El Fondo aprieta

El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha difundido las principales conclusiones del informe que est¨¢ ultimando sobre la econom¨ªa espa?ola. Partiendo de la revisi¨®n al alza de las previsiones de crecimiento para este a?o y el siguiente, recomienda a las autoridades que se den pasos adicionales en el ajuste fiscal y en la reforma del mercado de trabajo.

Que la econom¨ªa va a crecer m¨¢s de lo que esa instituci¨®n viene anticipando no sorprende. El FMI ha revisado varias veces sus previsiones, habitualmente inferiores al promedio de los analistas espa?oles y a las del propio Gobierno. Ahora parece curarse en salud y las sit¨²a por encima: el crecimiento del PIB espa?ol ser¨¢, seg¨²n sus c¨¢lculos, del 3,1% este a?o y del 2,5% en 2016. Son razonables.

Entre los factores que impulsan ese crecimiento, los m¨¢s importantes son externos y con fecha de caducidad. La pol¨ªtica monetaria excepcionalmente expansiva del BCE, la depreciaci¨®n del euro y la ca¨ªda del precio del petr¨®leo benefician a la econom¨ªa espa?ola en mayor medida que al promedio de la eurozona, pero no son permanentes. Adem¨¢s, la pol¨ªtica fiscal est¨¢ siendo menos restrictiva en este ejercicio de marcado car¨¢cter electoral, con bajadas de impuestos directos y ampliaci¨®n del gasto p¨²blico. La probable debilidad de alguno de esos elementos tractores, en los pr¨®ximos meses, justifica que se anticipe una reducci¨®n del crecimiento para el a?o pr¨®ximo, como lo hacen casi todos los analistas (pero no el Gobierno).

Esas previsiones y la identificaci¨®n de los motores del crecimiento son m¨¢s f¨¢ciles de asumir que la inmediata aplicaci¨®n de las pol¨ªticas sugeridas por la instituci¨®n. Admitiendo que la prolongada contenci¨®n salarial ha sido un elemento fortalecedor de la competitividad de las empresas, recomienda que siga abarat¨¢ndose el despido. Junto a ello, sugiere tambi¨¦n la subida del IVA y el copago sanitario.

No son pol¨ªticas muy novedosas, pero tampoco las prioritarias en el momento actual. En primer lugar, aplicar reducciones adicionales a la renta disponible de las familias ¡ªya sea a trav¨¦s de m¨¢s recortes salariales, del incremento de impuestos sobre productos b¨¢sicos o del aumento de la factura sanitaria¡ª no favorece precisamente que la familia media fortalezca sus decisiones de gasto, su confianza. Despu¨¦s, el nivel de endeudamiento familiar sigue siendo elevado. Y no menos importante: en la gesti¨®n de esta crisis, las familias de menor renta siguen siendo las que en mayor medida soportan sus consecuencias, como se pone de manifiesto no solo en los salarios medios, sino en la ampliaci¨®n de la desigualdad a lo largo de estos a?os.

Es acertada la recomendaci¨®n de fortalecer las peque?as empresas, en particular el acceso a la financiaci¨®n y a liberar las restricciones a su crecimiento, para aumentar el tama?o medio e incrementar la propensi¨®n exportadora. Este tipo de reformas, compatibles con la recuperaci¨®n de las condiciones de vida de la mayor¨ªa de la poblaci¨®n, son las que deber¨ªan aplicarse. Sin olvidar aquellas otras decisiones menos dependientes del Gobierno, como el plan Juncker de inversiones europeas, que, adem¨¢s de favorecer el empleo, pueden impulsar la productividad de las empresas y la debilitada cohesi¨®n en el seno de la Uni¨®n Europea.