Una vacuna para todas las gripes, ese s¨ª que ser¨ªa un hito

De momento solo se ha probado en ratones, hurones y macacos, pero si los ensayos que se han hecho de un nuevo modelo de vacuna contra la gripe tuvieran ¨¦xito en humanos, estar¨ªamos sin duda ante un hallazgo de enorme trascendencia. Un hito que merecer¨ªa, como poco, el Premio Nobel de Medicina pues evitar¨ªa cientos de miles de muertes cada a?o. La nueva vacuna ha sido desarrollada en paralelo por dos equipos distintos, y los resultados, publicados en las dos revistas cient¨ªficas de referencia ¡ªNature y Science¡ª,son coincidentemente positivos, lo que hace albergar la esperanza de que pueda demostrar eficacia tambi¨¦n en humanos.

?Su gran ventaja respecto de la actual vacuna de la gripe es que servir¨ªa para las diferentes cepas y modalidades con que se presenta el virus influenza, cuya capacidad de mutaci¨®n ha resistido hasta ahora todos los envites de la ciencia para doblegarlo y se ha convertido en una obsesi¨®n para los vir¨®logos. Su fuerza reside precisamente en lo r¨¢pido que cambia, por eso se ha de dise?ar una nueva vacuna cada a?o, basada en prote¨ªnas purificadas y atenuadas de las tres cepas que se estima que pueden ser dominantes. Y no solo puede presentarse en cepas diferentes, sino que estas pueden cambiar cuando la vacuna ya est¨¢ hecha, lo que rebaja notablemente su eficacia. Eso es lo que ocurri¨® el invierno pasado.

Incluso cuando adopta su forma m¨¢s benigna, la gripe provoca decenas, cientos de miles de muertes, principalmente de personas mayores con patolog¨ªas previas que no pueden superar las complicaciones. Convivimos cada a?o con ella sin apercibirnos de los estragos que causa, salvo cuando una cepa especialmente virulenta hace su aparici¨®n, cosa que viene a suceder cada 10 o 15 a?os. Entonces, si se convierte en pandemia, las v¨ªctimas pueden contarse por millones. La m¨¢s mort¨ªfera, y la de m¨¢s triste recuerdo pues coincidi¨® con el final de la I Guerra Mundial, fue la llamada pandemia de gripe espa?ola, que se propag¨® en 1918 y en dos a?os provoc¨® entre 50 y 100 millones de muertos. En Europa fue tan mort¨ªfera como la propia guerra, pues afect¨® a personas j¨®venes de buena salud.

Desde entonces ha habido cinco pandemias. El miedo a que se repita una combinaci¨®n v¨ªrica tan virulenta como la de 1918 est¨¢ siempre presente y es la causa de la histeria, el alarmismo y la respuesta exagerada que tuvo lugar en la crisis de la gripe aviar. Los primeros casos de contagio por el virus H5N1 en humanos ¡ªaunque no entre humanos, pues siempre fue por contacto con las aves¡ª se produjo en Hong Kong en 1997. La amenaza de que el peligroso virus (33% de mortalidad) mutara y pudiera contagiarse entre humanos reapareci¨® con fuerza en 2004 y dio lugar a respuestas preventivas exageradas que se repitieron, con los mismos ingredientes y el mismo miedo a la mutaci¨®n, en la siguiente crisis, la de la gripe A (H1N1), en 2009. Por todo ello, ser¨ªa digno de echar las campanas al vuelo el que la nueva vacuna demostrara eficacia en humanos. Evitar¨ªa millones de muertes y el coste de nuevas crisis marcadas por el alarmismo.