Mentirosos de categor¨ªa
Volkswagen es la mayor industria de Alemania, y su imagen de marca ca¨ªda supone la ca¨ªda de toda la imagen de marca alemana
De modo que hemos pillado ni m¨¢s ni menos que a Volkswagen en una maniobra de esas que se cuentan entre s¨ª los supervivientes de cualquier generaci¨®n de escolares en una cena conmemorativa de la promoci¨®n que enga?aba al cura, pongamos que bolita, cuando ¨¦ste met¨ªa la mano en los bolsillos de los ni?os para ver si hab¨ªa cromos del capit¨¢n Trueno. Bolita persegu¨ªa fines rijosos.
Bolita no sufr¨ªa la repulsa social, porque el principal motivo de su permanencia al mando del aula era mantener el orden, y que el colegio de pago siguiera estando en cabeza del ranking de colegios por la calidad de su ense?anza y el rigor de su sistema disciplinario. Lo de la f¨¢brica de coches alemana, la mayor del mundo hasta que un d¨ªa alguien nos diga que se han colado seis chinas por delante, seg¨²n los analistas de los suplementos econ¨®micos de los peri¨®dicos, ha hecho que se tambalee la valoraci¨®n de la marca VW en todas las bolsas.
Y es que uno de los factores que influye en esa valoraci¨®n es la transparencia. Y Volkswagen estaba haciendo una chapuza que significaba que el padre Bolita ya no hac¨ªa bien su trabajo. Los fabricantes de coches hab¨ªan enga?ado durante mucho tiempo a quien ten¨ªa que supervisar sus emisiones. A largo plazo, esto era un atentado contra la salud de los ciudadanos, compraran el coche que compraran. A corto plazo supon¨ªa que los fabricantes pod¨ªan enga?ar casi a quien quisieran sobre cualquier dispositivo de seguridad: por ejemplo que el l¨ªquido de frenos estuviera en los niveles adecuados.
Y se ha producido la convulsi¨®n l¨®gica, porque adem¨¢s Volkswagen es la mayor industria de Alemania, y su imagen de marca ca¨ªda supone la ca¨ªda de toda la imagen de marca alemana. Los pr¨®ximos spots publicitarios de un coche alem¨¢n ya no se basar¨¢n en esa calidad, sino exclusivamente en las virtudes f¨ªsicas de Claudia Schiffer. Ha pasado con Alemania. ?Una excepci¨®n en la industria? No nos lo queremos creer porque el capitalismo no se lo cree.
Pero si juntamos esto a la estafa puesta en marcha por la City para manipular los tipos de inter¨¦s, tenemos ya capitalismo industrial y financiero metidos en el gran enga?o.
?Habr¨¢ que desconfiar del capitalismo? Como del padre Bolita.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.