® rumb¨® a Par¨ªs, donde Leila seguramente hubiera preferido comenzar su vida cerca de las tiendas de alta costura francesa como Dior donde compr¨® un abrigo por 30.000 euros. Pero el entonces presidente Sarkozi les encomi¨® a desviar el rumbo hacia tierras menos hostiles. Leila aterriz¨® en Jeddah donde, esta peluquera convertida en reina tiene que llevar el cabello cubierto por ley. Fue precisamente su marido quien prohibi¨® el uso del pa?uelo a las tunecinas. Destronada, prosigue con su vida lejos de los medios aunque de vez en cuando sale de compras a los lujosos centros comerciales de Dubai. En su autobiograf¨ªa Mi Verdad, niega haber robado. Algo de lo que discrepa la Agencia de Naciones Unidas para la recuperaci¨®n de activos robados que en 2013 congel¨® sus cuentas en L¨ªbano y devolvi¨® al gobierno tunecino un cheque de 24 millones de euros. A sus 57 a?os ha logrado escapar a una condenada in absentia de 35 a?os de c¨¢rcel. A pesar de las repetidas demandas de extradici¨®n, el reino Saud¨ª se ha negado a entregarla.

El mismo mes de noviembre se daba a conocer que un juzgado absolv¨ªa al depuesto presidente egipcio Hosni Mubarak de los cargos de asesinato de 850 personas durante las protestas de 2011. Lo cierto es que su mujer Suzanne, conocida como la hanim (se?ora en ¨¢rabe), solo cumpli¨® cuatro d¨ªas entre rejas de una condena por malversaci¨®n. Suzanne aprovech¨® para escribir sus memorias: La primera Dama de Egipto: 30 a?os en el trono.

¡°La se?ora Mubarak lleva viviendo en el mismo palacio presidencial del barrio de Heli¨®polis en Cairo, el Palacio Uruba, todo este tiempo. No se ha hecho ning¨²n cargo contra ella, ni ha aparecido p¨²blicamente desde entonces¡±, afirma en una entrevista v¨ªa correo electr¨®nico el investigador Hossam Bahgat y autor del reportaje Las mansiones de los Mubarak. El periodista asegura que la hanim hab¨ªa comprado ilegalmente y a precio irrisorio el palacio Uruba que devolvi¨® al r¨¦gimen post revolucionario a cambio de ser exonerada de sus penas. Menos suerte tuvo en Espa?a. En 2012, el Gobierno espa?ol confisc¨® a los Mubarak 28 millones de euros.

El 20 de octubre de 2011, un cuarto dictador, el m¨¢s extravagante de todos, fallec¨ªa a manos de la multitud que le apres¨®. Presidente de Libia durante 42 a?os, Muammar Gadafi dej¨® ocho hijos. El mayor, Mohamed, de su primera mujer Fatiha al Nuri. Su segunda esposa, Safia Gadafi de 62 a?os, le dio siete hijos de los cuales tres fallecieron en combate, uno sigue preso en Libia, otro en arresto domiciliario en N¨ªger y dos junto a ella.

Safia Gadafi tiene su propia compa?¨ªa a¨¦rea y una fortuna de 25.000 millones

En mayo del mismo a?o, la cadena CNN recib¨ªa una llamada de la viuda. ¡°Mis hijos son civiles y han sido objetivos de los ataques. Viviremos o moriremos junto al pueblo libio. Al final la historia nos juzgar¨¢¡±, espetaba al tel¨¦fono. Poco despu¨¦s, abandon¨® su pa¨ªs y atraves¨® el desierto junto a su hijastro Mohamed y sus hijos Anibal y Aisha hasta llegar a Argelia. Los cuatro est¨¢n buscados por Interpol. Nada m¨¢s llegar obtuvo asilo pol¨ªtico tras hacer una parada para que su ¨²nica hija Aisha diera a luz.

A los dos a?os, los fugitivos Gadafi viajaron a Om¨¢n. All¨ª disfrutan de asilo pol¨ªtico con todos los gastos pagados y pasaportes diplom¨¢ticos para poder desplazarse con toda tranquilidad. Durante su vida en palacio, Safia rehuy¨® la pol¨ªtica, pero cre¨® su propia compa?¨ªa a¨¦rea Buraq Air benefici¨¢ndose de las concesiones del r¨¦gimen. La fortuna personal de la viuda se estima en 25.000 millones de euros. Nunca sabremos cu¨¢ntos de esos millones logr¨® llevarse la viuda libia, o de cu¨¢ntos disfrutan sus homologas exiliadas en su precipitada jubilaci¨®n.