El hermoso viaje de las reinas

A las ni?as la sociedad las adiestra para ser princesas o reinas y, sin embargo, el sapo de la realidad no tarda en besarlas y en un elevado porcentaje pasan a engrosar las listas del paro, se convierten en meros objetos de deseo o, en algunos casos, incluso en v¨ªctimas de la violencia de g¨¦nero. ?bamos a ser reinas: mentiras y complicidades que sustentan la violencia contra las mujeres es el t¨ªtulo de uno de los libros de Nuria Varela y en ¨¦l hurga en lo que sucede en las entretelas de esa cruel lacra estructural. Pero violencia es tambi¨¦n la dificultad a?adida por el mero hecho de ser mujer, la invisibilidad y la infrarrepresentaci¨®n a que se somete a estas aspirantes a ciudadanas plenas que son enga?adas con falsas varitas m¨¢gicas.

Viene esto a colaci¨®n del debut en la direcci¨®n de la zaragozana Patricia Roda, el largometraje documental El viaje de las reinas, estrenado en oto?o del 2014 en la Seminci de Valladolid y que lleva unos meses pase¨¢ndose por diversas ciudades y festivales. Incluso ha recibido una biznaga de la plata en la secci¨®n ¡°Afirmando los derechos de la mujer¡± del prestigioso Festival de M¨¢laga.

Hoy podr¨¢ verse en Barcelona, donde se proyectar¨¢ en un pase ¨²nico en la pantalla de la Sala Agn¨¨s Varda que los Boliche Cinemes acaban de bautizar con el nombre de esta cineasta inmensa, convertida ya en referencia y que este a?o acaba de ser la primera mujer en recibir en el Festival de Cannes la Palma de Oro de honor a su carrera. Todo un honor para esta historia de empoderamiento femenino hecha en casa.

El nuestro es un pa¨ªs donde son escasas las salas o teatros bautizados con nombres de mujeres (el madrile?o Teatro Mar¨ªa Guerrero es una excepci¨®n, como tambi¨¦n lo son el coru?¨¦s Rosal¨ªa de Castro o el ovetense teatro Clara Campoamor, donde se entregaban los premios Pr¨ªncipe de Asturias y ahora se han empezado a entregar los Princesa de Asturias; ?un ejercicio de justicia de g¨¦nero en el seno de una instituci¨®n, la monarqu¨ªa, tan poco paritaria?). Y es tambi¨¦n un pa¨ªs donde las primeras damnificadas por la crisis han sido las mujeres: menos afianzadas en sus profesiones, han resultado mucho m¨¢s vulnerables y sus cabezas han sido las primeras en rodar cuesta abajo. Parece ser que en Espa?a el desempleo femenino triplica la media europea.

Si las capitales teatrales, Madrid y Barcelona, han sufrido en sus carnes la sangr¨ªa, qu¨¦ no estar¨¢ sucediendo en las dem¨¢s capitales de provincia y en sus respectivos territorios. En Arag¨®n ya en 2013 la asociaci¨®n +Cultura reclamaba un plan de emergencia y un pacto por la cultura para salvar ese goteo incesante de expulsiones del sector cultural. En medio de ese panorama tan poco alentador, un grupo de actrices radicadas en Arag¨®n (Actrices para la escena) se reuni¨® para poner en marcha un montaje teatral que las rescatara de la inactividad. Bajo la batuta de Blanca Resano, profesora de interpretaci¨®n de la Escuela de Teatro de Zaragoza, escogieron doce hist¨®ricas reinas europeas y alrededor de sus figuras tejieron Eva Hinojosa y Susana Mart¨ªnez la dramaturgia de Reinas.

Patricia Roda asisti¨® a sus primeros pasos y decidi¨® hacerse eco de ese claro proceso de empoderamiento femenino, en el que no faltaron los momentos de desaliento, y las sigui¨® en su esforzado a?o de ensayos, que culmin¨® en un multitudinario estreno en el Teatro Principal de Zaragoza. Un viaje emocionante y un combate contra el desaliento en clave femenina. En palabras de la directora: ¡°Doce actrices, sobre el escenario, doce protagonistas, dos dramaturgas, una directora¡­ Todo es especial, y ¨²nico. No he sido capaz de encontrar un ejemplo similar. Que conste que me encantar¨ªa que no fuera excepcional y que no lo hubiera tenido que tratar como tal¡±.

El equipo del montaje teatral "Reinas" con su directora, Blanca Resano, en el centro

Ahora, adem¨¢s de los bolos que van saliendo, el montaje teatral Reinas se pasea tambi¨¦n en celuloide en este documental lleno de empat¨ªa y complicidad donde un grupo de mujeres se rebela en una Espa?a culturalmente estrangulada y persigue su sue?o. Mujeres heroicas que creen en el empoderamiento femenino y en la poactividad para combatir las escasas oportunidades y el peso de la invisibilidad, del que El viaje de las reinas ha querido dejar testimonio.