Podemos en crisis
La salida de Monedero y sus cr¨ªticas dan un fuerte golpe al partido de Pablo Iglesias
La dimisi¨®n de Juan Carlos Monedero, cofundador y uno de los ide¨®logos de Podemos, representa un duro mazazo para el proyecto que lidera Pablo Iglesias. Como todo partido pol¨ªtico ¡ªmucho m¨¢s uno que acaba de nacer, y que tanto ¨¦xito ha cosechado en tan poco tiempo¡ª Podemos ha vivido tensiones internas, tanto en lo referente a las estrategias electorales como a las organizativas. Sin embargo, hasta la fecha, las buenas perspectivas electorales, junto con la capacidad de la c¨²pula dirigente, muy cohesionada, de mantener un rumbo claro, hab¨ªan mantenido a la organizaci¨®n a resguardo de esas tensiones.
Editoriales anteriores
Pero ahora Podemos empieza a agotarse en los dos ¨¢mbitos. Por un lado, las encuestas muestran desde hace un tiempo que ha tocado techo; incluso que podr¨ªa estar cotizando a la baja entre unos votantes que tienen a su disposici¨®n nuevas posibilidades y opciones para castigar al bipartidismo y la corrupci¨®n. Por otro, la unidad en su c¨²pula dirigente, ya puesta en entredicho respecto a las estrategias a seguir para administrar los votos cosechados en Andaluc¨ªa, parece ahora romperse con el abandono de uno de sus principales padres ideol¨®gicos.
Es dif¨ªcil decir cu¨¢nto han pesado los motivos personales y cu¨¢nto los ideol¨®gicos en la decisi¨®n de Monedero. Por un lado, su imagen p¨²blica se ha visto sumamente deteriorada por el esc¨¢ndalo de los pagos procedentes de Venezuela. No es una hip¨®tesis descartable; aunque no se dispone de pruebas fehacientes, s¨ª que hay indicios veros¨ªmiles de que aquellos pagos representaron en realidad una financiaci¨®n encubierta del Gobierno venezolano al proceso de constituci¨®n de Podemos. Que Monedero decidiera entonces asumir como propios esos pagos en aras de no perjudicar la imagen de Podemos, pero que ahora se encuentre frustrado por el deterioro de su imagen y el ostracismo p¨²blico al que se ha visto sometido, explicar¨ªa la dureza y publicidad de su ruptura. Con ella, Monedero se reivindica ante las bases de Podemos como alguien no contaminado por la proximidad del poder; es decir, precisamente como alguien que considera que en pol¨ªtica el fin (ganar) no justifica los medios (pervertir el discurso, renunciar a los principios o mentir a los electores).
Pero su dimisi¨®n, que al pretender mostrar su escaso inter¨¦s en el poder intenta restaurar su propia imagen p¨²blica, da?a sim¨¦tricamente a Pablo Iglesias y al proyecto de Podemos, que queda retratado por Monedero como un plan oportunista y c¨ªnico en el que, como se critica de los dem¨¢s partidos de la vieja pol¨ªtica, todo vale con tal de llegar al poder. Con su reivindicaci¨®n de la figura de Eduardo Galeano, recientemente fallecido, frente a la implacable persecuci¨®n del poder a toda costa que ejemplifica Juego de Tronos, la serie favorita de Pablo Iglesias, Monedero lanz¨® ayer un potente torpedo contra la l¨ªnea de flotaci¨®n de Podemos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.