El Comecocos naci¨® de una pizza. Lo dice su creador
Toru Iwatani nos cuenta c¨®mo cre¨® cada elemento del PacMan, el m¨ªtico videojuego de 1980 que cumple 35 a?os
Toru Iwatani (Meguro, 1955) es un profe. De los que empieza a explicar cualquier cosa hablando en mayest¨¢tico: ¡°Imaginemos que estuvi¨¦ramos en 1980¡¡±. Es tambi¨¦n el t¨ªo que ha creado el Pac-Man o Puck-Man, como lo llamaron en Jap¨®n. Ese que, seg¨²n las cuentas de los expertos del arcade Twin Galaxies, es el videojuego de recreativos que m¨¢s pasta ha recaudado de todos los tiempos, m¨¢s de 2.000 millones de euros. Ese que cuando cumpli¨® 30 a?os caus¨® una p¨¦rdida de productividad en todas las empresas del mundo durante tres d¨ªas porque a Google se le ocurri¨® encasquetarlo en un doodle jugable.
Iwatani, de visita en Barcelona por el congreso de videojuegos Gamelab, es lo contrario a una diva insoportable. Es un se?or adorable, humilde al extremo y entusiasta incansable de su obra. Tanto como para sacar durante esta entrevista los dibujos de dise?o originales que conserva escrupulosamente en una carpeta plastificada. ¡°Toca, toca¡±, dice Iwatani, ofreciendo un pedazo de la s¨¢bana santa de los videojuegos. Pero aparte de tocar, quer¨ªamos saber c¨®mo y por qu¨¦ este crack del videojuego ¡ªque se retir¨® en 2007 de su compa?¨ªa de siempre, Namco, para dar clases en la Universidad de las Artes de Osaka¡ª dise?¨® cada elemento del Pac-Man. Esto es lo que contest¨®.
El quid de la cuesti¨®n
¡°Imagina una sala recreativa de los 80. Es un sitio l¨²gubre y oscuro, solo para chicos, donde se mataba a los marcianitos de los Space Invaders. Por aquel entonces no hab¨ªa consolas en casa. Si uno quer¨ªa divertirse para jugar, ten¨ªa que ir a estos recreativos. Pero con este aspecto s¨®rdido ninguna chica se pasar¨ªa por all¨ª. As¨ª que pens¨¦ en c¨®mo hacer un videojuego que les interesara a las mujeres. ?Y qu¨¦ les interesa? Pues la moda, el amor¡ Pero es dif¨ªcil visualizar eso. De pronto di con la palabra clave. ?Comer! ?Las mujeres comen! ?Parecen tener un segundo est¨®mago para los postres!¡±.
El comecocos
¡°El mismo d¨ªa que se me ocurri¨® la idea de comer, me estaba pidiendo una pizza. Le arranqu¨¦ un pedazo y por casualidad baj¨¦ la vista. All¨ª estaba. ?Mi Pac-Man! ?Ese ten¨ªa que ser el personaje de mi videojuego! Lo hice amarillo porque es un color neutro. No es como el azul o el rojo, que asociamos con conceptos muy concretos (hombre-mujer, etc.). Es un color universal, para todos. Para ese sonidillo que se oye cuando come, nos fijamos en m¨ª. Hice esto: ¡®Gokum, gokum¡¯ [Iwatani traga exageradamente] y eso es lo que usamos [r¨ªe]¡±.
Los fantasmillas
¡°Pac-Man va comi¨¦ndose estos puntitos, como galletitas. Pero debe de tener alg¨²n enemigo para que tenga gracia. Y ese enemigo tambi¨¦n tiene que ser atractivo para las mujeres. Los monstruos, o fantasmas como los llam¨¢is vosotros, no pueden ser algo verdoso y baboso, que de asco. Nos inspiramos para los colores en unos pastelillos muy populares en Jap¨®n, los sanrio, que los hiciera apetecibles¡±.
El Laberinto
¡°Vemos el laberinto en un solo plano porque el jugador tiene que entender el objetivo. Al visualizarlo entero, el jugador sabe que tiene que completar el recorrido y comerse todas las galletitas. ?Y c¨®mo te mueves en mi laberinto? Pues a ver, lo siento mucho, pero era algo para las mujeres, as¨ª que ten¨ªa que ser sencillo. Arriba, abajo, derecha e izquierda. Lo siento, lo siento mucho, pero es mi manera de expresarme [Iwatani cabecea varias veces para disculparse a la traductora y nuestra fot¨®grafa, que se r¨ªen]¡±.
La sorpresa
?Puede estar pensando a¨²n Iwatani en c¨®mo darle una vuelta de tuerca a su archiconocido Pac-Man? El maestro se saca el m¨®vil del bolsillo y pone un v¨ªdeo. En ¨¦l se ve a un tipo vestido con un traje clavado a los de Tron, de fondo negro y de contornos LED. Pero por entre esos contornos, de un brillante azul el¨¦ctrico, circula un Pac-Man. El cuerpo humano se ha convertido en el laberinto del Pac-Man. El Comecocos se ha hecho wearable. ¡°Te tienes que mover como un bailar¨ªn. Pac-Man se desplaza por tus brazos, por las piernas, por la cintura. No tienes joystick. Tu propio cuerpo es el joystick¡±.
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