Sin modelos: los nuevos dise?adores prefieren a la gente 'normal'
La cotidianidad (o la extravagancia) prima sobre la belleza. Al menos, eso se concluye de las ¨²ltimas semanas de la moda. Hasta el punto de que se acaba de acu?ar el t¨¦rmino 'nodel' (no model), para designar a los nuevos protagonistas de las pasarelas
"En mi casting, he mezclado modelos con 'nodelos', es decir, con amigos y colaboradores. Creo que de esa forma mis prendas ganan en calidad". Al habla Eckhaus Latta, la nueva joven promesa del dise?o americano (atentos, porque dar¨¢ que hablar en los pr¨®ximos meses), que se gan¨® la atenci¨®n de los medios por aparcar los convencionalismos de un desfile al uso. En lugar de modelos profesionales, prefiri¨® rodearse de personajes desconocidos para el gran p¨²blico pero famosos dentro del underground neoyorquino. Gente cuyo estilo y/o actitud no se asocia con medidas perfectas, pero s¨ª con el esp¨ªritu de esta marca transgresora. Entre ellos, Grace Dunham, la herman¨ªsima de Lena Dunham, activista del feminismo y famosa, entre otras cosas, por participar en la campa?a "Free the nipple" o subir fotos a Instagram con las piernas sin depilar como protesta contra la tiran¨ªa de la belleza femenina. O David Moses, joven dise?ador que ejemplifica con su propio f¨ªsico la funci¨®n de su ropa: diluir las barreras del g¨¦nero.
Hace tiempo que marcas y creadores buscan su nueva cantera de personajes en Instagram, en un intento por insuflar espontaneidad y frescura a sus contenidos. Pero mientras la mayor¨ªa no ha ido m¨¢s all¨¢ de cazar perfiles an¨®nimos para protagonizar campa?as aisladas (v¨¦ase el caso de Marc Jacobs o Calvin Klein), la nueva generaci¨®n de la moda considera que toda su estrategia de comunicaci¨®n, de la fotograf¨ªa a la pasarela, debe dejar de lado a celebridades y tops, y centrarse en individuos tan peculiares como an¨®nimos.
Es el caso de Nico Panda, la ense?a del dise?ador Nicola Formichetti (anterior director creativo de Mugler). El que hace un tiempo fuera estilista de figuras tan conocidas como Lady gaga o Kim Kardashian, ahora prefiere nutrirse de musas mucho m?as de andar por casa. En su ¨²ltimo desfile, celebrado hace unas semanas en el marco de la semana de la moda de Nueva York, eligi¨® un casting de gente "expresiva en su vida diaria". Com Tawan, un joven afroamericano de melena rubia o Richie Shazam; de profesi¨®n, director de relaciones p¨²blicas de marcas de moda.
La silueta tampoco es un elemento fundamental para ellos, Al mismo tiempo que Victoria Beckham o Joseph Altuzarra eran criticados por? contratar a modelos demasiado delgadas, el humorista The Fat Jew creaba un desfile 'para padres y madres' (con personas mayores de cuarenta y medidas naturales) y la joven dise?adora Becca McCharen registraba todas las tallas, desde maniqu¨ªs de la 36 a maniqu¨ªs del a 42, acabando con el concepto de 'talla grande' e integr¨¢ndolo en su abanico de propuestas. Al otro lado del r¨ªo, en el Museo de Brooklyn, la revista de moda queer DapperQ, repet¨ªa show bianual con mujeres reales que no quieren ser catalogadas dentro del espectro que la moda llama 'femenino', y mostraban trajes sastre, tirantes, pajaritas y todo un juego de prendas que dinamitaba los c¨¢nones de belleza y g¨¦nero.
En la semana de la moda de Londres, la dise?adora Lenie Boya se ha decantado por la deportista paral¨ªmpica Stefanie Reid (antes, la cadena Debenhams ya utiliz¨® a deportistas apral¨ªmpicos en sus campa?as). Pero, si hablamos de insuflar personaildad, la palma se la lleva la dise?adora Ashley Williams, que cont¨® con la artista del tatuaje Grace Neutral para cerrar su desfile; una celebridad aupada en las redes sociales que acumula operaciones est¨¦ticas y adornos en la piel. Hasta sus ojos est¨¢n tatuados.
Porque, s¨ª, parece que las modelos de facciones cl¨¢sicas se encuentran en retirada, pero eso no quiere decir que los nuevos rostros sean an¨®nimos totales. Son, m¨¢s bien, individuos cuya fama ha nacido y sobrevive gracias a Internet, ya sea por su peculiar estilo o por su particular forma de gestionar sus perfiles digitales. Al fin y al cabo, ?qu¨¦ m¨¢s puede hacer un joven dise?ador para ganar eco medi¨¢tico ante la mara?a de marcas famosas que compiten este mes por los focos? La nueva fama (y la nueva moda) no tiene medidas perfectas ni rostros angelicales, sino un valor a?adido que clama a gritos ser exhibido en una pasarela
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