Treinta y siete a?os despu¨¦s de que el gobierno de Adolfo Su¨¢rez despenalizara ¡±el uso de procedimientos para evitar la procreaci¨®n¡±, el 72,7% de las espa?olas reconoce utilizar alg¨²n m¨¦todo anticonceptivo. ?Y el 27,3% restante? Un 11,4 % de mujeres no recurre a ellos porque no mantiene relaciones sexuales, mientras que un alarmante 15,9% s¨ª practica sexo pero sin protecci¨®n. La cifra sube hasta el 24,8% cuando se trata de enfrentarse a la primera relaci¨®n sin seguridad. Los datos los presentaba as¨ª el doctor Jos¨¦ Vicente Gonz¨¢lez Navarro, presidente de la Sociedad Espa?ola de Contracepci¨®n (SEC), el pasado 26 de septiembre con motivo del D¨ªa Mundial de la Anticoncepci¨®n 2014 (26 de septiembre). Las cifras se limitan a ellas porque las estad¨ªsticas est¨¢n elaboradas a partir del n¨²mero de embarazos no deseados.
Este mismo estudio concentra en dos los medios de contracepci¨®n favoritos de los espa?oles: el preservativo (31,3%) y la p¨ªldora (16,2). Sin embargo, existen hasta una quincena de v¨ªas para evitar un embarazo no deseado (en Espa?a se registran 240.000 al a?o). Y no todos ofrecen igual protecci¨®n.
Escrutados uno a uno todos los m¨¦todos para disfrutar del sexo sin aumentar la familia descubrimos que su eficacia se mide por el llamado ¨ªndice de Pearl: el n¨²mero de embarazos que presentar¨ªan te¨®ricamente 100 mujeres que utilizaran el mismo m¨¦todo anticonceptivo durante un a?o. De modo desconcertante, aunque con toda l¨®gica, de cada uno se apuntan dos par¨¢metros: uno, su eficacia usado en condiciones ¨®ptimas; otro, en condiciones reales. Estos son los resultados.