Sedaci¨®n, un paso m¨¢s

La Asamblea Nacional francesa ha aprobado una nueva ley que reconoce a los enfermos terminales de ese pa¨ªs el derecho a recibir sedaci¨®n profunda, aunque acorte la vida, en caso de grave padecimiento. Tambi¨¦n regula el testamento vital y lo declara vinculante, es decir, que su contenido ser¨¢ imperativo para los m¨¦dicos, incluida la retirada de un tratamiento y los soportes vitales de hidrataci¨®n y alimentaci¨®n, una vez el paciente ha sido informado de las consecuencias de su decisi¨®n. La ley introduce la figura del tutor o persona designada para hacer valer la voluntad del paciente si ¨¦l no puede.

Estas son las principales novedades de un proyecto de ley que se queda a medio camino de lo que el Partido Socialista hab¨ªa prometido en su programa electoral, en el que defend¨ªa que el paciente pudiera beneficiarse de una asistencia medicalizada para terminar su vida con dignidad. Pero es un paso importante en la l¨ªnea de reforzar la autonom¨ªa del paciente y tiene la virtud de concitar un amplio consenso. La ley fue aprobada por 436 votos a favor y 34 en contra. En Espa?a, la sedaci¨®n profunda y terminal est¨¢n incluidas, como una buena pr¨¢ctica m¨¦dica, en las gu¨ªas de cuidados paliativos. Pero su administraci¨®n depende del criterio del facultativo y no todos la aplican, de manera que muchos pacientes siguen muriendo entre dolores que se podr¨ªan evitar.

Que la sedaci¨®n sea un derecho es un paso m¨¢s en un debate social ¡ªel de la regulaci¨®n de la eutanasia para enfermos terminales o incurables con sufrimiento intratable¡ª que ha tenido un nuevo hito en una reciente sentencia emitida por el Tribunal Supremo de Canad¨¢. En esta sentencia se considera que la ayuda m¨¦dica a morir es un derecho fundamental y que la norma que proh¨ªbe esa ayuda lesiona el derecho a la vida, porque fuerza a algunos enfermos a suicidarse preventivamente de forma violenta por miedo a no poderlo hacer m¨¢s tarde.