Grandes autores de m¨²sica rara
Llamarlos m¨²sicos se queda corto. Los de CaboSanRoque mezclan arquitectura, dise?o y sonido para crear lo que nadie ha o¨ªdo antes
Etiquetar a CaboSanRoque es complicado. Su imaginaci¨®n rompe los l¨ªmites de lo que habitualmente se conoce como m¨²sica. Se consideran artesanos e ingenieros, y s¨ª, dan conciertos en directo¡ pero algo extra?os. ?Alternativos?. Digamos que ese t¨¦rmino se queda corto. Por ejemplo: ?Qu¨¦ pinta por ah¨ª una m¨¢quina que emite sonidos llamada Tres Tristons Trons como si fuera el tercer componente de la banda? Los seres humanos que andan tras este proyecto responden al nombre de Laia Torrens (1976) y Roger Aixut (1975). Como ellos confiesan, ¡°nuestra actividad se desarrolla en tres ¨¢mbitos: m¨²sica, artes esc¨¦nicas e instalaciones, siempre partiendo de la construcci¨®n de m¨¢quinas y la m¨²sica como ejes centrales¡±. Ser unos ¡°bichos raros¡± les ha llevado a formar parte del equipo de la comunidad de Mazda Rebels y, tambi¨¦n, a actuar en la pr¨®xima edici¨®n del festival S¨®nar. De hecho, Mazda lo pone f¨¢cil y pone a disposici¨®n de los internautas invitaciones para disfrutar del evento electr¨®nico-experimental del a?o. Ent¨¦rate aqu¨ª como conseguirlas.
A Laia y a Roger no les gusta que les ¡®encierren¡¯ en el simple concepto de m¨²sica. Ella es licenciada en ingenier¨ªa superior industrial y tiene estudios musicales y de piano del Conservatorio de Vic y, bueno, un pu?ado m¨¢s de curr¨ªculos que, ejem, mejor no contar (causa envidia). Roger es licenciado en arquitectura y los pentagramas son su pasi¨®n. Un buen d¨ªa coincidieron en un proyecto llamado CaboSanRoque, que lleg¨® a contar con 9 m¨²sicos. ¡°A partir de la aportaci¨®n personal de multitud de instrumentos, cada uno de nosotros pod¨ªa elegir qu¨¦ instrumento quer¨ªa tocar en cada canci¨®n, y compon¨ªa su parte, evitando siempre su instrumento de origen. Esto provocaba una aproximaci¨®n muy intuitiva a la composici¨®n y ejecuci¨®n¡±, nos cuenta Roger, quien, dado el marem¨¢gnum sonoro en el que se encontraba, decidi¨® construir cachivaches musicales con objetos cotidianos con el af¨¢n de disponer de m¨¢s posibilidades. ¡°Fue despu¨¦s de grabar el primer disco cuando descubrimos que, al crear nuestros instrumentos, est¨¢bamos trabajando con un material sonoro ¨²nico¡±.
Bucean en m¨²sicas que nunca pujar¨ªan en competir en cualquier lista comercial, ni indie, ni hipster, ni rock, ni nada de nada. ¡°En general nos gusta la m¨²sica que te plantea una cierta inestabilidad, alg¨²n conflicto dentro de tu cabeza, a nivel r¨ªtmico o t¨ªmbrico, ya sea Stravinski o Autechre. Nos apasiona la m¨²sica en que las cosas no suceden como esperas que sucedan¡±. John Cage, los futuristas italianos (Luigi Russolo), ¡°jinetes solitarios e inventores de mundos sonoros como Harry Partch o Conlon Nancarrow, o m¨¢s reciente como Heiner Goebbels, quien proced¨ªa de la escena punk y experimental alemana de finales de los setenta¡±.
Su ¨²ltimo disco, el sexto, que presentaron en mayo en Mazda Space en Barcelona, responde al nombre de 12 Rounds, en el que ¡°hemos imaginado un encuentro imposible entre sonoridades de finales de los setenta y principios de los ochenta con estructura de baile actual: Captain Beefheart, Marc Ribot, James Chance o Gang of Four llevados a la pista de baile¡±. Eso s¨ª, con su tercer socio, la m¨¢quina Tres Tristes Truenos (en castellano). ¡°El reto en esta m¨¢quina era compactar al m¨¢ximo todas las prestaciones sonoras que quer¨ªamos poner en juego. Quer¨ªamos trabajar con sonidos met¨¢licos y contundentes, que conseguimos a trav¨¦s de muelles, planchas de hierro y motores, y sonidos con mucha textura y rugosidad¡±.
En pleno ajetreo de la mudanza de sus talleres y colecciones de m¨¢quinas desde Barcelona a una fundaci¨®n de arte en Banyoles (Girona), est¨¢n a punto de presentar su nuevo disco en el festival S¨®nar de la Ciudad Condal y en el de Roskilde (Dinamarca). A la vista tienen un par de conciertos de improvisaci¨®n conducida con la Orquesta del Caballo Ganador en el L¡¯Auditori de Barcelona (con tres bailarinas) entre otros proyectos futuros.
?Somos hombres, somos m¨¢quinas?, que dir¨ªan Devo y Kraftwerk si los junt¨¢ramos en la misma barra de un bar¡ ¡°Los humanos y las m¨¢quinas ¨Cconfiesa Roger¨C tienen virtudes diferentes, y para nosotros no tiene ning¨²n inter¨¦s hacer m¨¢quinas que sustituyan a humanos. No hay nada m¨¢s deprimente que un robot antropom¨®rfico tocando una bater¨ªa r¨ªgidamente, con unos codos met¨¢licos articulados y la sensibilidad musical de un tractor¡±. En fin, se llama nadar a contracorriente. Abandonar la c¨®moda poltrona del sal¨®n y comerse el mundo a base de imaginaci¨®n, atrevimiento y valent¨ªa. Porque¡ a CaboSanRoque no le gusta el mainstream.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.