Ai Weiwei en libertad

He aqu¨ª una refrescante imagen de felicidad, la de un padre jugando con su ni?o ¡ªal que no ve¨ªa desde hac¨ªa un a?o¡ª en una piscina de M¨²nich (Alemania), donde el peque?o vive con su madre, por motivos de seguridad, muy lejos de Pek¨ªn, donde reside el artista Ai Weiwei. El autor del estadio conocido como El Nido, que acogi¨® los Juegos Ol¨ªmpicos de 2008 en la capital china, cay¨® en desgracia por sus cr¨ªticas al r¨¦gimen comunista. En 2011 fue encarcelado 81 d¨ªas por ¡°incitar a la subversi¨®n contra el Estado¡± y sufri¨® despu¨¦s acusaciones variopintas, t¨ªpicas de un r¨¦gimen totalitario: evasi¨®n de impuestos, bigamia, pornograf¨ªa, cambio il¨ªcito de divisas..., incluso lleg¨® a ser tachado de ¡°enemigo p¨²blico¡± y de ¡°criminal¡±.

Su purgatorio empez¨® a aliviarse en 2012, cuando se le levant¨® el arresto domiciliario, aunque las autoridades mantuvieron la prohibici¨®n de que abandonara el pa¨ªs. Ello no le impidi¨® seguir montando exposiciones fuera de China ¡ªuna de ellas en la antigua c¨¢rcel de Alcatraz, qu¨¦ iron¨ªa¡ª organizadas por correo electr¨®nico y videoconferencias, y sin su presencia en las inauguraciones.

Y sin que sepamos muy bien los motivos, el mismo r¨¦gimen que lo asfixiaba empez¨® a soltar el lazo. El deshielo lleg¨® en junio, cuando se le permiti¨® su primera exposici¨®n individual en Pek¨ªn, para la que reconstruy¨® un pabell¨®n de m¨¢s de cuatro siglos. En julio, el hombre que hab¨ªa llenado la Sala de Turbinas de la Tate Modern de Londres con 100 millones de pipas de girasol de porcelana recuper¨® su pasaporte, y como un adolescente que sale por primera vez del nido, se hizo un selfie con el documento. El 30 de ese mes sali¨® de China tras cuatro a?os de ostracismo. En M¨²nich, Ai Weiwei se har¨¢ una revisi¨®n m¨¦dica, aunque vista su cara, no parece que sufra ninguna dolencia. Esperemos que dure. Su salud y su libertad.