Susana D¨ªaz en cabeza
Andaluc¨ªa anticipa la complejidad del tablero electoral espa?ol, con un PSOE m¨¢s destacado
El liderazgo de Susana D¨ªaz saldr¨¢ reforzado de las elecciones andaluzas del pr¨®ximo domingo si la candidata del PSOE logra mantener la ventaja sobre sus oponentes que muestra el sondeo de Metroscopia publicado hoy por EL PA?S. Su hegemon¨ªa pol¨ªtica ser¨¢ mayor que la actual, aunque logre menos sufragios y diputados que los obtenidos por los socialistas en 2012. No obstante, necesitar¨¢ un acuerdo para gobernar, sin el cual la inestabilidad estar¨¢ garantizada. Es descartable que sus competidores, desde el PP hasta Podemos, se pongan de acuerdo para impedir la continuidad de la presidencia de la Junta; pero no se pueden aprobar los Presupuestos ni gestionar otros muchos asuntos desde una situaci¨®n de Gobierno en minor¨ªa.
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La probable victoria del PSOE andaluz, cualquiera que sea su dimensi¨®n, no implica el salto inmediato de la presidenta andaluza a la pol¨ªtica espa?ola. Eso es lo que asegura la candidata: ¡°Aspiro a ser presidenta de Andaluc¨ªa, lo dem¨¢s me da igual¡±, dijo ayer, un d¨ªa despu¨¦s de recibir ¡ªpor primera vez en la campa?a¡ª el respaldo del secretario general del PSOE, S¨¢nchez. Ambos parecen haber acordado, despu¨¦s de las tensiones de hace semanas, que el objetivo prioritario pasa por recuperar para el PSOE el rango de primer partido andaluz, en un momento de fuerte empuje de las nuevas opciones (Podemos, Ciudadanos) y en pleno desgaste del Partido Popular.
El despliegue de cargos populares en Andaluc¨ªa y la intensa participaci¨®n de Mariano Rajoy en la campa?a tratan de despertar el voto oculto, en el que conf¨ªan, y apelar al voto ¨²til para recuperar a los electores tentados de fugarse a otras formaciones, fundamentalmente a Ciudadanos.
Hay margen, puesto que, a una semana de la cita con las urnas, m¨¢s de un 20% de los electores aseguran no haber decidido a¨²n su voto. Pero el PP no para de cometer errores, como el protagonizado por el delegado del Gobierno en esta comunidad, Antonio Sanz, que roz¨® la xenofobia al decir que no le gusta que se mande a Andaluc¨ªa ¡°desde Catalu?a¡± ni que su futuro lo decida ¡°un pol¨ªtico que se llama Albert¡± (Rivera). Disculparse con un tuit, como ha hecho Sanz, es insuficiente como procedimiento y confuso respecto a lo que pretende: ?respeto a Catalu?a, pero no al partido Ciudadanos ni a su dirigente, que nacieron en Catalu?a? El propio Rivera dej¨® ayer en evidencia desde C¨¢diz la pobreza argumental utilizada en su contra: ¡°No comprenden una Espa?a unida y diversa¡±.
En todo caso, el tablero pol¨ªtico se acerca a una situaci¨®n parad¨®jica. Andaluc¨ªa anticipa la mayor complejidad de Espa?a tras los a?os de crisis econ¨®mica y pol¨ªtica, con la ¨²nica diferencia de que esta comunidad cuenta con un partido de referencia (el PSOE, en este caso) en posici¨®n m¨¢s destacada de lo que lo est¨¢ cualquiera de los competidores en los sondeos sobre el tablero nacional.
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