Recapitulaci¨®n electoral

Ser¨ªa superfluo reiterar aqu¨ª la importancia de las elecciones catalanas celebradas el pasado domingo. EL PA?S envi¨® a seis redactores a cubrir la campa?a y reforzar as¨ª al equipo de la redacci¨®n de Barcelona, y ha publicado m¨¢s de 1.300 art¨ªculos informativos y de opini¨®n sobre el tema.

Un material ingente que ha provocado quejas, aunque esta vez no ha sido la cobertura informativa sino el apartado de opini¨®n el que ha cosechado la gran mayor¨ªa. Aunque no es mi territorio natural de intervenci¨®n, quiero dejar constancia de algunas de ellas.

Varios lectores me han escrito para mostrar su descontento por lo que consideran falta de equidistancia de EL PA?S en la elecci¨®n de tribunas de opini¨®n. Jordi March Vallmitjana, suscriptor de Barcelona, reclamaba m¨¢s art¨ªculos de estudiosos en apoyo de las tesis independentistas en la carta que me remiti¨® el 14 de septiembre. ¡°Estoy de acuerdo con la mayor¨ªa de art¨ªculos y editoriales que se publican en su peri¨®dico analizando y opinando sobre los desastres de la independencia y su inviabilidad econ¨®mica¡±, dec¨ªa. ¡°La superficie que ustedes usan en reforzar esta idea podr¨ªa ocupar campos de f¨²tbol. No obstante, hay opiniones y estudios de personas muy cualificadas (catedr¨¢ticos, economistas, expertos en relaciones internacionales, etc¨¦tera) con razones t¨¦cnicas y razonadas que defienden la viabilidad de la secesi¨®n. ?No pueden publicar ninguna de estas opiniones t¨¦cnicas en su peri¨®dico (edici¨®n Nacional)?¡±.

Juan Ochoa de Michelena no me escribe para quejarse sino para hacer una propuesta: ¡°Siempre he echado en falta en estos ¨²ltimos a?os ¡ªy ahora ya va siendo urgent¨ªsimo para el futuro de Espa?a¡ª que no hayan publicado ustedes m¨¢s art¨ªculos de an¨¢lisis, en profundidad y comparativos, acerca de los diferentes modelos federales y confederales que existen en el mundo. ?C¨®mo son los modelos estadounidense, alem¨¢n, belga, suizo, canadiense, el de Reino Unido? ?Cu¨¢les son las diferencias ¡ªa veces muy grandes¡ª con respecto al modelo auton¨®mico espa?ol?¡±.

EL PA?S ha publicado m¨¢s de 1.300 art¨ªculos sobre las elecciones catalanas

A las quejas por lo que no se ha publicado se suman las provocadas por lo que se ha publicado. En concreto, dos art¨ªculos han concentrado las protestas de los lectores. El primero ¡ªIndependencia: siga la flecha¡ª estaba dedicado a la Diada y se public¨® el mismo 11 de septiembre en la edici¨®n digital y al d¨ªa siguiente en la impresa. Lo firmaba Rub¨¦n Am¨®n. Las cr¨ªticas que ha recibido se refieren, sobre todo, a la insinuaci¨®n que hace el autor de que los manifestantes hubieran consumido marihuana. ¡°Sorprendido estoy de haber le¨ªdo lo que he le¨ªdo hoy en su peri¨®dico¡±, me escrib¨ªa desde Barcelona Joaqu¨ªn Ricarte Avent¨ªn. ¡°Veo que consideran que las personas que acudieron a la celebraci¨®n de la Diada iban fumados con marihuana. Pero, ?c¨®mo un peri¨®dico como EL PA?S puede publicar eso?¡±.

El segundo texto se public¨® s¨®lo en la edici¨®n digital del 28 de septiembre y ha tenido numerosas reacciones. Se titulaba Desmadre a la catalana, y lo firmaba John Carlin. Varios lectores se han sentido ofendidos tanto por su contenido como por el lenguaje utilizado. Ram¨®n Oria califica de abiertamente insultante el t¨¦rmino ¡°madrile?ito¡± que usa el autor. Miguel ?ngel Nieto Prieto escribe: ¡°Sostener que ¡®el desprecio del PP a los catalanes no existe en un vac¨ªo¡¯ sino que bajo ¨¦l subyace una animadversi¨®n generalizada en la sociedad espa?ola¡± es ¡°una grave acusaci¨®n que [el autor] fundamenta exclusivamente en sus experiencias personales o de amigos¡±. Este lector considera adem¨¢s que el art¨ªculo contribuye a fomentar ¡°el odio y la incomprensi¨®n¡±.

John Carlin me ha enviado la siguiente respuesta: ¡°Tras enterarme de algunas reacciones a ese art¨ªculo me sorprende a¨²n m¨¢s la paciencia de los catalanes que est¨¢n en contra de la independencia; y soy m¨¢s consciente que nunca de lo ajenos que son para muchos espa?oles los conceptos del di¨¢logo y del entendimiento mutuo¡±.

He recibido tambi¨¦n correos de protesta por distintos editoriales. Dos lectores me han escrito para criticar que el peri¨®dico pidiera abiertamente el voto para los partidos no secesionistas.