?A qui¨¦n rinden cuentas las ONG?
Esta entrada ha sido escrita por Cristina Niell (@cniell).
Algunos podr¨ªan pensar que un donativo es un cheque en blanco con el que las ONG hacen lo que quieren sin necesidad de dar explicaciones. No es as¨ª, desde el pasado diciembre, la Ley de transparencia, acceso a la informaci¨®n p¨²blica y buen gobierno tambi¨¦n obliga a las ONG a rendir cuentas de los recursos que gestionan y de c¨®mo los gestionan. Pero esta, para las ONG, es una vieja batalla que desde su creaci¨®n siempre han librado contra las voces que dice: ?Vete a saber qu¨¦ hacen con el dinero? ?Por qu¨¦ mejor no piden comida en lugar de dinero? ?Los donativos sirven para mantener a la propia organizaci¨®n y emplear a un sinf¨ªn de personas? Una batalla contra la desconfianza y el escepticismo que busca poner a las ONG bajo sospecha.
Lo cierto es que la ONG rendimos cuentas, y lo hacemos delante de aquellas instituciones, empresas u organizaciones que aportan importantes recursos. ?Qui¨¦n puede pensar que las administraciones no nos exigen saber c¨®mo hemos gastado el dinero p¨²blico? ?O que las empresas que apoyan nuestros programas no quieren obtener resultados? Y tambi¨¦n rendimos cuentas delante de aquellas personas que han contribuido con sus donativos. A ellos van dirigidas las memorias, los informes de resultados, los res¨²menes de actividad, las historias de personas que han recibido las aportaciones¡ que todas las ONG elaboramos. Adem¨¢s, como entidades registradas, ya sea como asociaciones o fundaciones, debemos presentar anualmente nuestras cuentas auditadas ante estos registros administrativos.
Las ONG dedicadas al desarrollo, arropadas bajo el paraguas de la Coordinadora de ONG para el Desarrollo Espa?a (CONGDE) preocupadas por nuestra propia credibilidad, por ofrecer una informaci¨®n clara y precisa para luchar contra esta desconfianza avanzamos hacia la creaci¨®n de nuestra propia herramienta: http://webtransparencia.coordinadoraongd.org/. Con ella, las m¨¢s de 500 ONGD (que representamos a 2,5 millones de personas, nuestros socios y colaboradores) hemos querido autoevaluarnos y mostrar que difundimos informaci¨®n de nuestras cuentas pero tambi¨¦n de nuestra estructura y funcionamiento, del trabajo que realizamos y de los resultados que obtenemos. Y, en paralelo a la herramienta impulsada por la CONGDE, 223 organizaciones tambi¨¦n aceptamos y nos sometemos a la supervisi¨®n de la Fundaci¨®n Lealtad. En su p¨¢gina web, creada con el objetivo de aumentar la confianza en el sector y el incremento de las donaciones, se puede encontrar informaci¨®n sobre las buenas pr¨¢cticas de las ONG.
Pero, ?hay fraude, estafa o tr¨¢fico de influencias en las ONG? Haberlo, lo hay, como en cualquier administraci¨®n, empresa o asociaci¨®n. Trabajar en pa¨ªses donde no es f¨¢cil conseguir facturas o donde tenemos que manejar hasta tres y cuatro tipos de moneda, facilita la estafa. Y lo propicia el hecho de que en muchos de los pa¨ªses d¨®nde trabajamos tampoco hay pol¨ªticas de control de fraude ni se ha creado una cultura s¨®lida de rechazo a estas pr¨¢cticas. Pero, lo realmente importante es que somos conscientes de esta situaci¨®n y actuamos para prevenirla y para castigarla cuando se produce. Y as¨ª muchas ONG ya contamos con C¨®digos de comportamiento y nos sometemos a nuestros controles de auditor¨ªa interna.
Las ONG no somos perfectas y nuestro mundo tambi¨¦n est¨¢ cambiando. La pobreza end¨¦mica no es solo una realidad en los pa¨ªses del Sur y hoy llevan a cabo tareas de cooperaci¨®n otros actores, como las empresas que directamente realizan programas de cooperaci¨®n. Pero, en todo este entorno cambiante, si podemos decir que llevamos a?os preocupadas por la necesidad de ser claras y transparentes en nuestra gesti¨®n, por exigirnos a nosotras mismas aquellos que exigimos a la sociedad (empresas, gobiernos¡). Hoy nos obliga a rendir cuentas la ley, pero antes que la ley nos obligaban a ser transparentes nuestra ¨¦tica y nuestros valores.
Foto: Portada de la memoria 2014 de Oxfam Interm¨®n.
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