Respeto a los ciudadanos
Rita Barber¨¢ ha despertado una mezcla de ira e hilaridad entre sus convecinos
Si algo se les debe exigir a los pol¨ªticos es el respeto a los ciudadanos a los que representa. Igual da que sea el presidente del Gobierno o un concejal del municipio m¨¢s remoto. Por eso resulta bochornoso el espect¨¢culo que ofreci¨® el domingo la alcaldesa de Valencia, Rita Barber¨¢, durante su participaci¨®n en el preg¨®n que anunciaba el inicio de las fiestas de las fallas.
Desde de lo alto de las Torres de Serranos ¡ªuna de las puertas que custodiaban la antigua muralla cristiana de la ciudad¡ª, la regidora despert¨® una mezcla de ira e hilaridad entre sus convecinos. Barber¨¢ sorprendi¨® con un discurso desordenado e incoherente, del que sali¨® a duras penas chapurreando lo que se podr¨ªa llamar valen-llano, un confuso c¨®ctel de valenciano y castellano.
Como si quisiera emular a su hom¨®loga madrile?a, Ana Botella, aquel memorable ¡°a relaxing cup of caf¨¦ con leche in Plaza Mayor¡±, Barber¨¢ invent¨® expresiones (dijo, por ejemplo, el caloret en lugar de la caloreta o escalforeta, y la lleg¨¢ en vez de l¡¯arribada) que causaron mofa y desconcierto entre los asistentes.
Adem¨¢s de correcci¨®n en las formas, a un pol¨ªtico se le podr¨ªa exigir tambi¨¦n que hable con precisi¨®n la lengua cooficial de la ciudad a la que representa. Y aunque Barber¨¢ lleve empu?ando el bast¨®n de mando de la tercera capital m¨¢s poblada de Espa?a la friolera de 24 a?os, es probable que no tenga don de lenguas y que se le haya atragantado el valenciano tanto como una mala comida.
En su favor hay que decir que la regidora fue diligente a la hora de pedir disculpas a sus vecinos, consciente del atropello ling¨¹¨ªstico y del rid¨ªculo pol¨ªtico cometidos. ¡°Me siento profundamente disgustada¡±, ha dicho. Pese a que no es una novata sino que acumula una larga trayectoria pol¨ªtica, se ha justificado diciendo que se qued¨® en blanco y que los nervios la traicionaron.
La oposici¨®n no ha perdido un minuto en acusar a la alcaldesa de destrozar una parte importante de la cultura propia y censurar su ¡°gran irresponsabilidad¡±. Y todo ello ¡°en un acto tremendamente importante para el mundo fallero y valenciano¡±, como la atribulada alcaldesa ha reconocido.
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