Una millonaria rodeada de lobos

Los ¨²ltimos a?os de Liliane Bettencourt, cuya historia un tribunal de Burdeos va a rememorar en detalle durante cinco semanas, tiene todas las trazas de ser un relato vergonzante. La poseedora de un 30% de las acciones del imperio L'Or¨¦al y, en consecuencia, una de las mujeres m¨¢s ricas del mundo, fue v¨ªctima, presumiblemente, de al menos una decena de aprovechados que, vali¨¦ndose de su senilidad y su Alzheimer, desviaron millones de euros a sus propios bolsillos. El juicio iniciado este lunes en Burdeos ha comenzado con una sorpresa muy en l¨ªnea con los ribetes de follet¨ªn de esta historia: el intento de suicidio del enfermero de la millonaria. Alain Thurin, de 64 a?os, intent¨® ahorcarse este domingo antes de comparecer ante el tribunal que le acusa de haberse gestionado una pensi¨®n suplementaria de 1.600 euros mensuales, m¨¢s una herencia de diez millones consignada en el testamento de la anciana. Thurin se debate ahora en un hospital entre la vida y la muerte.

El choque emocional ha sido importante en la sala donde se ha iniciado el juicio. ¡°Ha sido muy triste conocer lo sucedido a una persona que trabaj¨® tantos a?os para Bettencourt¡±, ha dicho el abogado de la millonaria Benoit Ducos-Ader a la salida de la sala de vistas. Para que no falte ning¨²n ingrediente, este lunes se ha a?adido el de la espera para desvelar toda la trama: los jueces han suspendido el proceso ante la consulta de constitucionalidad presentada por dos de los acusados.

Pero si este caso tiene una dimensi¨®n extraordinaria se debe a la presunta implicaci¨®n de Nicolas Sarkozy. El esc¨¢ndalo fue el primero que persigui¨® al exjefe del Estado dos meses despu¨¦s de ser desalojado del El¨ªseo, en mayo de 2012. La justicia investig¨® a Sarkozy por considerar que tambi¨¦n ¨¦l hab¨ªa detra¨ªdo dinero de la fortuna de los Bettencourt para financiar ilegalmente su campa?a electoral de 2007. La casa de los Bettencourt era habitualmente frecuentada por pol¨ªticos de alto nivel y Sarkozy fue uno de ellos, pero las indagaciones, registro del domicilio del exmandatario incluido, no corroboraron tales sospechas. En su lugar, uno de los diez imputados que tiene que testificar en Burdeos es su ministro de Presupuestos y Trabajo y tesorero del partido, la UMP, en la ¨¦poca ?ric Woerth.

Los dos principales actores de este drama, Sarkozy y Liliane Bettencourt, ser¨¢n, por tanto, los dos grandes ausentes del proceso. ?l estaba este lunes en Berl¨ªn visitando a Angela Merkel, libre de este asunto, aunque no de otros esc¨¢ndalos de corrupci¨®n que le persiguen. Ella, con 92 a?os cumplidos, est¨¢ inhabilitada por orden judicial desde finales de 2011. Su hija, Fran?oise, y sus dos nietos, Nicolas y Jean Victor, son los detentadores y gestores de la fortuna. El mayordomo y la contable de la familia son los dos testigos de cargo, los ¨²nicos que parecieron estar dispuestos a desactivar el enjambre de par¨¢sitos desalmados que rodearon a la millonaria a medida que esta perd¨ªa la raz¨®n y la capacidad de discernimiento.

Ante el tribunal de Burdeos desfilar¨¢n los diez acusados, entre los que destacan por su aparente avaricia el fot¨®grafo Fran?ois-Marie Banier, un seductor y embaucador que arranc¨® a la millonaria un seguro de vida por valor de 262 millones de euros, Patrice de Maistre, su administrador, que ganaba 800.000 euros al a?o y logr¨® una donaci¨®n de 12 millones, y St¨¦phane Courbit, un empresario que convenci¨® a la vieja dama de invertir 143 millones en su grupo. Juristas, abogados y notarios completan la decena de acusados; algunos de ellos, simplemente, por dejar hacer a los cuervos.

El fiscal de Burdeos ha pedido que se deje fuera del proceso a ?ric Woerth, pero este tiene otro caso abierto en Par¨ªs por tr¨¢fico de influencias, de modo que la madeja seguir¨¢ deshaci¨¦ndose m¨¢s all¨¢ de las cinco semanas que dure la vista oral ahora abierta. Los jueces dirimen ahora si la consulta de constitucionalidad planteada por Banier y De Maistre permite continuar el juicio este martes u obliga a retrasarlo un poco m¨¢s.