Cruce de calles

Con un poco de retraso respecto a las leyes y, sobre todo, respecto a la sensibilidad de muchos de nosotros, pueblo soberano que habita nuestras ciudades, el Ayuntamiento de Madrid ha decidido cambiarle el nombre a muchas calles que todav¨ªa manten¨ªan alguno que ofende.

Resulta que en la capital se mantiene una calle para el general Yag¨¹e, al que a¨²n recuerdan en Badajoz porque cuando pas¨® por all¨ª dej¨® tras de s¨ª entre 2.000 y 4.000 fusilados. Tenemos claro, al parecer, que la cosa se debe centrar en la relaci¨®n del nombre a quitar con el franquismo. Pero yo pienso que no va a ser tan sencillo y en todo caso nos va a costar un esfuerzo.

?Se va a quitar de una vez el nombre de Carlos Maurr¨¢s a una calle tan principal como la que tiene el impresentable ultraderechista franc¨¦s? Este todav¨ªa es f¨¢cil, y no va a dar problemas porque los vecinos no saben qui¨¦n era. Pero veamos otro que tiene m¨¢s recovecos de lo que parece: Ca¨ªdos de la Divisi¨®n Azul. Yo soy hijo de un superviviente de aquello, pero partidario de respetar la calle actual, porque los que hicieron da?o a este pa¨ªs fueron los que salieron vivos. Los ca¨ªdos no le hicieron mal a nadie. Dej¨¦mosles en paz.

Tambi¨¦n podemos buscar otros criterios. Hay un pueblo precioso en C¨¢diz que se llama Setenil de las Bodegas. Pues bien, en ese pueblo hay una calle dedicada a ¡°Gibraltar espa?ol¡±. ?Cabe mayor sensibilidad que hacer referencia a deseos de los habitantes? La alcaldesa Carmena ha dicho que va a montar debates vecinales para ver qu¨¦ nombres nuevos poner. Le puede salir el tiro por la culata y, por ejemplo, que en el barrio de Salamanca le permitan quitar a un franquista para meterle a un franquista doble. ?Y si quiere poner a Dolores Ibarruri y le meten otra vez a Yag¨¹e? Lo mejor ser¨¢ tomar el ejemplo de Setenil, dejarse de guerras civiles, y trabajar los deseos colectivos. Un poner: ¡°Avenida del crecimiento sin inflaci¨®n¡±, o ¡°Calle del pleno empleo¡±.

Yo propongo a Od¨®n de Buen, cient¨ªfico y desconocido por tanto. Tampoco estar¨ªa de m¨¢s poner gente que fuera ejemplar de verdad, porque, bien pensado, hasta lo de Gibraltar da sus problemas. ?Era don Juli¨¢n un traidor?