¡°Los subsidios a las energ¨ªas f¨®siles no tienen ning¨²n sentido¡±

"En Par¨ªs, de repente, no se va a solucionar m¨¢gicamente el cambio clim¨¢tico". A seis meses de la conferencia internacional contra el calentamiento global que se celebrar¨¢ en Francia, Christiana Figueres (Costa Rica, 1956) reconoce que no se lograr¨¢ el objetivo de limitar, a final de siglo, el aumento de la temperatura a dos grados cent¨ªgrados con respecto a los niveles preindustriales. Existe un consenso cient¨ªfico de que, a partir de ese punto, las consecuencias del calentamiento son catastr¨®ficas. "Hoy ya podemos saber que la suma [de los compromisos de mitigaci¨®n de las emisiones] de todos los pa¨ªses no nos pone en la trayectoria de los dos grados", admite la responsable de cambio clim¨¢tico de la Organizaci¨®n de las Naciones Unidas (ONU). Pero Figueres asegura que en "Par¨ªs habr¨¢ acuerdo" y que los Gobiernos est¨¢n "bien encaminados".

La conferencia de la capital francesa deber¨¢ fijar el convenio que sustituya al Protocolo de Kioto, donde se quedaron fuera del control de las emisiones las dos principales potencias econ¨®micas (y contaminantes): China y Estados Unidos. "El Protocolo de Kioto fue bueno en su momento, pero hasta cierto punto fue simplista en su construcci¨®n". Por ello, Figueres habla ahora de "diversidad" y varias velocidades.

Cada Estado, antes de la cumbre de Par¨ªs, presentar¨¢ sus objetivos de reducci¨®n de las emisiones a partir de 2020. Estados Unidos, por ejemplo, ya se ha comprometido a una bajada en 2025 de entre un 26% y un 28% (tomando como referencia las emisiones del 2005). "China no va a poner una meta para toda su econom¨ªa. Pondr¨¢ el tope de carbono para el 2020 y el tope para todas las emisiones de gases de efecto invernadero en el 2030", indica Figueres. La propuesta de la Uni¨®n Europea es reducir para 2030 un 40% sus emisiones respecto a 1990.

El protocolo de Kioto fue bueno, pero simplista en su construcci¨®n¡±

"Las tres econom¨ªas m¨¢s grandes del mundo en emisiones ¡ªChina, EE UU y la UE¡ª son las que est¨¢n tomando un liderazgo importante". Aunque cada una se fije los objetivos que considere oportunos. "?Hay espacio para que todos los pa¨ªses hagan m¨¢s esfuerzos?", se pregunta Figueres. "Por supuesto. Pero esa no es la realidad tecnol¨®gica, pol¨ªtica y financiera que tenemos en este momento. Las metas que han tomado esos pa¨ªses son un buen primer paso, pero no son el ¨²ltimo".

Figueres recurre a una met¨¢fora para explicar este futuro acuerdo de Par¨ªs a varias velocidades: "Lo que se construye es una autopista ancha, con diferentes carriles. La autopista lleva a la meta final que es el restablecimiento del balance ecol¨®gico entre las emisiones y la capacidad del planeta de absorberlas. Toda la autopista lleva a esa meta. Pero tiene varios carriles, porque cada pa¨ªs tiene que progresar de una manera diferenciada".

Hasta ahora, 37 Estados han presentado ante la ONU sus propuestas con las reducciones de emisiones que plantean. El ¨²ltimo en hacerlo, hace 15 d¨ªas, ha sido Canad¨¢. Figueres cree que las contribuciones de los 194 pa¨ªses miembros de la Convenci¨®n Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Clim¨¢tico no estar¨¢n antes de la cumbre: "Hay muchos pa¨ªses peque?os que est¨¢n tratando a¨²n de desarrollar su capacidad de an¨¢lisis. Pero, para el momento de Par¨ªs, vamos a tener entre un 70% y un 75% de las emisiones globales cubiertas por alg¨²n tipo de plan de manejo".

China, EE UU y la UE est¨¢n tomando un liderazgo importante¡±

La secretaria ejecutiva de la Convenci¨®n Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Clim¨¢tico considera imprescindible que los pa¨ªses industrializados entren primero en el acuerdo y presenten sus programas de reducci¨®n.

En Par¨ªs, detalla, tambi¨¦n se tendr¨¢n que fijar instrumentos econ¨®micos. "Es posible", augura, que aumente la dotaci¨®n del Fondo Verde para el Clima. Considera que se debe "apoyar financiera y tecnol¨®gicamente a los pa¨ªses en desarrollo para que den ese salto para seguir creciendo y sacando a sus poblaciones de la pobreza pero sin una huella de carbono tan profunda como los pa¨ªses industrializados". Al final, la cumbre deber¨¢ marcar el camino hacia una "econom¨ªa descarbonizada".

Pero, para lograr ese objetivo, deber¨ªan desaparecer determinadas pol¨ªticas que incentivan las energ¨ªas m¨¢s sucias. Figueres solo pierde su tono reposado cuando habla de las ayudas de algunos Estados a los combustibles f¨®siles, cuando recuerda que en todo el mundo "llegan a los 5,3 billones de d¨®lares". Ese c¨¢lculo es del Fondo Monetario Internacional, un organismo poco sospechoso de fomentar el ecologismo radical. "No tiene ning¨²n sentido seguir ahora con los subsidios a las f¨®siles", opina Figueres. "Hay que bajar esos subsidios y aprovechar ese dinero para otras cosas que favorecen a la parte baja de la pir¨¢mide y, sobre todo, a los consumidores de bajos recursos".

La responsable de cambio clim¨¢tico de la ONU cree que ahora es el momento de suprimir esas subvenciones, con los precios del petr¨®leo en m¨ªnimos. "El precio est¨¢ tan bajo que bajar los subsidios no se notar¨ªa, no lo notar¨ªa el consumidor. Ya hay diez pa¨ªses que han aprovechado esta oportunidad para empezar a reducirlos".