El eclipse que recorrer¨¢ Europa

El viernes 20, poco despu¨¦s de las nueve de la ma?ana en la pen¨ªnsula Ib¨¦rica, y si el tiempo lo permite ¡ªsi est¨¢ nublado, siempre queda Internet¡ª, empezar¨¢ un espect¨¢culo celeste de primer orden que ser¨¢ visible desde toda Europa. La luna nueva cruzar¨¢ por delante del Sol ocultando poco a poco el disco de la estrella: un eclipse solar. Unos miles de personas en dos archipi¨¦lagos del Atl¨¢ntico Norte (las islas Feroe y las Svalbard) tendr¨¢n el privilegio de ver el Sol negro, la estrella completamente tapada por la Luna y su luz asomando blanquecina por los bordes, durante casi tres minutos en la mejor posici¨®n. Pero ser¨¢n millones los que, en toda Europa, Norte de ?frica, Oeste y Norte de Asia y Oriente Pr¨®ximo (y en Am¨¦rica solo en un extremo de Terranova), tendr¨¢n la oportunidad de presenciar un eclipse parcial, con la estrella del Sistema Solar m¨¢s o menos tapada por el sat¨¦lite natural de la Tierra. En el continente no se observar¨¢ otro hasta 2026.

En esta ocasi¨®n, la ocultaci¨®n total del Sol, que comenzar¨¢ al sur de Groenlandia y terminar¨¢ casi en el Polo Norte recorriendo una franja sobre la superficie terrestre de 462 kil¨®metros de ancho, acumula varias coincidencias, con la estrella en su m¨¢ximo de actividad en el ciclo de 11 a?os. ¡°La morfolog¨ªa de la corona [solar] ser¨¢ sim¨¦trica, similar a la observada, por ejemplo, en el eclipse de Australia de 2012, y muy distinta de la del de Siberia de 2008, cuando el Sol se encontraba en un m¨ªnimo de actividad y la corona presentaba una asimetr¨ªa muy acentuada¡±, explic¨®, desde las Feroe, Miquel Serra-Ricart, investigador del Instituto de Astrof¨ªsica de Canarias y veterano cazador de eclipses.

Adem¨¢s, la ocultaci¨®n empieza 15 horas antes del equinocio de marzo que marca el inicio de la primavera astron¨®mica en el hemisferio Norte, ¡°con alta probabilidad de formaci¨®n de auroras boreales¡±, a?ad¨ªa Serra-Ricart, con la esperanza de captar la imagen ins¨®lita del Sol negro y esas espectaculares luminiscencias del cielo. Precisamente en los d¨ªas pasados se ha registrado una intensa actividad geomagn¨¦tica que ha permitido ver auroras incluso en latitudes m¨¢s bajas, como las de Escocia o el norte de EE UU.

Y el jueves, un d¨ªa antes de la ocultaci¨®n solar, la Luna esta, en su ¨®rbita, en uno de los puntos m¨¢s cercanos a la Tierra este a?o, aproxim¨¢ndose hasta 357.583 kil¨®metros del planeta (cuando el eclipse se produce con la luna nueva alejada, es anular y, se ve la circunferencia oscura con un anillo de Sol radiante alrededor).

Se produce un eclipse Solar cuando se cruza la Luna entre la estrella y la Tierra proyectando su sombra sobre una franja del planeta. Como, desde la superficie terrestre, el Sol y La luna tienen casi el mismo tama?o aparente en el cielo (la segunda es mucho m¨¢s peque?a pero est¨¢ mucho m¨¢s cerca), los discos de una y otro se ven solapados casi exactamente en el caso de elipse total. Eso es lo que ver¨¢n en las Feroe y en las islas ¨¢rticas de Svalbard, mientras que incluso a miles de kil¨®metros de la franja de totalidad, se podr¨¢ ver un trozo de la Luna cubriendo una parte del Sol. El viernes, la m¨¢xima duraci¨®n de la totalidad se ver¨¢ al norte de las Feroe, donde, en un barco que cuente con la buena suerte del cielo despejado, se observar¨¢ el Sol cubierto por completo durante dos minutos y 47 segundos.

