Robin Williams blind¨® el uso de su imagen despu¨¦s de muerto

La inesperada muerte Robin Williams por suicidio, v¨ªctima de la depresi¨®n y del p¨¢rkinson, abri¨® el pasado agosto muchos interrogantes sobre uno de los actores m¨¢s queridos de Hollywood. Pero la lectura esta semana de su testamento ha dejado una cosa clara: Williams sab¨ªa lo que val¨ªa su imagen e incluso despu¨¦s de muerto no estaba dispuesto a que otros la utilicen a su antojo. El int¨¦rprete estadounidense de 63 a?os protagonista de pel¨ªculas como El club de los poetas muertos, Mrs. Doubtfire o El indomable Will Hunting ha dejado los derechos de su nombre, su firma, su imagen y su fotograf¨ªa a la fundaci¨®n ben¨¦fica Windfall. Nadie, a excepci¨®n de su organizaci¨®n, est¨¢ autorizado a utilizar en los pr¨®ximos 25 a?os el recuerdo que Williams dej¨® en la cultura popular.

Su decisi¨®n es pionera en un momento en el que las nuevas tecnolog¨ªas permiten revivir a aquellos ya fallecidos en cine, televisi¨®n, anuncios o conciertos. Williams dej¨® claro que no habr¨¢ anuncios con su foto, hologramas con su cuerpo y que su imagen no ser¨¢ insertada contra su voluntad en un futuro filme en los pr¨®ximos 25 a?os. El actor fue consciente de lo mucho que val¨ªa la imagen que hab¨ªa creado como humorista e int¨¦rprete a lo largo de su carrera. De hecho, ya en vida tuvo una disputa con los estudios Disney cuando sin su permiso utilizaron la voz que Williams hab¨ªa creado para el genio de Alladin en otros productos relacionados con la cinta. Un enfado que concluy¨® cuando el estudio le regal¨® como disculpa un picasso valorado en cerca de un mill¨®n de euros al ¨¢vido coleccionista de arte.

La provisi¨®n perfectamente marcada en el testamento tambi¨¦n llega en un momento en el que la ¡°resurrecci¨®n¡± de los actores muertos no puede estar m¨¢s en vigencia con el estreno en los pr¨®ximos d¨ªas del largometraje A todo gas 7. El filme de acci¨®n sufri¨® la muerte de uno de sus protagonistas, Paul Walker, a mitad de rodaje en accidente de coche. Sin embargo, las actuales tecnolog¨ªas digitales le devolvieron a la vida para completar la pel¨ªcula sin que el estudio haya querido aclarar los t¨¦rminos t¨¦cnicos o econ¨®micos de esta resurrecci¨®n.

En su testamento Williams deja bien claro que el control de su nombre y de su imagen estar¨¢ en manos de la organizaci¨®n filantr¨®pica que fund¨® hace a?os con su entonces esposa Marsha. Su finalidad es la de conseguir fondos para ayudar a otras muchas obras ben¨¦ficas como M¨¦dicos sin Fronteras, Make a Wish o la asociaci¨®n contra el sida infantil, entre otras. De hecho, el actor dej¨® una provisi¨®n en su testamento para que fueran estas mismas organizaciones de su agrado las que se hagan cargo de los devengos de su imagen si el Estado deja de considerar su fundaci¨®n como una organizaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro y quiere cobrarles impuestos.

Se trata de otra decisi¨®n pionera cuando los herederos de Michael Jackson est¨¢n teniendo problemas con el fisco por estas mismas razones. El Gobierno estadounidense reclama a los herederos del rey del pop m¨¢s de 465 millones de euros en impuestos y otros 186 millones de euros en multas por los devengos que la imagen del cantante ha producido tras su muerte en diferentes actividades publicitarias. Con su testamento Williams ha querido limitar la responsabilidad fiscal que sus hijos puedan sufrir en el futuro por el uso de una imagen venerada por todos. Lo que no pudo evitar son las disputas familiares que el mismo documento ha abierto y que tiene a sus tres hijos, Zak, Zelda y Cody, enfrentados a la tercera esposa de Williams, Susan Schneider, por una parte del dinero y de los enseres personales del actor que muri¨® el pasado agosto pensando que lo dejaba todo bien atado. El lunes acordaron sus abogados en los juzgados intentar llegar a un acuerdo en privado en los pr¨®ximos dos meses.