¡°Ahora los liberianos sabemos c¨®mo vencer a la epidemia¡±
Tras un mes libre de ¨¦bola, el pa¨ªs se enfrenta al reto de recuperar el ritmo de su econom¨ªa
Liberia es un pa¨ªs libre de ¨¦bola desde hace justamente un mes. El pasado 9 de mayo transcurrieron 42 d¨ªas sin nuevos contagios tras una epidemia que se cobr¨® la vida de m¨¢s de 4.700 personas entre las 10.500 que se infectaron. Durante un a?o, el pa¨ªs qued¨® casi totalmente paralizado y ahora lucha por recuperar el nivel econ¨®mico previo a la crisis. El ministro de Comercio e Industria del pa¨ªs, Axel Addy, que particip¨® en los European Develpment Days que se celebraron en Bruselas la semana pasada, explica c¨®mo est¨¢n afrontando este reto.
Pregunta. ?C¨®mo se est¨¢ recuperando el pa¨ªs tras esta tragedia?
Respuesta. Estamos trabajando en dos sentidos. En primer lugar, estamos intentando recuperar las inversiones que hemos perdido por la crisis. Tratamos de que vuelvan grandes inversores que paralizaron su actividad con la epidemia. Tambi¨¦n estamos trabajando en el sector sanitario para que sea m¨¢s resistente a una crisis como ¨¦sta. Queremos extender nuestros acuerdos con los socios europeos, asi¨¢ticos y con EE UU para reestructurar nuestro sistema de salud y que est¨¦ mejor preparado para casos como este.
P. ?C¨®mo piensan recuperar esas inversiones?
R. Los mayores impactos los vimos el a?o pasado. Hemos perdido mucho en lo que se refiere a mercanc¨ªas. Las empresas que trabajan con ellas han ralentizado sus operaciones o incluso parado. Pero algunos est¨¢n en posici¨®n de recuperarlas y estamos tratando de que vuelvan. En el caucho por ejemplo, el precio global est¨¢ bajando y Liberia es un gran exportador. Hay un trabajo duro que hacer con los inversores para mantener los empleos, continuar innovando y creando oportunidades para los peque?os accionistas, para que la fuerza de trabajo vuelva al campo con el soporte adecuado. Un gran problema de la crisis es que mucha gente no ha podido trabajar, ha estado aislada durante mucho tiempo y ahora tenemos el reto de que vuelvan a la actividad de forma normal.
P. ?Y con respecto al sistema de salud?
R. Tenemos varias ¨¢reas en las que trabajar para construir un sistema sanitario resiliente. Por un lado, en materia de infraestructuras. Necesitamos mejores cl¨ªnicas y hospitales para que den mejor servicio de atenci¨®n primaria y puedan monitorizar este tipo de epidemias y crear un sistema de alerta. Por otro lado, hay que mejorar la capacitaci¨®n del personal. Adem¨¢s, estamos trabajando con los investigadores para mejorar en materia de medicamentos.
P. ?Qu¨¦ papel ha tenido la concienciaci¨®n de la sociedad para frenar la epidemia?
R. Ha sido clave. Una de las grandes lecciones de esta crisis es que si la comunidad est¨¢ empoderada puede ser el instrumento para un impacto positivo. Nos dimos cuenta de que los trabajadores sanitarios no consiguieron grandes mejoras hasta que la comunidad se involucr¨®. Tenemos que aprovechar este momento para transformar el sistema primario de salud en nuestro pa¨ªs.
P. Al volver la vista atr¨¢s, ?cu¨¢l dir¨ªa que han sido los mayores aciertos y fallos en esta crisis?
El ¨¦bola encontr¨® en nuestra cultura una autopista para propagarse
R. Cuando tienes una crisis como esta, que nunca antes hab¨ªamos experimentado, en la que ni siquiera puedes tocar a tus familiares, todo es muy duro. Les dices a las madres que no pueden cuidar de sus hijos, a los maridos que no pueden cuidar de sus esposas y ni?os moribundos. Y cuando tienes una sociedad como la nuestra, con una red muy cercana en la que los abrazos y los apretones de manos son comportamientos sociales muy habituales, erradicarlo es muy complicado. Esta enfermedad encontr¨® en nuestra cultura una autopista para propagarse. La lecci¨®n es que cuando consigues que la gente se involucre, el resultado es mejor y m¨¢s duradero.
P. ?Cree que este aprendizaje minimizar¨ªa el impacto de otra epidemia?
R. S¨ª, la tasa de incidencia baj¨® dr¨¢sticamente cuando la comunidad entendi¨® la forma de transmisi¨®n de la enfermedad. Cuando la gente ve¨ªa a sus parientes en los hospitales y no pod¨ªa tocarla se qued¨® impactada, pero les ense?¨® a cambiar comportamientos en las interacciones sociales. Y pienso que ahora los liberianos estar¨ªamos mejor preparados, porque sabemos c¨®mo vencer a la epidemia.
P. ?El pa¨ªs ya hace una vida normal?
R. El tr¨¢fico est¨¢ congestionado [risas]. Esto es una buena se?al. Los ni?os han vuelto al colegio, la gente normal ha vuelto a la vida normal.
P. ?Cu¨¢nto tardar¨¢n en recuperar la actividad econ¨®mica previa a la epidemia?
R. Tardaremos, porque hay muchas ¨¢reas de impacto, en algunas no veremos mejoras todav¨ªa, porque hay muchos retos. Pero estamos haciendo intervenciones como Gobierno. Al nivel m¨¢s bajo estamos intentado ajustar el presupuesto para una agenda inclusiva. Recientemente aprobamos una ley para empoderar a las peque?as y medianas empresas y generar puestos de trabajo en ellas. Tambi¨¦n estamos trabajando con nuestros grandes inversores para incentivarlos a que vuelvan la actividad normal. Tambi¨¦n estamos poniendo nuestro foco en ¨¢reas no tradicionales en nuestro pa¨ªs, como puede ser el turismo, que nos aporta un gran potencial en la creaci¨®n de empleo, especialmente para los j¨®venes. Adem¨¢s, estamos lanzando una estrategia de exportaciones del sector agrario, que puede ser el que transforme Liberia. Con los inversores adecuados podemos crear muchos trabajos.
P. ?Qu¨¦ papel ha tenido la comunidad internacional en la gesti¨®n de la crisis?
R. Es una de las cosas de las que m¨¢s agradecidos estamos. La Uni¨®n Europea ha aportado 4.000 millones para la respuesta. Vimos el impacto directo de esta inversi¨®n. Estamos trabajando con UE para mejorar nuestro programa de energ¨ªa y con varios socios asi¨¢ticos, como China, que est¨¢n apoy¨¢ndonos con fuerza. Tambi¨¦n estamos recibiendo asistencia t¨¦cnica y financiera de organizaciones internacionales, como el Banco Mundial, que son claves para el renacimiento de nuestra econom¨ªa.
P. ?Han cuantificado cu¨¢nto les ha costado la epidemia?
R. Al principio en los primeros seis meses las transacciones bajaron en 500 millones de d¨®lares. Esto lo comprobamos de inmediato. Pero hemos tenido la suerte de recibir la ayuda de nuestros socios, que han dado estabilidad a nuestra econom¨ªa.
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