El eclipse arranca alrededor de una hora antes de alcanzar la totalidad. En la pen¨ªnsula Ib¨¦rica, cuanto m¨¢s al norte, m¨¢s Sol se ver¨¢ cubierto por la Luna: en A Coru?a, un 76%, en Madrid, casi el 67% y en Barcelona, el 64%, (seg¨²n informa el Museo Nacional de Ciencia y Tecnolog¨ªa, que invita a todos los aficionados a observar el fen¨®meno desde su sede de Alcobendas, en Madrid). En Londres el 87% del Sol se tapar¨¢, y en Escocia, el norte de Suecia, de Noruega y de Finlandia, el 97%.

A las 9.04, hora peninsular espa?ola, visto desde Madrid, el disco oscuro de la luna nueva empezar¨¢ a morder el disco solar, informa el Planetario de Madrid, que organiza la observaci¨®n del eclipse (junto la Obra Social la Caixa) en sus instalaciones. El disco lunar ir¨¢ ¡°avanzando desde el borde superior derecho del Sol, ocultando, seg¨²n pasan los minutos, una mayor cantidad del disco solar¡±, adelantan los expertos. ¡°A las 10.08, acontecer¨¢ el m¨¢ximo, instante en el que el ¨¢rea que nuestro sat¨¦lite ocultar¨¢ del disco del Sol ser¨¢ del 66,5%¡±.

Para quienes presencien la ocultaci¨®n total en el Atl¨¢ntico Norte ser¨¢ un espect¨¢culo extra?o, con el Sol tapado por la Luna justo cuando terminan los meses de invierno en los que la estrella casi no se ha paseado por el cielo. En las Feroe, la estrella se elevar¨¢ 18 grados sobre el horizonte, y en Svalbard, menos a¨²n: 12 grados (la altura del pu?o cerrado que uno proyecta hacia el cielo). Un observador situado justo en el Polo Norte, ver¨ªa el Sol negro rozando la l¨ªnea de cielo y mar.

Los expertos no se cansan de repetir que all¨¢ donde las nubes no impidan el espect¨¢culo, cualquier observador del eclipse, parcial o total, deben utilizar gafas especiales para evitar el riesgo de sufrir da?os graves en los ojos y que no valen todos los recursos caseros que se pasan de boca en boca, como pel¨ªcula fotogr¨¢fica, gafas de sol o un CD, todas ellas protecciones insuficientes.

Para mayor seguridad, los interesados pueden acudir a alguna de las muchas observaciones abiertas al p¨²blico organizadas por centros cient¨ªficos, museos, planetarios y asociaciones astron¨®micas. Hay que contar con que la meteorolog¨ªa no es favorable para ver un eclipse en Europa en esta ¨¦poca del a?o, por lo que igual hay que recurrir a la transmisi¨®n del fen¨®meno desde lugares como aviones, ya sea por Internet o en los centros de divulgaci¨®n cient¨ªfica.

Es muy probable que tampoco acompa?e la meteorolog¨ªa en las Feroe (no se ve un eclipse all¨ª desde 1612) ni en las Svalbard. Pero para evitar el cielo nublado algunos privilegiados se han apuntado a la alternativa de los vuelos ch¨¢rter organizados para la ocasi¨®n, que pueden gozar de cielo despejado para tomar y transmitir las im¨¢genes del Sol eclipsado.

Sat¨¦lites alerta

Tres minisat¨¦lites de la serie Proba, de la Agencia Europea del Espacio (ESA), todos ellos dedicados a pruebas de tecnolog¨ªas, pero con instrumentos de observaci¨®n a bordo, estar¨¢n pendientes del eclipse del 20 de marzo.

• El Proba-2, lanzado en 2009 para estudiar el Sol, est¨¢ en ¨®rbita a 820 kil¨®metros de altura. Lleva un equipo que toma im¨¢genes de la superficie de la estrella en ultravioleta extremo y otro que mide los niveles de radiaci¨®n Solar. El d¨ªa 20 observar¨¢ dos per¨ªodos (de una docena de segundos) del eclipse.
• El Proba-1, lanzado en 2001, utilizar¨¢ su c¨¢mara de alta resoluci¨®n para fotografiar la sombra proyectada por la Luna sobre la superficie de la Tierra.
• El Proba-V, lanzado en 2013, tambi¨¦n fotografiar¨¢ la sombra lunar, pero captando toda la zona de totalidad en una ¨²nica imagen.