Una rectificaci¨®n saludable, pero insuficiente

Justo tres a?os despu¨¦s del decreto que acab¨® con la cobertura sanitaria en Espa?a tal y como la conoc¨ªamos hasta entonces, el gobierno pone ahora sobre la mesa -la del Consejo Interterritorial de Salud que se celebra hoy- una propuesta que no es sino una rectificaci¨®n de su propia normativa, el Real Decreto Ley 16/2012, que se ha demostrado injusto e ineficaz.

Todav¨ªa nos queda conocer la concreci¨®n de la propuesta del ministro, m¨¢s all¨¢ de las filtraciones. De momento, lo que s¨ª sabemos es que su pretensi¨®n no es devolver la tarjeta sanitaria a todas las personas que viven en territorio espa?ol a las que les hab¨ªa sido retirada, sino "conceder" un documento distinto, como queriendo marcar diferencias entre las necesidades de salud y los derechos de unas personas y de otras en funci¨®n de su situaci¨®n administrativa.

Sea un "registro" o la entrega de un documento distinto a la tarjeta sanitaria lo que proponga el ministro, desde M¨¦dicos del Mundo pensamos que crear un sistema de acceso "especial" y limitado al sistema sanitario p¨²blico ¨C¡°para pobres¡±, ¡°para inmigrantes¡± o ¡°para personas excluidas¡±- es discriminatorio e innecesario.

Si algo ha conseguido esta norma, durante sus tres a?os de vigencia, ha sido generar desconcierto y sufrimiento. Hemos presentado casos concretos, testimonios, cientos de ellos. Mujeres que han dado a luz sin seguimiento m¨¦dico de su embarazo, enfermos trasplantados que han vivido con angustia las dificultades para conseguir una medicaci¨®n imprescindible para su vida y pacientes con c¨¢ncer que han visto avanzar la enfermedad en su cuerpo sin poder someterse a tratamiento.

Adem¨¢s, la llamada reforma sanitaria modific¨® de un plumazo los cimientos del sistema sanitario espa?ol, al implantar el concepto de asegurado como requisito imprescindible para recibir asistencia sanitaria, olvidando que el derecho a la salud es inherente a cualquier ser humano, independientemente de su condici¨®n administrativa. El gobierno olvid¨® tambi¨¦n que la sanidad espa?ola se financia en gran medida con impuestos indirectos, como el IVA o los impuestos especiales sobre el alcohol o los carburantes, que pagamos todas las personas que vivimos y compramos en Espa?a (incluyendo a aquellas pendientes de regularizar su situaci¨®n legal).

Especialmente sangrante es la insistencia del Gobierno en ligar la atenci¨®n sanitaria a personas inmigrantes sin recursos que proceden de pa¨ªses de renta baja con el llamado "turismo sanitario". Un concepto que hace referencia a ciudadanos europeos, que recurren al sistema de salud espa?ol por su calidad y porque disponen de segundas residencias en nuestro pa¨ªs. En este caso, la obligaci¨®n del Estado es gestionar con los pa¨ªses de origen de estas personas el retorno del gasto ocasionado, algo de lo que el ejecutivo no se est¨¢ ocupando adecuadamente, seg¨²n el Tribunal de Cuentas.

Especialmente sangrante es la insistencia del Gobierno en ligar la atenci¨®n sanitaria a personas inmigrantes sin recursos que proceden de pa¨ªses de renta baja con el llamado "turismo sanitario"

Unido a esto, en M¨¦dicos del Mundo nos hemos empe?ado en rebatir una y otra vez la falsedad del presunto "efecto llamada" de la cobertura sanitaria universal, puesto que los estudios indican que menos del 3% de quienes emigran lo hacen buscando recibir cuidados por problemas de salud.

Y si de ahorro econ¨®mico hablamos, conviene recordar que la limitaci¨®n a la atenci¨®n en urgencias a las personas en situaci¨®n irregular que impuso el Gobierno en 2012 no s¨®lo es ¨¦ticamente injustificable, sino que adem¨¢s resulta ineficiente, puesto que consume m¨¢s recursos sanitarios y obtiene peores resultados en t¨¦rminos de salud. Est¨¢ demostrado que el acceso a la Atenci¨®n Primaria reduce la morbilidad y, para ciertas patolog¨ªas, la prevenci¨®n y el diagn¨®stico temprano son m¨¢s eficientes e implican menor coste que los tratamientos posteriores. Dicho de otra forma, prestar servicios solo de urgencia a las personas inmigrantes sin permiso de residencia es m¨¢s costoso a largo plazo que la atenci¨®n primaria^. Lo venimos diciendo desde 2012, y queremos recordarlo ahora que el Ministerio parece haber cambiado su disposici¨®n.

Muchas organizaciones sociales y asociaciones de profesionales de la salud hemos reclamado insistentemente la modificaci¨®n de esta norma inaceptable desde el punto de vista de la justicia, la ¨¦tica y la salud p¨²blica. Celebramos por ello el cambio de rumbo de Gobierno; s¨®lo esperamos que sea finalmente en la direcci¨®n adecuada. Para M¨¦dicos del Mundo, el ¨²nico camino posible es la devoluci¨®n de la asistencia sanitaria a las personas inmigrantes como parte del derecho a la salud y la vuelta a un sistema sanitario p¨²blico de cobertura universal.

Sagrario Martin es presidenta de M¨¦dicos del Mundo Espa?a